Correo
Privilegios
Tras conocerse el llamado telefónico que la diputada Maite Orsini, de Revolución Democrática, hiciera a la jefa de la Dirección de Derechos Humanos de la Carabineros, la general Karina Soza, para ayudar al exfutbolista Jorge Valdivia, quien fue detenido en un procedimiento rutinario, no cabe más que preguntarse: ¿y qué pasó con el fin a los privilegios?
Porque si algo llevó al poder a la izquierda, que hoy gobierna Chile, fue el discurso contra los privilegios, contra los poderosos, contra todas aquellas acciones (como la de la diputada Orsini) que un grupo minúsculo de la sociedad puede hacer de las suyas y las veces que quiera, porque tiene las redes, el dinero, los contactos y el poder.
Y lo seguirán haciendo porque convirtieron el abuso de sus privilegios en una costumbre.
Rodrigo Durán Guzmán
Imacec y proyecciones
La medición del Imacec evidenció una inesperada expansión de 0,4% en la actividad económica, lo que, obviamente, sorprendió a analistas y expertos, cuyas expectativas señalaban una contracción cercana a 0,7%.
Este resultado se explicó mayoritariamente por los avances observados en materia de producción de bienes (que incluyen: minería, industria manufacturera y resto de bienes) y servicios, que compensaron el retroceso de 3,2% del sector comercio.
Lo anterior, sin duda, son buenas noticias para nuestra economía y podría, aunque es muy prematuro asegurarlo, ser una señal de que la desaceleración que observaremos este año pudiera ser más tenue o gradual de lo que se anticipaba, cuyas proyecciones hablan de una contracción para el PIB que podría ubicarse en un rango de -0,5% a -1,5%, ya que un ajuste en estas expectativas sobre la actividad involucran considerar no solo este último Imacec, sino también seguir monitoreando la evolución de las presiones inflacionarias que, dicho sea de paso, han sido muy persistentes, así como de otras variables relevantes tanto del escenario interno como externo, como la evolución del tipo de cambio, el conflicto Rusia-Ucrania, la dinámica de la economía de Estados Unidos y el gigante asiático, así como la situación a nivel país en materia de normativas, reformas y otras disposiciones.
Jennifer Rivera Arroyo Universidad Autónoma de Chile
Política
Volvió tostadita de sus vacaciones la élite política transversal de Chile. Sigue preocupada solo de sus intereses y no se ve ninguna solución a los problemas reales de los chilenos. ¿Para qué les pagamos?
Jorge Porter Taschkewitz
Docentes rurales
El inicio del año escolar es un periodo desafiante para todo el sistema educativo, aún más en el contexto de la reactivación educativa en el que nos encontramos. Pero para los docentes de los 21 establecimientos educacionales que sufrieron graves daños por los incendios forestales en el sur de Chile, este se volvió mucho más complejo: a sus tareas tradicionales se les sumó la necesidad de reconectar con estudiantes y familias que han pasado un verano doloroso, difícil, que les quitó más que sus escuelas, por lo que es clave que como sistema educativo los apoyemos de forma urgente y directa.
En Chile hay pocos profesores y educadores rurales y comúnmente realizan diversas funciones en sus comunidades, más allá de su especialidad. Su experiencia y conocimiento en los contextos en los que trabajan tiene un valor incalculable y cumplen un rol simbólico fundamental para quienes les rodean. Por lo mismo, su papel en el proceso de reconstrucción de las escuelas es más clave del que se ha vislumbrado hasta ahora en la discusión pública en torno a este problema.
Porque sí, la infraestructura es clave para que los alumnos continúen con sus procesos educativos de forma segura. Sin embargo, esto no quita que el principal desafío esté en mantener a las comunidades unidas a pesar de la disgregación momentánea que tendrán que vivir. Los docentes son quienes -teniendo el contacto más directo con sus estudiantes y familias- tendrán que liderar este proceso, pero necesitan más apoyo. Por lo mismo, desde Elige Educar llamamos a las autoridades a trabajar por darles todas las facilidades para que se mantengan trabajando allí donde más los necesitamos, con aquellas comunidades que tan bien conocen.
Óscar Guerra Subdirector ejecutivo de Elige Educar
Ucrania, un año agredida
No hay nada que conmemorar en la agresión rusa a Ucrania. Vladimir Putin, el causante, ha culpado a occidente falseando los hechos de una invasión militar premeditada e infructuosa. Las guerras entre, sus objetivos, siempre pretenden victorias, prestigio, poder, territorios y apoyo internacional. Rusia no ha logrado ninguno, aunque sea una gran potencia militar. No ha podido ocupar Ucrania, solo porciones territoriales devastadas, en avances y retrocesos indeterminados. Carece de apoyos, salvo de incondicionales, y perdido su prestigio como interlocutor confiable.
Putin y sus militares tienen atado su destino a esta aventura bélica como responsables y arriesgan acusaciones de crímenes de lesa humanidad contra civiles. Aumentan las sanciones económicas y financieras de la comunidad de naciones, el país se empobrece y su población se resiente, aunque controle toda oposición. Tampoco hay transparencia sobre sus capacidades bélicas ni sobre fallecidos o heridos en acción. Combaten por amenazas inventadas de ucranianos "nazis" que ponen en riesgo la seguridad de la Federación Rusa, como la de Bielorrusia, por un deber patriótico forzado.
Pese a ser Rusia uno de los Miembros Permanentes del Consejo de Seguridad e impedido todo acuerdo vinculante, la Asamblea General de la ONU ha vuelto a condenarla, por mayoría abrumadora, como en ocasiones anteriores, reiterando su aislamiento y condena internacional como pocas veces en el organismo. No hay señales de que esto varíe, mientras no se intente alguna solución pacífica, por ahora, impracticable ante su negativa.
Samuel Fernández Illanes Académico Facultad de Derecho, Universidad Central de Chile (UCEN)