"Veo muy complicada la próxima licitación del Festival"
Una serie de oficios a diversos organismos estatales presentará el diputado Andrés Celis, a raíz de los problemas denunciados con respecto a la productora Bizarro, a cargo del Festival de Viña del Mar, por lo que pedirá que se revisen los contratos. Su intención también es que se corrijan aspectos de cara a la próxima licitación del evento, la que debe quedar zanjada en 2024.
Uno de los oficios va dirigido a la Fiscalía Nacional Económica, y explicó que "este se trataría por el tema del eventual monopolio que existiría en el tema del Festival de la Canción de Viña del Mar, porque en definitiva el estamos hablando de un contrato de concesión que se celebra entre el municipio de Viña del Mar y la unión temporal de dos proveedores, que en este caso es TVN y Canal 13, pero nos enteramos que aparece una tercera parte o un subcontratista que se llama Bizarro, que es una empresa productora, y quiero conocer cuál es el rol que que ellos juegan, no sé si existe algún contrato entre esta unión temporal de estos proveedores, si existe un contrato de exclusividad, etcétera.
- ¿Por qué la Fiscalía Nacional Económica?
- Porque al parecer este contrato de concesión entre la Municipalidad y estos canales le daría la exclusividad a esta productora para traer a los artistas, y en definitiva, lo que este contrato haría es cederle todo lo que dice relación con el Festival de Viña, en el sentido en de que se encargue de todo lo que es la producción del Festival, le da la exclusividad de la producción del Festival en cuanto a los artistas, y solamente que sean ellos los que puedan traerlos, e incluso en relación con la empresa que vende los tickets, y eso también vulnera lo que son las bases del propio contrato de concesión, porque el contrato de concesión establece que las tarifas o los precios los tiene que fijar el municipio en acuerdo con el canal. Es decir, hay una serie de aspectos que al parecer el canal le habría cedido a Bizarro, y que por estar estipulados en el contrato de concesión, esto estaría absolutamente prohibido. Además hay un tema que tampoco es menor: el contrato de concesión establece sumas de dinero que tienen que ver con la cantidad que tiene que invertir o gastar el canal o los canales para la contratación de artistas, para la producción del evento, entonces aquí no es cuestión que tú gastas o inviertes lo que lo que tú quieras, sino que tú tienes que cumplir con los requisitos que dice el contrato, tanto en calidad, como la cantidad que tú ofreces en UF, y eso tiene que acreditarlo a través de una auditoría ante el propio municipio. Entonces creo que la Fiscalía Nacional Económica debe ver si es que ahí existiría algún tipo de de de monopolio por parte de Bizarro, en tener la exclusividad en un evento en el que solamente ellos pueden contratar artistas, y que además solamente ellos pueden elegir con qué empresa ticketera trabajar.
- Tengo entendido que también oficiará a la Contraloría o al Ministerio Público...
- Ahí estoy en la duda, pero estoy más bien proclive a hacer una presentación a la Contraloría para que revise bien el contrato de concesión, porque si voy al Ministerio Público no podría ir ante la Contraloría, ya que al ir a la justicia ésta se va a inhibir de conocer el asunto. Entonces lo estudiamos con los abogados y haría una presentación a la Contraloría para que revise el contrato de concesión, si se ha cumplido con cada una de las obligaciones que tiene el municipio en relación con la producción, realización, transmisión y una serie de exigencias que van relacionadas con lo que hoy día estaría desarrollando Bizarro. Y también voy a oficiar al Consejo para la Transparencia (CPLT), incluso ya me junté con su presidente el día jueves. Voy a oficiar al CPLT para solicitarle una serie de antecedentes, por ejemplo, si se ha cumplido con los montos relacionados con la producción, organización, y que me envíen todos los documentos que acrediten que se ha cumplido con aquellos montos, e incluso voy a solicitar que se me envíe el listado completo de las más de 14 mil invitaciones que el municipio dispone para regalar, a quienes se les entregó.
- ¿Va a oficiar también al Servicio de Impuestos Internos?
- Sí, también voy a oficiar al Servicio de Impuestos Internos para que me señale cómo opera el contrato de concesión en relación con Bizarro y con los canales de televisión.
- ¿Cómo evalúa la actitud del municipio frente al tema?
- Yo creo que no hay peor ciego que el que no quiere ver, esto le puede producir un daño patrimonial tremendo al valor del Festival, con esto la oferta que puede venir para el próximo Festival puede ser paupérrima.
- ¿Cree que esto también repercute en una merma en la calidad del espectáculo? Porque esta última edición fue muy criticada por el exceso de reggaeton, de trap, versus ediciones anteriores que eran con artistas mucho más variados, para distintos públicos...
- Lo que pasa es que cuando tú lo concentras en una sola productora, al canal no le importa quién venga, lo que le importa al canal es tratar de tener la menor cantidad de pérdidas y tratar de vender lo más que pueda su parrilla televisiva, entonces el canal se olvida de lo que es la parrilla de artistas, se desliga, no se interioriza y ni le interesa preocuparse del Festival. Lo que se hace ahora es un negocio para la productora, que toma el Festival y negocia trayendo a los artistas.
- ¿Cómo ve el panorama frente a la nueva licitación, que debe zanjarse el próximo año?
- La veo muy complicada, justamente por esta práctica que que se está haciendo a través de esta productora, que, ojo, no es culpa de Bizarro, porque esto es responsabilidad de las autoridades de no haberse percatado de que existía este contrato de exclusividad con una productora. Bizarro aprovechó una oportunidad.
- ¿Qué aspectos deberían corregirse para esa licitación?
- Yo creo que hay que hacer dos licitaciones, una pensando en la Quinta Vergara y otra en el tema de televisarlo, junto con el tema de las redes sociales. Por eso que yo estoy pensando en una licitación más extensa, yo haría una combinación, y no colocarle cantidad de años.
"Esto le puede producir un daño patrimonial tremendo al valor del Festival, la oferta que puede venir para el próximo puede ser paupérrima".