Luis Silva destaca a Pinochet como "estadista" y Boric lo rebate: "Fue un dictador, corrupto y ladrón"
POLÉMICA. Las principales autoridades del Gobierno criticaron duramente los dichos del consejero constitucional republicano en una entrevista.
Agencias/Redacción
Las principales autoridades de Gobierno salieron ayer a criticar duramente a Luis Silva, el consejero constituyentes más votado, miembro del Partido Republicano y parte del grupo que redactará la nueva Constitución, quien valoró de forma positiva el régimen de Augusto Pinochet (1973-1990).
En declaraciones a Emol TV, Silva describió a Pinochet como "un gran estadista" y pidió que "se haga una lectura ponderada de su Gobierno". "Hay un dejo de admiración porque el hecho de que creo que fue un gran estadista, un hombre que supo conducir el Estado", afirmó antes de subrayar que "no se debe simplificar o reducir con toda la gravedad que tiene esos 17 años a las violaciones de los derechos humanos". "Porque creo que entonces nos privamos como chilenos de una comprensión equilibrada de nuestra historia y cuando eso ocurre somos muy malos intérpretes del presente. Hay un desafío ahí, especialmente para las generaciones jóvenes, de superar esa lectura dicotómica del gobierno de Pinochet", agregó.
Preocupa en la moneda
La vocera del Gobierno, Camila Vallejo, expresó una gran preocupación" por este tipo de discursos e insistió en que el objetivo debe ser hacer "un ejercicio de memoria, de reconocer lo que sucedió en nuestra historia, de no negarlo, de reparar, de señalar la verdad y hacer justicia, pero a la vez pensar también en nuestro presente, y en nuestro futuro". "A 50 años del golpe cívico-militar nos preocupa que exista negacionismo y se pretenda validar un golpe de Estado, una dictadura, que violó derechos humanos, que masacró a parte de nuestro pueblo y generó heridas hasta el día de hoy", subrayó.
"Más allá de las declaraciones en particular (de Luis Silva), en los 50 años del golpe, no sólo valoremos la democracia y el respeto a los derechos humanos, sino que trabajemos en el presente por fortalecerla. Porque todos los problemas de la democracia hay que solucionarlos, como decía el Presidente, con más democracia, y nunca con menos, y nunca con salidas fáciles o autoritarias", agregó Vallejo.
En la misma línea, la ministra de Interior, Carolina Tohá, opinó que "ningún dictador merece admiración. Ciertamente, Pinochet que lo conocimos de cerca no, ni él ni ningún otro".
La polémica estalló 24 horas después de que se publicara el resultado del Barómetro CERC-MORI, que examina la transición desde 1989, en el que se apuntó que más de un tercio de los chilenos apoyan el "legado" del régimen de Pinochet, quien recupera imagen y la dictadura no es condenada unánimemente (…). No existe en occidente ningún otro dictador que haya sobrevivido el paso del tiempo como lo ha hecho Augusto Pinochet", asegura el estudio, en el que se detalla que el 36% de los chilenos piensa que los militares "tenían razón" para dar un golpe de Estado, otro 36% dice que Pinochet "liberó a Chile del marxismo" y 39% cree que el dictador "modernizó la economía chilena".
Boric en twitter
El Presidente Gabriel Boric respondió más tarde a Silva en Twitter: "Augusto Pinochet fue un dictador, esencialmente antidemócrata, cuyo gobierno mató, torturó, exilió e hizo desaparecer a quienes pensaban distinto. Fue también corrupto y ladrón. Cobarde hasta el final hizo todo lo que estuvo a su alcance x evadir la justicia. Estadista jamás".