Canciller afirma que otorgar medalla a Garzón fue una "decisión presidencial"
GIRA. El exjuez español que ordenó la detención de Pinochet hoy cumple una sanción por corrupción. Diputado republicano: viaje de Boric ha estado "lleno de gustitos personales e ideológicos".
Una medalla por la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado entregó el Presidente Gabriel Boric al exjuez español Baltasar Garzón, quien ordenó la detención de Augusto Pinochet en Londres, durante 1998. El reconocimiento otorgado el sábado generó críticas debido a que Garzón respaldó la demanda marítima de Bolivia contra Chile y en 2012 fue inhabilitado por 11 años desde el Poder Judicial de su país a raíz de un caso de corrupción vinculado al Partido Popular (PP).
El canciller Alberto van Klaveren explicó ayer que dar una medalla a Garzón fue "una decisión presidencial. Como ministro de Relaciones Exteriores y parte del gabinete, obviamente respeto una decisión de carácter presidencial. El tema de quién estuvo informado, yo creo que es un tema absolutamente irrelevante".
"Como ministro de Relaciones Exteriores no puedo revelar las conversaciones que he tenido o las opiniones que he emitido respecto a distintos actos. Es mi función como canciller apoyar la labor del Presidente y eso estoy haciendo", subrayó el secretario de Estado desde Bruselas, donde participa en la cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), como parte de la delegación presidencial.
Van Klaveren, asimismo, consideró que "es irrelevante cómo se ha tomado esa decisión (del reconocimiento). Siempre hay un proceso de consulta obviamente, estas son decisiones compartidas por los equipos que organizan las giras, y la verdad es que mi opinión en ese tema es simplemente menor e irrelevante".
Además, "el señor Baltasar Garzón es un jurista, un abogado, los abogados justamente ejercen su profesión y, cuando es a nivel internacional, a veces asesoran a distintos países", fundamentó el titular de RR.EE. a causa del trabajo del exjuez en la demanda de Bolivia en La Haya.
También dijo que la medalla que le entregó Boric fue la misma que le fue entregada al cantante Joan Manuel Serrat el sábado en España.
Respaldo del pc
El secretario general del PC, Lautaro Carmona, dijo ayer que "Pinochet no pudo jamás haberse escondido en la demencia de manera cobarde para arrancar de la Justicia por la vía de su responsabilidad directa en tanto crimen, en todo lo que significó lo que ha dicho todo el mundo, incluyendo reiteradamente Naciones Unidas, si no hubiera sido por la determinación del juez Baltasar Garzón, al tratar de juzgarlo por crímenes de lesa humanidad vinculados a la Operación Cóndor".
"Lo que ha hecho, en función de eso el Presidente, es ponerle, digamos, un simbolismo, algo que es dato reconocido a nivel planetario por todas las comunidades de derechos humanos", señaló Carmona.
La declaración
Boric en España dijo además que convocará a los partidos políticos a firmar una declaración conjunta por los 50 años del golpe, frente a lo cual Lautaro Carmona señaló que "me llama profundamente la atención que haya sectores que a priori se plantean no participar" por "un tema formal y no de contenido".
El exprecandidato presidencial del PC, Daniel Jadue, sin embargo, afirmó en YouTube que "si no disputamos el pasado, dejamos que (ganen) los republicanos, la ultraderecha, DC y algunos socialistas que hoy día son cómplices del golpe de Estado".
El diputado republicano Cristián Araya dijo en radio Cooperativa que la gira presidencial "se ha abocado a puros temas del pasado, (...) llena de gustitos personales e ideológicos".
El senador Manuel José Ossandón (RN) agregó en Radio Pauta que "Boric ganó (las elecciones) con un fraude ideológico. (...) Llegó al Gobierno mintiendo. (...) Habló de probidad, amiguismo", así como de "los 30 años. (...) Si hubiese dicho la verdad en campaña, que estaba en contra de los retiros de las AFP, que no iba a perdonar el CAE, hoy no sería Presidente de Chile".
Desde La Moneda, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, dijo sobre la declaración sobre los "50 años" que "obviamente el llamado que hace el Presidente es una invitación, no es una obligación, pero esperaríamos que todos y todas se sientan convocados, en pleno siglo XXI, a tener una condena transversal y sin miramientos al golpe de Estado y a la violación de los derechos humanos".
Es "bastante ilógico que existan todavía personas que justifiquen o avalen las rupturas democráticas y además con una perpetración muy violenta", aseguró.