PDG busca fórmulas para salir de la crisis en que está inmerso
POLÍTICA. Diputado Gaspar Rivas propone radicalizar el discurso tomando elementos de izquierda y de derecha.
En crisis se encuentra el alicaído Partido de la Gente (PDG), que perdió a tres de los seis diputados que tenía su bancada; en la reciente elección de consejeros constitucionales no obtuvo ninguno en todo el país y resultaron últimos en cantidad de votos; y recientemente Pedro Gubernatti -el brazo derecho de su líder y excandidato presidencial, Franco Parisi-, renunció a la colectividad e incluso dejó el programa "Bad Boys", que se transmite por Youtube.
Al respecto, el diputado por el Distrito 6 Gaspar Rivas considera que "el partido tiene que aprovechar la oportunidad de esta crisis en la que está para reinventarse y tomar rumbos nuevos. Me refiero no a rumbos que lo alejen del centro político, sino que es redefinir el concepto de centro, dejar el discurso moderado tradicional, el concepto de centro tradicional en el que dicho centro está ubicado en una en una posición intermedia, que no es ni chicha ni limonada, a medio camino entre la izquierda y la derecha, y pasar a una concepción nueva de centro en que éste se construye con discursos potentes, incluso si se quiere hasta radicales de izquierda y derecha".
"tomar banderas"
El legislador señaló que "eso planteé desde el día número uno, luego de la debacle que ocurrió en la elección de consejeros constitucionales, el tomar banderas. Me refiero específicamente a tomar banderas que son propias de la izquierda y la derecha: de la derecha frenar la inmigración descontrolada y combatir sin miedo, sin tapujos la narcodelincuencia desatada; y de la izquierda, la defensa del de los derechos sociales, la redistribución de la riqueza y la protección de los recursos naturales".
A su juicio, "ese es el nuevo eje que tiene que tener el Partido de la Gente, y eso basado en un análisis reflexivo crítico de lo que fueron los dos procesos constituyentes. En esos procesos constituyentes, hace dos años y hace unos días atrás, los grandes triunfadores fueron los discursos radicales, primero de izquierda, luego de derecha; no hubo espacio para los discursos moderados, que fueron los grandes perdedores, entonces continuar con estos discursos moderados va a conllevar solamente a no tener ningún tipo de representante".
En ese sentido, Rivas recordó que "otros partidos de discurso moderado, como el Partido Radical, la Democracia Cristiana, el PPD, también fueron borrados del mapa constitucional. Un partido de centro solamente va a tener una representación potente en tiempos normales, en tiempos que no son de crisis".
Aquello, explicó, es porque "en los tiempos de crisis la gente, como ya perdió todo y no tiene nada que perder, está dispuesta a arrojarse en brazos de de discursos más radicalizados, y ahí están los hechos, que son los resultados de los dos procesos constitucionales que han habido en los últimos años".
Líder en estados unidos
Consultado sobre qué tan complejo resulta intentar revertir esta crisis cuando el líder del partido, Franco Parisi, está en Estados Unidos y prácticamente no viene a Chile, reconoció que "evidentemente que siempre va a ser mejor que el el líder y excandidato presidencial este aquí en Chile, no en la lejanía. Él hizo todo lo más que podía en la última campaña, entendiendo que vive al otro lado del mundo, pero eso, lamentablemente, no fue suficiente, aun cuando se agradece el enorme esfuerzo, el gesto de haber venido a hacer campaña durante una semana con los candidatos y haber estado en el cierre de campaña de los mismos aspirantes al Consejo Constitucional. Pero, por supuesto, eso no obsta que siempre el ideal sea que el el líder del partido tiene que estar en el territorio chileno".
Con respecto a la renuncia del brazo derecho de Parisi, Pedro Gubernatti, quien tuvo públicas diferencias con Rivas, el parlamentario dijo que "él tendrá sus motivos, sus razones, yo las desconozco. La verdad es que el desempeño que a veces tuvo, con críticas rayanas en los disparos en los pies al propio partido, desde un órgano que si bien no era oficial, pero se reconocía como parte del propio PDG, esas críticas nunca fueron la mejor idea, o positivas".
Rivas recordó que Gubernatti "fue uno de los principales acusadores de la bancada que no votó por la opción del PDG en la elección de la mesa presidencial de la Cámara hace seis meses atrás, y en vez de haber intentado hacer recomposiciones privadas, como hace unos días atrás trató de hacer a través de un chat, en su momento desparramó opiniones para todos lados, y ese era el momento de haber hecho chats internos para llamar a la unidad, pero no, él optó por desparramar para allá y para acá en los medios públicos".
Frente a ello, añadió, "después de seis meses, yo, que gozo de buena memoria, no estuve dispuesto a colaborar con una persona que, cual si no hubiese pasado nunca nada, ahora, después de habernos criticado y trapeado el piso con nosotros, venía a darnos instrucciones casi mesiánicas de lo que nosotros teníamos que inmediatamente hacer para salvar el partido, como si la responsabilidad subyaciera en nuestros hombros, y casi como si nosotros fuésemos niños pequeños que teníamos que hacer caso a una persona que nos hablaba en un tono casi paternalista".
Mejores perspectivas
Ahora que Gubernatti renunció al PDG, Rivas cree que hay mejores perspectivas para recomponer la relación interna, dado que "su accionar era disruptivo, en vez de buscar la unidad. Al menos hace seis meses atrás, provocó más daño todavía del que se había generado con sus críticas, tratándonos de traidores, de vendidos a la izquierda, etcétera. No recuerdo los conceptos exactos, pero iban en esa línea, que por culpa nuestra la izquierda radical pro Apruebo estaba en la testera, y creo que eso no venía al caso, no aportaba nada, no ayudaba a la unión, no debió haberse hecho en público, ese era el momento para haber hecho chats internos, pero no se hizo, y el momento no era seis meses después".
Consultado sobre si está abierto a una alianza con otros partidos de centro, considerando el reciente resultado electoral, Rivas dijo que "es posible", aunque hizo notar que "se nos podría achacar que al ir solos nos fue mal, pero recordemos que los grandes ganadores, el Partido Republicano, que sacó el 45% del Consejo, fueron también solos. Entonces la explicación que yo encuentro, reitero, es el discurso, ellos tenían un discurso radical contra la migración y contra la delincuencia, que caló hondo en una ciudadanía cansada de la invasión migratoria y cansada de la narcodelincuencia totalmente impune, mientras que el Partido de la Gente tenía un discurso un poco más moderado, y eso también pasa la cuenta, bajo la misma la lógica que yo estoy planteando".
Reestructuración
Por su parte, el secretario general del PDG, Emilio Peña, advirtió que "esta elección dejó no solamente al PDG fuera del proceso, sino que también a otros partidos que son mucho más conocidos, que tienen mucha más trayectoria". Para revertir la situación, indicó que están "trabajando los análisis internos respecto precisamente a cómo se configuró esta campaña, revisando lo vinculado con el aspecto comunicacional, el trabajo territorial, y ahora enfocándonos directamente en todo lo que tiene que ver con las próximas elecciones municipales, volcándonos al territorio, generando nuevas áreas de trabajo, nuevas posibilidades que se van a levantar en los próximos días. Toda una reestructuración interna".
Agregó que "cuando venga la próxima elección, también tendremos que analizar lo bueno, lo malo y lo feo de las elecciones anteriores, vamos a tener que sopesar esos puntos de vista, pero también le vamos a preguntar a toda la militancia cuál es la opinión que tienen respecto a un eventual pacto que se pueda generar".
Consultado sobre si comparte la visión planteada por el diputado Rivas en torno a radicalizar su discurso, tomando elementos de la izquierda y la derecha, Peña sostuvo que "eso va en la línea de lo que nosotros proponemos. De hecho, el centro político debe nutrirse de diferentes aspectos, uno no tiene una condición desde la política de tener una visión propia solamente, sino que también tiene que ver que hay buenas ideas en la izquierda, hay buenas ideas en la derecha, pero siempre y cuando estén dentro de los márgenes de lo que uno defiende".
En ese sentido, aseguró que "queremos un Estado más social, totalmente, pero no queremos un Estado grande, y eso hace la diferencia en un concepto y otro. De todas maneras, en las próximas semanas nosotros vamos a generar un congreso ideológico a nivel nacional para definir los bordes donde nos vamos a mover y de esa forma tener mayor claridad como organización política, con participación de todas las personas, de qué es lo que identifica al PDG de manera definitiva y qué es lo que vamos a defender de manera conceptual, dónde nos posicionamos y hasta dónde vamos a llegar como organización política en defensa de los conceptos que podrían ser tanto de izquierda como de derecha".
"El partido tiene que aprovechar la oportunidad de esta crisis en la que está, para reinventarse y tomar rumbos nuevos".
Gaspar Rivas, Diputado Distrito 6
"Vamos a generar un congreso ideológico a nivel nacional para definir los bordes donde nos vamos a mover".
Emilio Peña, Secretario general del PDG
3 de los seis diputados que llegaron al Congreso en 2021 por el PDG renunciaron al partido.