Estudios coinciden en mala evaluación de la calidad del transporte
OPINIÓN. Descontento con frecuencia, seguridad y paraderos revelan encuestas de U. de los Andes y Fundación Piensa.
Importantes coincidencias con los resultados de la Encuesta de Calidad de Vida en la Región de Valparaíso, realizada desde 2014 por la Fundación Piensa, registra un estudio sobre el transporte público efectuado a nivel nacional por la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Los Andes, que constata que la baja frecuencia de buses y la inseguridad son los principales factores de descontento entre los usuarios.
El estudio, publicado esta semana por El Mercurio, se realizó sobre la base de una muestra estratificada de cinco grupos socioeconómicos, integrada por 1.221 personas de Arica a Punta Arenas, y a sus resultados se agrega otra percepción crítica, que es la vinculada a la calidad de los paraderos.
De acuerdo a la investigación de la Universidad de Los Andes, el 65% de los encuestados considera que este equipamiento es regular o malo, y apenas un 2% lo encuentra óptimo, cosa que también podría estar asociada a una sensación de inseguridad, dados los robos de que han sido víctimas en distintas ciudades personas que esperaban locomoción colectiva en estos refugios.
En cuanto a evaluación por regiones del país, en el norte el 40% de la muestra apuntó a la seguridad personal como el mayor problema del transporte público, mientras que en el centro y el sur lo hizo el 33%.
Micros regionales
"Los datos que revela el estudio de la Universidad de los Andes van en la misma línea que los datos mostrados en la última 'Encuesta de Calidad de Vida de Fundación Piensa'", señala Maximiliano Duarte, director de Estudios de la entidad.
Ejemplifica con la mala calificación en la regularidad del servicio, cosa que el estudio regional también ha venido constatando en los últimos años. "La evaluación de la frecuencia del transporte público a nivel regional muestra una baja estadísticamente significativa. Si al año 2021 uno de cada tres encuestados la valoraba positivamente (nota 6 y 7), hoy lo hace solo uno de cada cuatro".
"La baja frecuencia del transporte se puede deber a varios factores como, por ejemplo, una mayor congestión vehicular a propósito del aumento del parque automotriz, o una mayor demanda en algunos tramos específicos", comenta Duarte.
"Sin embargo, en nuestra región ya es bastante conocido que el problema de fondo dice relación con un déficit del orden de 4.000 conductores. Si las autoridades no resuelven ese asunto, entonces cualquier promesa que apunte a una mayor flota de vehículos o mejor frecuencia de recorridos simplemente será una venta de humo", recalca.
Seguridad personal
En cuanto a la seguridad personal en el transporte público, que es el segundo problema más mencionado en el estudio de la Universidad de los Andes, "ese es un tema que siempre ha estado presente en la región y los datos nuestros han sido bien consistentes", complementa el director de Estudios de Piensa.
Detalla que las encuestas de la Fundación muestran que alrededor del 20% de pasajeros se sienten seguros en las micros. "La diferencia es que a eso tenemos que sumarle un problema adicional asociado al metro. Y es que, históricamente, las personas siempre se han sentido seguras en este medio de transporte, sin embargo, el año pasado hubo una baja significativa en la percepción de seguridad, pasando de un 44% a un 37%".
Duarte dice que ahí hay un desafío importante "que no debiese ser tan complejo de resolver como sí ocurre con el caso de las micros, porque las estaciones de metro son limitadas -no se puede recoger pasajeros entre estaciones como sí ocurre con las micros- y no hay tantas alternativas de escape para delincuentes que se dedican a los hurtos o 'lanzazos", por lo cual "una mayor presencia policial en estaciones podría ser una buena solución".
Las notas de 2022
La Encuesta de Calidad de Vida en la Región de Valparaíso se realiza desde 2014 en forma presencial y considera un universo de 1.650 personas mayores de 18 años, de todos los grupos socioeconómicos, residentes en las 10 principales comunas de la zona.
Genera el Índice de Percepción de Calidad de Vida a partir de la evaluación que los encuestados realizan de ocho componentes que son trabajo, educación, seguridad pública, servicios de salud, transporte público, equipamiento urbano, servicios para la vivienda y satisfacción por la vida.
El último estudio, correspondiente a 2022 y encargado a la consultora Ipsos, ubica al transporte público en el penúltimo lugar de los componentes, con un índice de 218, en un rango de 1 a 1000. Sólo equipamiento urbano está más abajo, con 205 puntos.
El 78% de la muestra evalúa mal la calidad del transporte público urbano en la región; el 76% consigna la misma percepción respecto de la frecuencia del transporte urbano diurno, el 95% opina igual sobre la frecuencia del nocturno y el 75% califica con baja nota a los paraderos de locomoción colectiva.
"El tema de la seguridad siempre ha estado presente en la región. Nuestras encuestas muestran que cerca del 20% de pasajeros se sienten seguros en las micros".
Maximiliano Duarte
Jefe de Estudios F. Piensa
2022 sólo uno de cada cuatro encuestados de la zona valoraba positivamente (6 y 7) frecuencia del transporte.
78% de los consultados en última "Encuesta Calidad de Vida" en la región evalúa mal la calidad del transporte.