El sábado pasado Sebastián Pereira fue citado por primera vez en Audax Italiano. Pese a que llevaba pocos días entrenando en su nuevo equipo, el técnico Manuel Fernández lo consideró para ir a la banca frente a Palestino.

Así comenzó la segunda aventura fuera de Viña del Mar del promisorio defensa central, quien fue desechado por el cuerpo técnico de Francisco Meneghini y partió nuevamente a préstamo. El año pasado ya había estado cedido en Unión La Calera, donde no tuvo demasiada continuidad.

El jugador oriundo del cerro San Juan de Dios de Valparaíso se ilusiona en esta etapa y señala que quiere desarrollarse en La Florida.

"Audax será un gran desafío, hay bastantes jugadores experimentados en mi puesto y será una linda competencia, me sirve para crecer, estoy en la capital, el equipo juega una copa internacional. Vengo en busca de sentirme bien, retomar mi nivel al máximo y poder mostrar todo mi potencial en este club", señala el defensa central.

En La Calera no tuvo la regularidad que buscaba, pero dice que sumó aprendizaje para encarar de mejor manera su opción en el cuadro verde.

- ¿Por qué razón salió a préstamo nuevamente? Jugó el amistoso contra Independiente en Argentina y pese a que Everton tiene una defensa consolidada, la competencia siempre es buena.

- Antes de volver al club desde el préstamo tenía un par de ofertas para poder salir y el cuerpo técnico estaba al tanto de eso. Además yo estaba notificado de que no entraba en los planes del entrenador, que tenía su defensa lista para este torneo, entonces regresé a la pretemporada solo por contrato, sabiendo que iba a salir de nuevo. En los entrenamientos tuve una conversación con Francisco Meneghini y me explicó sus razones, me dijo que ya tenía a sus defensas para este torneo y que sabía de las ofertas que habían por mí, así que quería decírmelo a la cara. Estoy muy agradecido del profe, porque sabía que yo iba a préstamo pero me consideró en la pretemporada en todos los amistosos y jugué con Independiente, que fue un gran partido y un gran desafío para mí. Me sirvió para darme cuenta que estoy en ritmo de competencia. Le agradezco al entrenador porque fue sincero, así yo también pude buscar otra opción para jugar. A otros jugadores del club que no quería los dejó afuera y no los llevó, en cambio a mí me llevó a pretemporada y amistosos, por lo que pude llegar con ritmo y no empezar desde cero.

- Llama la atención que dejen partir tan fácilmente a préstamo un jugador como usted por segunda vez, considerando que en la zaga siempre hay riesgo de suspensiones, además Barroso tiene 38 años y está expuesto a lesiones.

- Me vine a Audax una semana antes del inicio del torneo y antes de eso pensé que me iba a tener que quedar en Viña del Mar, pero menos mal que se dio esta posibilidad, porque son decisiones técnicas y del club. Si Everton quiere que continúe o no en la institución ya es decisión de ellos. Si piensan que dejándome salir a préstamo puedo crecer y generarle después ingresos a la sociedad anónima, pues me vine con opción de compra, quizás también es bueno para Everton. Hay que tener en cuenta que a fin de 2023 terminaba contrato, pero para ir a préstamo tuve que renovar por un año más, así que extendí mi vínculo hasta fines del 2024, esa fue la condición. Además hay definiciones técnicas de por medio, quizás el entrenador tiene otros gustos y prefiere otro tipo de jugadores, quizás pensó que contaba con otras alternativas si un central se lesionaba. Prefería mil veces que fueran sinceros conmigo y me dejaran salir, antes que tener que quedar un torneo o una rueda estando afuera y perdiendo tiempo de poder estar en otro lado con mayores oportunidades.

- ¿Sus expectativas son seguir en Audax o desea demostrar que puede volver a Viña para triunfar?

- Quiero jugar, estoy súper motivado, llegué a un gran club con buenas instalaciones, profesional, muy ordenado, tengo buenos compañeros y hay jugadores experimentados. Quiero consolidarme acá y si a fin de año Audax quiere ejercer la opción de compra estaría muy agradecido, porque me están dando la oportunidad de competir de nuevo y ser una opción, algo que con Paqui lo veía lejano. Si se da estaría muy feliz. Y si me toca volver también estaré contento, porque la gente me tiene mucho cariño en Everton.

- En términos personales usted también ha crecido, ya es padre hace unos meses.

- Sí, mi hijo nació hace dos meses y medio, es una motivación enorme para mí. Ha llegado a devolverme la alegría que perdí hace mucho tiempo cuando falleció mi papá. Además acá voy a estar con mi mujer, que es muy importante para mí.

- ¿Recuperó la alegría de jugar al fútbol?

- Desde la lesión me comencé a hundir, porque empecé a vivir un duelo que en su momento no tuve tiempo para vivir. Me operaron del ligamento colateral medial derecho, en un partido con Melipilla caí con la articulación y se rompió el ligamento, se suponía que eran tres meses fuera pero el tejido maduraba en seis, sufrí harto dolor, sicológicamente no estaba bien, aunque todo eso me dejó mucho aprendizaje. Venía haciendo un buen torneo y pienso que el problema que tuve en la rodilla me pegó muy fuerte, además que cuando volví me dolía, los movimientos que antes podía hacer no me resultaban, pero ya me siento recuperado. El año pasado en Calera recuperé mi motivación y las ganas de jugar, que las había perdido por la lesión y no tener continuidad en Everton. Ahora llego ilusionado por competir y hacerlo de buena manera, además acá en Santiago estás al lado de la Selección, haciendo un buen torneo se pueden abrir posibilidades, pero mi objetivo de corto plazo es jugar lo que más pueda y ser un aporte.

- ¿Es efectivo que también lo contactaron de Wanderers?

- Tuve una conversación con un dirigente el año pasado, pero quedó ahí. No desmerezco a Wanderers, porque sé todo lo que significa el club y toda la gente que mueve, sin embargo mi intención era seguir en Primera División, así que mi representante buscó la mejor opción para poder seguir creciendo y llegar a mi mejor versión. Quizás la mejor opción en ese momento era Calera, tenía a mi mujer embarazada y viajaba a diario.

"Desde la lesión me comencé a hundir, porque empecé a vivir un duelo que en su momento no tuve tiempo para vivir. Sufrí harto dolor, sicológicamente no estaba bien".

"Si a fin de año Audax quiere ejercer la opción de compra estaría muy agradecido, porque me están dando la oportunidad de competir de nuevo y ser una opción, algo que con Paqui lo veía lejano".

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