Justo en su primer aniversario, el Gobierno recibió un duro golpe parlamentario el miércoles, al rechazarse la idea de legislar de una de sus más grandes aspiraciones programáticas, la reforma tributaria impulsada por el ministro de Hacienda, Mario Marcel. Se trataba, plantearon desde la oposición, de una mala reforma que el Ejecutivo le presentó al país y que en ningún momento se abrió a modificaciones o mejoras.

Sin descartar ningún camino alternativo para poder retomar la discusión por el rechazado proyecto y asegurando que lo importante es cumplir el objetivo para que Chile tenga una mayor recaudación y justicia tributaria, el senador y presidente de RD, Juan Ignacio Latorre, enfatizó que como oficialismo no le "cerrarán ninguna puerta al diálogo ni tampoco vamos a renunciar a los compromisos programáticos, que son un beneficio y una necesidad urgente para la ciudadanía".

Pese a su disposición a dialogar, dejó un duro mensaje para la oposición tras rechazar la idea de legislar la reforma tributaria. Demuestra, indicó, "que no está dispuesta a hacer ningún cambio y, de paso, afectan a las pymes".

La derecha, para Latorre, "está siguiendo la música que les pone el Partido Republicano, una derecha radicalizada, que no quiere cambios y que prefiere mantener el modelo de desigualdad imperante".

Cambio de actitud

Para la diputada Camila Flores (RN), del Distrito 6, en el oficialismo deberían "tener en consideración que necesita la mirada de los otros sectores, porque ya que no tienen mayoría en el Congreso para hacer lo que se les plazca". "Nosotros, como oposición vamos, a hacer valer nuestros votos porque lo hacemos con responsabilidad con Chile y la responsabilidad es lo que tiene que mandar", subrayó.

De hecho, sobre el rechazo a la idea de legislar el proyecto de reforma tributaria, la diputada contó que "se le advirtió al Gobierno, se le dijo, incluso se trató de influir con indicaciones para que se hubiese evitado el rechazo y se hubiesen contemplado nuestras visiones". Sin embargo, lamentó que "se cerraran absolutamente al diálogo ni estuvieran disponibles para que pudieran ser incorporados los elementos que para nosotros eran importantes".

Pensando en la futura agenda del Gobierno, Flores advirtió que "si no hay un cambio de actitud, si no se entiende cuáles son las reales prioridades que tienen los chilenos, si sigue cerrándose a llegar a acuerdos, por supuesto que será muy difícil que votemos sus proyectos a favor".

Abiertos a lo que venga

Su compañero de bancada, el diputado Andrés Celis, dijo que "si la reforma tributaria se rechazó, fue porque era muy perjudicial y nociva". No obstante, recordó que están "abiertos a todos los acuerdos que sean proempleo, procrecimiento y que permitan financiar los proyectos que el Gobierno tiene en carpeta".

Sobre la recaudación tributaria, explicó que "hay también proyectos de ley a los que estamos abiertos, como una mayor recaudación por concepto del litio, por royalty, que están hoy día en el Parlamento y que recaudan cerca de dos puntos del PIB", aseguró. Además, se mostró abierto a que se "ingresen las normas antievasión y antielusión que recaudan cerca de un 1,6% del PIB".

El programa no se cae

Aunque la diputada oficialista Francisca Bello (CS), del Distrito 6, no cree que el programa de Gobierno se derrumbe con este traspié, reconoce "que fue un golpe a la realización de los cambios estructurales y las reformas que iban en beneficio directo de la ciudadanía". Lo que viene ahora, proyectó, "es una rearticulación del Gobierno, que es obvia". Un plan de aquí a tres años que implica, bajo su lógica, "tener que sentarse a conversar de manera clara y responsable para fijar nuestras metas y objetivos con este nuevo antecedente".

Por su parte, y "lamentando profundamente esta derrota para el país", la diputada Camila Rojas (CS) busca dar vuelta la página y superar este momento. "Somos Gobierno, hay que seguir gobernando", sostuvo. Para que se aprueben "las 40 horas y la reforma de pensiones requeriremos asegurar los votos, hablar uno a uno, convencer, lo que se ha hecho antes pero todavía con más fuerza".

Estrategia equivocada

El problema que ve el oficialista parlamentario Tomás Lagomarsino (Partido Radical) es que "el Gobierno equivocó la estrategia, condicionando cada paso siguiente a los pasos previos". Lamentó que "cada derrota actual del Gobierno es una derrota futura, al no poder concretarse los siguientes desafíos que tiene por delante".

Sugiere la generación de "una nueva estrategia en la que avance cada tema por cuerdas separadas y que no se condicionen unas reformas con otras".

"Se le advirtió al Gobierno, se le dijo, incluso se trató de influir con indicaciones para que se hubiese evitado el rechazo".

Camila Flores, Diputada (RN)

"Lo que viene es una rearticulación del Gobierno, que es obvia, un plan de aquí a tres años que implica tener que sentarse a conversar de manera clara y responsable".

Francisca Bello, Diputada (CS)

La necesidad de lograr mayores acuerdos y cambiar el foco, fortaleciendo el ahorro y la inversión, son algunas de las lecturas que hacen en el sector productivo regional respecto al rechazo de la reforma tributaria.

"Es necesario revisar la propuesta en su totalidad", comentó el presidente de la Cámara Regional del Comercio de Valparaíso (CRCP), José Pakomio, quien agregó que se deben replantear varios aspectos: "Qué es lo que se espera recaudar, a qué se destinaran los recursos y, en esa misma línea, explorar si hay posibilidades de reducir gastos en otras áreas que permitan otra fuente de recaudación, por ejemplo, eliminando iniciativas sociales ineficientes y combatiendo el comercio informal".

Añadió que se necesita una reforma tributaria que "fortalezca el ahorro y la inversión, y el foco debe estar puesto en disminuir el gasto público, reforzar las medidas de fiscalización de evasión y elusión".

Pakomio subrayó que lo acontecido el miércoles en la Cámara debe ser aprovechado para crear una legislación que de confianza a todos los sectores. "Esperamos que las autoridades tomen el rechazo de esta reforma como una oportunidad para llegar a consensos más amplios con los distintos actores, generando espacios de conversación que sirvan para eliminar incertidumbres y, de esta manera, generar una reforma sostenible que dé confianza a los inversionistas y a los chilenos".

"era malo"

Para el presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Valparaíso, Gabriel Benavente, lo acontecido es una buena noticia. "Simplemente, porque era malo para el país y el camino incorrecto. Se concentraba en gravar el ahorro y la inversión y tenía un impacto importante y transversal en la mediana y pequeña empresa, vital para la economía regional y nacional", explicó el líder gremial.

Enfatizó que el Estado necesita recursos permanentes para cubrir las demandas de la ciudadanía en forma sostenible, "pero dado el momento que vive el país y los problemas de la economía, hoy debemos concentrar nuestros esfuerzos, tanto las autoridades como los privados, en promover la actividad y facilitar a todo nivel las tramitaciones de proyectos, la materialización de inversiones trabadas o postergadas y en atraer nuevas".

También sostuvo que se deben alcanzar los consensos básicos necesarios que permitan generar condiciones de estabilidad, respeto a la institucionalidad, certeza jurídica y seguridad ciudadana. "Esto es lo reactivará las inversiones y toda la economía local y nacional, y permitirá que haya más y mejores empleos y oportunidades, que es lo que la ciudadanía reclama".

Agregó que debe mejorar la eficiencia del gasto público, eliminando la burocracia que desalienta el emprendimiento y el desarrollo de las pymes, y aumentar la formalidad.

No cumplió expectativas

Por su parte, el presidente de la Asociación de Empresas de la V Región (Asiva), Gerald Pugh, subrayó que el proyecto abordaba modificaciones profundas al Código Tributario, pero que no fueron adecuadas, o bien, no cumplieron con las expectativas de todos los sectores.

"Este escenario nos obliga nuevamente a evaluar el sentido e impacto que podrían generar los cambios en nuestra economía. Por lo mismo, esperamos que se abran las puertas para discutir las reales necesidades que tienen las empresas y emprendedores, quienes son los principales motores de la economía, con el fin de garantizar el desarrollo del país en el largo plazo", dijo.