"Tetris", el videojuego que casi destruyó a la Unión Soviética
Dirigida por Jon S. Baird ("Filth") y estrenada en Apple TV+, la película recreó las pugnas legales en torno a uno de los softwares de entretenimiento más famosos de la historia.
A medida que la cultura de los videojuegos se expande como un territorio inexplorado, sus historias inspiran producciones audiovisuales que indagan en aquellos entramados de emprendimientos y batallas legales. La última es "Tetris" -recientemente estrenada en Apple TV+-, crónica de la creación y comercialización de uno de los juegos más emblemáticos, exitosos, simples y perfectos de la historia.
Que detrás del proyecto esté el británico Jon S. Baird, quien adaptó la novela "Filth" de Irvine Welch, adelanta un poco el estilo del filme. Esto es un thriller -al estilo de Guy Ritchie ("Snatch: cerdos y diamantes")- que narra, con agilidad y algo de ironía, las pugnas corporativas tras la creación del juego. El estilo visual apela a la fuente de inspiración: cada personaje que entra en escena es presentado como un avatar de estética pixelada al estilo de los antiguos softwares.
"Tetris" fue creado en la Unión Soviética de principio de los 80 por un funcionario llamado Alekséi Pázhitnov. Primero, se popularizó en el entorno de las oficinas computacionales oficiales ("su juego casi destruye la Unión Soviética", le dice al programador un agente del Partido en una escena, aludiendo a la distracción de los funcionarios por culpa del entretenimiento), hasta que un joven llamado Vadim Gerasimov lo llevó a IBM. Su creciente popularidad en Europa -especialmente en Hungría- lo alzó como un fenómeno hasta que apareció en escena Robert Stein, un empresario que se hizo con los derechos para Norteamérica. En esos años de Guerra Fría, "Tetris" fue promocionado como "fabricado en Estados Unidos, creado en el extranjero".
La película comienza en la Feria Internacional de Electrónica de Consumo de Las Vegas cuando Henk Rogers, un diseñador de videojuegos interpretado por Taron Egerton, fracasa en vender su apuesta, "Go", pero se empecina en comercializar su nuevo descubrimiento: "Tetris". Lo que vendrá es la crónica de una obsesión que llevará al pequeño emprendedor a enfrentarse con magnates poderosos, bestias corporativas que pondrán trabas y dificultades. También están las amenazas rusas, durante los últimos tiempos del frente soviético, que convierten a la película en una suerte de thriller de espías.
Con distancia de sus personajes y un montaje dinámico que recuerda al Scorsese de juventud, "Tetris" funciona como una cruza entre "Red Social" y "Puente de espías". Aunque la película se desinfla hacia el final (no es, digamos, el equivalente cinematográfico a la sencilla perfección del juego), Jon S. Baird acierta en contarnos -junto al guionista Noah Pink ("Genius")- una historia desconocida por el público general que tiene los suficientes ingredientes como para resultar atractiva. Otro relato de burocracias y poder en tiempos de transformaciones políticas y económicas.
"Tetris" fue cread en la Unión soviética de principio de los 80 por alekséi Pázhitnov.
dato al margen
Alekséi Pázhitnov y Henk Rogers revisaron el guion antes de filmar. Lo aprobaron a pesar de que dijeron que "es una película de Hollywood. No es nuestra historia". Licencias del cine.
Por Andrés Nazarala R.
apple tv