"Nos dejaron botados y tenemos que ir salvando a los niños, ahora con la salud mental estamos ahorcados"
Preocupado está el sacerdote Enrique Opaso, capellán del Refugio de Cristo, fundación que tiene seis hogares de niños y dos liceos técnicos, debido a que ha ido en considerable aumento el número de niños con problemas de salud mental que les han sido derivados, lo que está generando problemas de convivencia y dificultades económicas para poder darles una adecuada atención.
El tema le inquieta incluso más que un eventual daño a la imagen que puedan sufrir como fundación, luego del bullado caso de la fundación Democracia Viva, que recibió $426 millones vía trato directo.
- A raíz del caso fundaciones, ¿cómo ve el tema de la probidad en la política?
- Bueno, salió una encuesta ahora en que el 76% de los chilenos dice que Chile es corrupto. Hoy día, estos niños que eran los paladines de la moral, mira lo que han hecho. Yo creo que aquí le han hecho un daño no sólo a su partido político, sino que al Gobierno de Boric y al país, ese es el problema. Esto es muy grave, y más grave es que el Presidente se vaya de viaje en vez de estar aquí comandando las soluciones para esto.
- El contralor ordenó congelar la toma de razón de todos los convenios del Estado con fundaciones. ¿Eso afectó al Refugio de Cristo?
- Después que el contralor dijo eso, cientos y cientos de fundaciones que tienen niños, niñas, adolescentes, adultos mayores, enfermedades, de todo, pegamos el grito en el cielo y, efectivamente, él dijo: "No, no van a ser todas estas, sino que van a ser todas estas del último tiempo, que son vía trato directo, que no postularon". Porque todo eso un tongo para sacar plata para otra cosa. Pero ahí sí que hay plata, pues.
"No es la manera"
- ¿Cree que raíz de esto se empiece a enlodar el nombre de todas las fundaciones, que caigan todas al mismo saco y que, finalmente, la imagen del Refugio de Cristo también pueda resultar perjudicada?
- No, no, no, de ninguna manera, esta fundación y muchas otras tenemos un camino muy importante. Además que a nosotros todos los meses vienen a controlarnos los gastos y son muy minuciosos. Me encantaría que nos dieran una subvención directa sin postular, porque, claro, haríamos maravillas, pero no es el camino, no es la manera.
- ¿Para que requieren con urgencia una subvención directa?
- Nosotros como fundaciones tenemos algunos temas difíciles, por ejemplo, el 80 bis, una ley que dice que el Estado puede mandarnos a quien se le ocurra, aunque no haya cama, aunque no haya espacio, aunque no haya nada, y tenemos que recibir estos niños. Además, esto se paga el día del níspero, se ha pagado, pero muy tarde; entonces, tampoco podemos nosotros jugar con los niños, jugar con su futuro, jugar con la con la dignidad de los niños que tenemos. Y eso ellos tienen que verlo. Yo creo no es difícil hacer que nosotros podamos tener una subvención por salud mental. Fíjate que en general, en todo Chile, en todas las residencias nosotros nunca tuvimos problemas de salud mental, y con el tiempo, yo diría unos siete ocho años, esto ha ido aumentando mucho y ahora tenemos un porcentaje de niños con problemas de salud mental muy graves. Partimos con 10%, y ahora yo creo que vamos llegando al 50%, lo que significa que tenemos un porcentaje de niñas y niñas que necesitan con urgencia que el sistema de salud, el sistema de control de drogas, hagan algo, porque si no, nosotros la verdad es que vamos a tener que ir haciendo lo mismo que han hecho otras fundaciones, que es ir cerrando, porque no podemos seguir manteniendo este sistema. Nosotros vamos a hacer también una declaración, como han hecho otras fundaciones, de modo de explicarle a la ciudadanía que veces un cierre de una residencia es por el bien de los niños, porque no podemos tenerlos en estas situaciones sin poder ayudarlos. No puede ser que tengamos que pagar millones de pesos por psiquiatras y psicólogos que atiendan a los niños. El sistema de salud no funciona y el Estado no sabe vincular Salud con Desarrollo Social, que es un ministerio que es un desastre; ni con Vivienda ni con nada. Nos dejaron botados y tenemos que ir salvando a los niños, porque nosotros nunca hemos dejado de recibir a un niño en nuestras residencias, pero ahora con la salud mental estamos ahorcados.
"Con voluntad"
- ¿Han tenido que cerrar algunos hogares ya?
- No. Gracias a Dios, todavía no hemos cerrado ningún hogar, pero hemos vivido situaciones de dolor y de sufrimiento muy grande por no poder hacer con nuestros niños y niñas lo que quisiéramos hacer, hacerlo bien, porque cuando un niño o niña tiene una crisis, que son muy constantes, el hogar puede quedar sin ni un vidrio parado y rompen lo que pillan. Eso genera a los niños más pequeños una situación de susto y de angustia muy grande, lo que no es posible tolerar.
- ¿Cómo se sale de esto?
- Con voluntad. Yo creo que en las situaciones que han producido que hogares hayan cerrado, sobre todo Cotolengo, que es muy importante, nosotros creemos que el Estado tiene que tomar parte de esto; yo pido a los parlamentarios de la Región de Valparaíso, donde funcionamos nosotros, que al leer esta entrevista tomen cartas en el asunto, nos pregunten "cómo podemos ayudar", porque esto puede ser una crisis gigantesca en la región, y nosotros no queremos estar disponibles para eso, y por eso este es un S.O.S. a la clase política y al Gobierno para que miren con otros ojos a las fundaciones que están trabajando con niños, niñas y adolescentes y adultos mayores. Si nos pasaran una subvención directa de 420 millones de pesos, solucionaríamos el problema dotando a nuestros hogares con mejor personal y con camas que nos permitan atender salud mental.
"Estos niños que eran los paladines de la moral, mira lo que han hecho. Yo creo que aquí le han hecho un daño no sólo a su partido político, sino que al Gobierno de Boric y al país".