A los 80 años muere el cantautor nacional Tito Fernández, "El Temucano"
MÚSICA. El folclórista era conocido por su carrera transversal, la que se vio empañada por acusaciones de abusos.
Agencias
El conocido cantautor nacional Tito Fernández, "El Temucano", conocido por populares temas folclóricos como "Me gusta el vino", "La Casa Nueva" o "Los guatones y los pelaos"; murió ayer a los 80 años en su casa de Puerto Montt.
La noticia la dio a conocer mediante un comunicado público el Hospital de Puerto Montt, donde se atendía habitualmente: "Desde la Dirección del Hospital lamentamos profundamente el fallecimiento del cantautor chileno Humberto Waldemar Asdrúbal Baeza Fernández (su verdadero nombre), mejor conocido como Tito Fernández 'El Temucano', quien fue paciente crónico del recinto hospitalario".
"El paciente falleció en su domicilio de Puerto Montt en compañía de su familia, y por respeto a ellos, no podemos dar mayores detalles sobre su deceso", se dijo.
Fernández inició su carrera en los años 60. Comenzó a componer y actuar sin parar hasta lograr consagrarse como un artista transversal en Chile, una categoría esquiva en el mundo artístico, hasta que por salud y luego por acusaciones de abusos sexuales, su figura comenzó a desaparecer de la escena musical.
Prolífica carrera
Tito Fernández nació en Temuco, pero tempranamente dejó el hogar familiar para entrar a la Fuerza Aérea en Santiago. En la capital se casó y tuvo hijos, pero también se enamoró de la música y fue así como comenzó a recorrer diferentes locales nocturnos del país. Incluso llegó a Bolivia, donde estuvo encarcelado en medio del conflicto entre el Ejército y los guerrilleros del "Che" Guevara.
Pero fue en 1971 cuando de l a mano de su amigo Ángel Parra lanzó su primer álbum, "El Temucano" con el sello a Discoteca del Cantar Popular (Dicap), de las Juventudes Comunistas. Ese sería el primero de más de 40 discos, aunque según una entrevista de 2016, él contabilizaba 96 discos y nada menos que 800 canciones.
Ese álbum lo catapultó como "artista revelación" del año. Para el golpe de Estado, el cantautor fue detenido y liberado con la condición de que se dedicara "exclusivamente a su trabajo". Así fue que, sin salir nunca al exilio, acumuló fanáticos de todas las tendencias políticas. Incluso le acusaron de tener cercanía con la CNI.
"El Temucano" se retiró oficialmente de los escenarios en agosto de 2016 con un show en el Teatro Caupolicán. Consultado por La Tercera si se arrepentía de algo en su vida, dijo: "Hice lo que pude y no pude hacer más. A mí me asignaron algunas tareas, no puedo decir quién ni para qué, pero me recomendaron que no me asilara y que pusiera las palabras 'obrero' y 'trabajador' en una canción. Hice un show homenaje a Víctor Jara en 1978 en el Gran Palace, adentro había una comisión de militares determinando si yo podía seguir actuando o no. Eso me lo dijo en Miami alguien de la CNI que ya jubilado me invitó a un asado: él estuvo ahí, hizo un informe positivo y pude seguir cantando".
Sobre cómo quería ser recordado, respondió: "No quiero ser recordado. Yo sé que va a ser inevitable, por eso le he contado a algunos familiares muchas cosas que van a tener que aclarar cuando yo no esté. Pero no quiero ser recordado. Ya no voy a estar. Punto".
Acusaciones de abuso
En 2020, Tito Fernández fue formalizado por delitos sexuales ocurridos en su Centro Integral de Estudios Metafísicos (Ciem), el que fundó a fines de la dictadura militar y donde él oficiaba como "maestro". Incluso se le investigó por la violación de tres mujeres en el lugar. Todos estos delitos habrían ocurrido entre 2010 y 2016. Según una de las víctimas, en el Ciem, Fernández ejercía presión psicológica sobre sus "seguidoras" y se realizaban rituales con dagas e incluso se hablaba de suicidio.
Tito Fernández cumplió prisión preventiva desde su formalización, el 29 de julio de 2020, hasta el 6 de agosto del mismo año, cuando la Corte de Apelaciones de Santiago revocó la medida cautelar. En 2022 debía llevarse a cabo un juicio por estos hechos, pero no se pudo realizar debido al delicado estado de salud del artista.