LA TRIBUNA DEL LECTOR Temporada de vendimias
POR FRANCISCO GODOY IMPERATORE, GERENTE GENERAL CORPORACIÓN DE TURISMO VALPARAÍSO REGIÓN POR FRANCISCO GODOY IMPERATORE, GERENTE GENERAL CORPORACIÓN DE TURISMO VALPARAÍSO REGIÓN
La Región de Valparaíso se caracteriza por poseer una diversidad de territorios, con costas, valles y montañas. Y una de sus fortalezas, sin duda, es su conexión y cercanía con la Región Metropolitana, uno de los mercados que atrae una mayor cantidad de turistas durante todo el año.
Y a pesar de que se cree que con la llegada de marzo acaba la temporada alta, hoy tenemos una gran oportunidad de revertir esa imagen. Al término del verano se inicia una de las actividades más características para nuestra región: las Fiestas de la Vendimia, un espacio de celebración que reúne a miles de visitantes y que en Valparaíso Región sabemos disfrutar bien.
¡Y es que quién no querría tener cuatro valles vitivinícolas! Con terrenos aptos para obtener vinos blancos y tintos, nuestra región posee una privilegiada y variada oferta en los valles de San Antonio, Aconcagua, Marga-Marga y Casablanca, que junto con Valparaíso es la capital mundial del vino en un listado que incluye destacados destinos a nivel internacional.
Es así como los vinos de San Antonio y Casablanca, que son de clima frío, poseen una gran intensidad aromática, con una muy buena acidez natural. Esas zonas se caracterizan por tener los mejores vinos blancos de Chile. Lo mismo en el caso de Aconcagua y Marga-Marga, que gracias a su clima tienen una excelente maduración, obteniendo reconocidos cabernet sauvignon, carmenere, entre otros.
Gracias a estas cepas, nuestra región es reconocida no sólo por el turista local, sino que también por los visitantes extranjeros, quienes llegan durante todo el año a disfrutar de las distintas viñas, viendo el proceso de elaboración del vino, maridarlo y degustarlo con elaboraciones locales, creando una experiencia sensorial única y conociendo de cerca las tradiciones del campo chileno.
Ahora, entre marzo y abril, los valles vitivinícolas de nuestra región viven su gran fiesta, donde cada visitante puede celebrar junto a las personas que han realizado la ardua labor de cosecha para obtener los frutos que posteriormente se transformarán en vino.
Un producto típico chileno que genera pertenencia y que forma parte de nuestra identidad local y nacional.
Hoy, de la mano del enoturismo, tenemos una gran oportunidad para seguir descentralizando y desestacionalizando la oferta turística, por lo que hacemos un llamado a que disfruten de nuestros cuatro valles vitivinícolas y tengan una experiencia inolvidable de la mano de los productores y emprendedores locales.