Todas las mujeres que amaron a Huidobro
"Pequeño dios" (Alfaguara) es el retrato de la vida peligrosa del poeta creacionista, narrada por sus grandes amores, en la novela de Marilú Ortiz de Rozas.
Al abrir el libro de Castellano en nuestra adolescencia, entre los fragmentos escogidos de la literatura, la poesía de Vicente Huidobro nos cruzaba como un rayo al plasmar la emoción del amor que descubríamos con versos inolvidables como estos: "¿Irías a ser muda que Dios te dio esos ojos?".
Hoy nos toca descubrir otras voces, las de las mujeres que se vincularon profundamente con el creador, a través de Marilú Ortiz de Rozas, que las hace monologar en su novela "Pequeño dios" (Alfaguara). Ellas son Manuela Portales, Ximena Amunátegui y Raquel Señoret, dispuestas en orden cronológico a la vinculación con Vicente Huidobro.
Marilú Ortiz de Rozas es periodista y doctora en letras en Francia. Cuenta que esta novela parte "desde una fascinación. Escribes, y después te das cuenta de lo que hiciste. Admiro mucho la poesía de él, lamento horrores lo poco que se lee no solo a él sino a todos los poetas en Chile. Yo partí haciendo esta investigación hace mucho tiempo, porque trabajé en un libro de su obra temprana. Ahí leí su obra completa, quedé conmocionada".
Ortiz explica que su propósito era "Infundir una inyección de adrenalina. Generalmente la vida y la obra se reflejan, y yo quería contarlas con luces y sombras, quería llamar la atención de este personaje que nos estamos perdiendo, que lo reconocieron y reconocen súper poco para lo que es él".
Una inyección de adrenalina directo al corazón del poeta. El momento para investigar y escribir fue el preciso, porque aún quedaban voces vinculadas a las mujeres que eligió: "Pasé toda la pandemia conversando por teléfono con el hijo y la hija de Ximena Iommi y de Raquel Señoret, también tenía muy guardada una entrevista a Vladimir García-Huidobro, el único hijo de Vicente Huidobro que yo conocí".
Acerca de cuán completo queda el retrato del poeta, Ortiz considera que "es mucha más amplia la biografía de Huidobro, yo agarré tres momentos y recorrí toda su obra. Hay temas de infancia en que no me metí tanto. ¿Quién era Vicente Huidobro cuándo nació? Es conjetura. Menos es más, y creo que se pueden hacer una buena idea de su vida a través de estos relatos".
La escritora no elige ninguna mujer como su favorita: "Es súper difícil, porque es como si me preguntaras a cuál de mis hijas quiero más, no te lo puedo decir. Creo que me identifiqué mucho con las tres siendo ellas súper diferentes. El personaje de Manuela Portales es una mujer muy abnegada, muy buena; la Ximena Amunátegui es un personaje súper libre. Nadie es tan bueno ni tan libre, sino que oscilan entre esos extremos".
"Yo creo que tengo cosas de las dos. Espero no ser tan sumisa en la vida como fue Manuela, ni tengo esa libertad impresionante de Ximena, mandarse a cambiar con un poeta, mandarse a cambiar con el otro", concluye.
Huidobro y Neruda
Ortiz de Rozas cita muchos fragmentos de Huidobro ligados al amor. Para ella, esa faceta "era 'power', era maravilloso, tenía una inspiración, era capaz de decir cosas muy bellas con palabras simples, no ocupa palabras sofisticadas ni un lenguaje complicado, son imágenes potentes. Era espectacular, para enamorarse".
Si son los mejores poemas de amor que existen, Ortiz, que trabajó con la obra también con el Nobel en "Viaje al corazón de Neruda", afirma que "es cosa de gustos, Neruda también tiene grandes poemas espectaculares, era más sensual. Ahora Huidobro no era esencialmente un poeta romántico, él renegó de su primer libro por considerarlo retórico y hueco. Era muy ambicioso intelectualmente Huidobro. Aspiraba a una poesía más metafísica, filosófica, una poesía más universal".
Sobre cuánto influyó la época en la intensidad vital y creativa de estos dos grandes poetas, Ortiz asegura que "es determinante. Es el auge del comunismo, se la jugaron por esa opción. También en las reacciones de todas estas mujeres, que fueron muy viscerales. Se podían morir en cualquier minuto, se vivía con la intensidad de que cada día era el último"
En sus clases, la periodista encontró otro testimonio importante, el de la nuera de Huidobro, que le narraba secretos familiares para entender esta relación entre estos grandes escritores: "Contaba que las peleas entre los poetas lo hacían para llamar la atención, que eran todos amigos, que lo hacían porque necesitaban público. Imagínate ser poeta en esa época, los libros de Huidobro los autoeditaba. Usaban este mecanismo de las peleas y el boche a veces en demasía".
En el caso puntual del poeta que convoca la novela, la autora agrega: "Vivió en Francia mucho, en la guerra murieron algunos de sus amigos como Apollinaire, un gran poeta, con el que empezó los caligramas. En estos días estos poetas serían ecologistas, estarían dando las batallas por el cambio climático, no veo que sean las mismas misiones o las mismas luchas de esos años".
"Pequeño dios" presenta una serie de flancos polémicos, Uno es la edad de Ximena Amunátegui cuando inician su relación con Huidobro: "Era otra época. Hoy día recibiría el nombre de pedofilia, pero hace unos años las monarcas europeas estaban casadas a esa edad. Trasladar juicios de otras épocas confunde todo. Ximena Amunátegui era muy joven, pero sabía lo que estaba haciendo, estuvo 18 años con él, fue quien más estuvo con él. No creo en ningún caso que él la secuestró o la sedujo", asevera Marilú Ortiz.
marilú ortiz de rozas, autora de "pequeño dios", es periodista y doctora en letras en francia.
Por Cristóbal Gaete
Cortesía de la autora