"Sin duda hoy somos un club más grande que cuando llegamos hace siete años"
Pedro Cedillo vino a Chile cuando tenía 13 años junto a su padre, vicepresidente del Pachuca, para presenciar la final de la Copa Sudamericana 2006 que los Tuzos le ganaron a Colo Colo en el Estadio Nacional.
Hoy el timonel de Everton sueña con celebrar un título de los oro y cielo junto a su pequeño hijo de un año y medio.
"Siempre está la ilusión, es mi sueño obviamente ser campeón acá, es una ilusión que tengo desde el día uno, pero para llegar a eso hay que trabajar con muchas ganas y sacrificio, siempre lo he puesto y ojalá algún día se me pueda cumplir", reflexiona el dirigente nacido en México, pero que vive en nuestro país desde hace siete años.
La última temporada no permitió demasiada esperanza de los hinchas en un logro mayor, sin embargo, Cedillo prefiere destacar en primer lugar lo positivo que le dejó 2022 al club.
"A nivel internacional fuimos el único equipo chileno que avanzó de fase en una copa internacional, tuvimos una muy buena presentación en la Sudamericana, estamos convencidos que, de no ser por errores arbitrales, habríamos llegado más lejos. A nivel local, si bien no logramos el objetivo de estar nuevamente en una copa internacional, tuvimos opciones reales hasta la última fecha con O'Higgins. Fuimos el segundo equipo que menos perdió tras Colo Colo, el segundo equipo con la valla menos batida y creo que lo más importante es que se logró una identidad de juego que hace tiempo no teníamos y por eso se confía en este cuerpo técnico", resume.
- Me imagino que también existe autocrítica, porque la meta que se habían puesto no se cumplió.
- Tuvimos muchísimos partidos que dejamos ir en los últimos diez minutos, el otro día vi una estadística de que en los últimos diez minutos dejamos ir al menos diez puntos. Internamente, la autocrítica es que nos faltó manejar y cerrar los partidos. El mayor ejemplo, y que finalmente nos deja fuera, es el partido con Cobresal en casa. Ibamos ganando 3-1 con un hombre más y nos terminan empatando con un gol a los 85 y al 88. Nos faltó esa tranquilidad para saber manejar el partido y los tiempos. Con esos tres puntos clasificábamos y la tabla es tan apretada que no perdona.
- Cómo trabajan para que no les pase lo mismo en esta temporada. Intuyo que el objetivo es clasificar a un torneo internacional, aunque quizás también piensan apuntar un poco más alto.
- Con los pies en la tierra, nuestra meta es volver a ser protagonistas del torneo, con una directiva de juego, con un plantel que ya se conoce, con un cuerpo técnico en el que estamos confiando. La meta es clasificar a un torneo internacional, se conformó este plantel que es un poco más maduro, tuvo roce internacional, se quedó la mayoría y tenemos este empujoncito de jugadores con mucha jerarquía y calidad, como Luis (Montes) y Sebastián (Sáez), al arco también llegó el Halcón, que posee mucha experiencia. Creemos que hay un equipo que está balanceado, tiene equilibrio y la base ya pasó por una etapa de quedarse cerca y pensamos que con este complemento estamos mejor compenetrados que el año pasado y con un poco más de jerarquía.
- ¿Cuánta influencia tiene el Grupo Pachuca en la conformación del plantel? Hoy pueden contar con Luis Montes, pero el año pasado se llevaron a mitad de campeonato a Lucas Di Yorio.
- Everton es parte del Grupo Pachuca y eso es algo que sin duda nos marca a la hora de hacer las contrataciones. A la hora de negociar es un plus, porque los jugadores entienden que venir a Everton les da una proyección internacional mayor, con ojos de México y España, porque se sumó el Real Oviedo el año pasado al Grupo. No hubiera sido posible que Luis Montes viniera a reforzarnos si no perteneciéramos al Grupo.
- Pero también está el caso de Di Yorio, que se fue a México en su mejor momento.
- Di Yorio no hubiera venido a Everton si no fuéramos parte del Grupo, costó por encima del millón de dólares. Son jugadores que sin el apoyo del Grupo para nosotros sería imposible traerlos. Al formar parte del Grupo, el Everton, como sucedió en el caso de Di Yorio, tiene que aportar para allá, pero si vamos al inicio, el jugador no hubiera llegado si no fuéramos del Grupo.
- ¿Cómo fue la experiencia de ir a Argentina con tres hinchas damnificados por los incendios en Viña?
- A partir de una situación lamentable, como el incendio, tuvimos la fortaleza de brindarle un poco de alegría a nuestros hinchas. Específicamente tras el incendio estuvimos diez días en la zona afectada, visitamos a los hinchas, fuimos al hospital a ver al hincha que lamentablemente se quemó tratando de salvar a su perro. En el torneo en Argentina nos acompañaron siete hinchas, invitados por Everton, tres de ellos afectados por el incendio. En el avión yo iba acompañado de doña Patricia (Escudero) y de Anahís (Oliveros), don Víctor (Velásquez) iba sentado una fila adelante. Ellas estaban muy a la expectativa y me dijeron que porque nunca se habían subido a un avión. Después de tener días para el olvido, el club les pudo dar una experiencia única en sus vidas.
- ¿Cuál es la experiencia del holding en Chile tras siete años acá? Hace un tiempo circularon rumores de que venderían el club.
- La evaluación es positiva, por algo seguimos aquí. Son casi siete años y si ha habido algo constante en este tiempo es el cambio. Hoy la realidad es muy distinta a la que había cuando llegamos en 2016, obviamente tenemos más información, conocemos de mejor manera el mercado local, pero el país y el fútbol chileno han cambiado mucho, primero fue el estallido social y después la pandemia. Son escenarios muy complejos para desarrollar un proyecto y pese a todo eso hemos logrado darle una estabilidad al club tanto en lo administrativo como en lo deportivo, no recuerdo que Everton haya estado siete años seguidos en Primera durante este siglo. No es para fijarse en lo menos, sino tener un desde, para poder decir que Everton ha mejorado su competitividad. También hemos formado jugadores exportables, como Alex Ibacache, que fue a San Lorenzo. Ha sido una buena experiencia, todos los años se dice que el Grupo Pachuca vende, pero no es así, acá estamos, comprometidos con el proyecto. No quiere decir que vamos a estar eternamente, pero sí al día de hoy estamos comprometidos con la ciudad, con el equipo, con nuestra gente, con Chile y si de algo no puede quedar dudas es que lo hemos dado todo. Tanto es así que yo llevo siete años acá, tengo mi casa, se vino mi esposa de México, tengo un hijo chileno que es viñamarino, tiene un año y medio, obviamente ya lo llevo al estadio y estamos comprometidos con el proyecto.
- Hace cinco años dijo que el 2023 Everton sería el cuarto grande de Chile. Ha pasado mucha agua bajo el puente, pero ¿cree que esa promesa sigue vigente?
- Como bien dices, ha pasado mucha agua debajo del puente, ha habido muchos cambios en el fútbol chileno, en el formato de campeonato y también a nivel social y económico. Pero desde que llegamos, como Grupo Pachuca, nos propusimos esa gran meta, que era transformarnos en el cuarto grande y sin duda alguna que hoy estamos más cerca de lograrlo que hace siete años.
- ¿La meta sigue vigente?
- Siempre vamos a aspirar a más, a ser más grandes, tener un mejor club, que el equipo sea más competitivo y soñar siempre con el título. Todos los años cuando hacemos el equipo uno sueña, se ilusiona, hemos venido trabajando para ello. Sin duda alguna hoy somos un club más sólido, más grande, más fortalecido, que ha formado a más jugadores que cuando llegamos hace siete años, no quiere decir que inventamos la rueda, pero sí nos hemos ido acercando a ese objetivo. Queda mucho recorrido por hacer, pero tenemos la voluntad de hacerlo.
- Qué le parece el hecho que otros equipos jueguen en Sausalito. Colo Colo lo ha ocupado un par de veces en los últimos meses. ¿Los complica?
- De acuerdo al convenio de comodato que tenemos del estadio, Everton siempre tiene la prioridad para jugar en Sausalito, nuestra localía debe ser fuerte en nuestro estadio. El uso que se haga por otros equipo o por eventos de otras industrias es un tema en que la municipalidad está a cargo y confiamos en que velan por que se haga un buen uso y la cancha esté en buenas condiciones.
- La dirigencia de Wanderers se quejó hace poco porque el municipio de Viña del Mar no le quería arrendar el estadio.
- Desconozco esas conversaciones, pero creo que Everton tiene que jugar en Sausalito y Wanderers tiene que jugar en Playa Ancha. Si hay alguna complicación para jugar en Playa Ancha, ellos pueden usar el segundo estadio que tengan registrado en la ANFP. Pero en primera instancia, Everton tiene que jugar en Sausalito y Wanderers en Playa Ancha.
"Siempre está la ilusión, es mi sueño obviamente ser campeón con Everton, es una ilusión que tengo desde el día uno".
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