Nuevo director regional del Serviu le baja el perfil a críticas
REGIÓN. Señaló que los cuestionamientos de la cúpula de Convergencia Social son "parte de la actividad política" y definió sus prioridades tras asumir el cargo.
Luego que Rodrigo Uribe fuese elegido el 14 de marzo como nuevo director regional del Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) y asumiera sus funciones en la institución el pasado martes, el exseremi del Minvu durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet y quien trabajó también en la Municipalidad de Quilpué como secretario comunal de Planificación bajo la administración de Mauricio Viñambres, se refirió a los cuestionamientos y al rechazo que produjo su nombramiento en Convergencia Social (CS) a nivel regional, sobre todo por su cercanía con el exalcalde dela Ciudad del Sol, bajándole el perfil a las críticas.
Sus palabras se dieron en el marco de la firma del convenio por parte del Minvu, Serviu y Esval que busca reforzar el Plan de Emergencia Habitacional a nivel regional y que asegurará que las nuevas viviendas cuenten con servicios básicos óptimos como agua potable y saneamiento. 31.000 familias en la región se verán beneficiadas.
Respecto a las duras críticas que recibió por parte de la cúpula de dirigentes sociales del partido, sobre todo por parte de la diputada y presidenta regional de CS, María Francisca Bello, y el core Sebastián Farfán (CS)-, en conversación con este Diario, el nuevo director regional del Serviu se tomó con calma los señalamientos, indicando que forman parte de la política y que las autoridades se encuentran constantemente en evaluación.
"Las críticas son parte de la actividad política, de la gestión social y de la administración pública. Uno podrá hacerlo mejor o peor, pero es parte de que uno constantemente está en evaluación; no tan solo las autoridades, sino que todo el mundo está hoy día siendo evaluado. Cada uno tendrá su opinión y eso se respeta", puntualizó Uribe.
Al ser consultado por si no toma estas críticas como un ataque personal y que podrían dificultar, eventualmente, su trabajo y gestión en el cargo, respondió que "no, yo creo que es parte de la situación normal, siempre van a haber detractores o gente que opina a favor o en contra de uno".
En relación a las prioridades que tendrá bajo la dirección del Serviu, explicitó que "la principal prioridad es la emergencia habitacional, poder generar viviendas, (...) y por eso me pareció tan importante esta actividad con Esval porque es un nudo crítico que tenemos en la región. La factibilidad de Esval, todo el proceso de concesión y la parte técnica que se requiere y que a veces no se ve, pero que finalmente termina siendo para comprar un terreno, y en esto la posibilidad de tener un aliado nuestro en este proceso sin duda que va a cambiar el tono de la posibilidad de construir más viviendas a nivel regional".
Principales desafíos
En ese sentido, es sabido que el principal desafío que enfrenta la actual administración es poder cumplir la meta propuesta por el Gobierno en el contexto del Plan de Emergencia Habitacional, el cual para la Región de Valparaíso contempla la construcción de 31.000 viviendas entre 2022-2025.
En ese escenario, Uribe subrayó que "estamos haciendo todos los esfuerzos posibles y este es un hecho muy concreto. Ahora bien, los recursos y la disposición están, tenemos una cantidad importante de demanda, pero sin duda que lo que hay que factibilizar son los distintos proyectos en la región y generar mayores terrenos para viviendas, eso es un desafío. A veces la gente tiene que esperar muchos años para obtener una vivienda digna y en eso vamos a hacer todos los esfuerzos por cumplir la meta".
Otros proyectos
El exseremi del Minvu también se refirió a la importancia de avanzar en proyectos emblemáticos para la región que se encuentran con retraso, como Parque Barón y el mejoramiento del borde costero Concón-Reñaca.
"Ya hemos tomado contacto con el alcalde de Concón, Freddy Ramírez, y vamos a tenerlo dentro de las prioridades fundamentales en la región, al igual que el Parque Barón. Además, son dos medidas presidenciales, tienen acento y van a permitir mejorar la calidad de vida de las familias en la medida que se vayan consolidando. (...) Los equipos técnicos y profesionales que tenemos están muy atentos a los proyectos para poder sacar adelante estas prioridades que son fundamentales", manifestó.
"Lo que hay que factibilizar son los distintos proyectos en la región y generar mayores terrenos para viviendas, ese es un desafío".
Rodrigo Uribe, Director regional del Serviu
31.000 viviendas nuevas es la meta planteada por el Gobierno para enfrentar en la región la crisis habitacional.