Katherine Escalona M.

Continúa la polémica por las responsabilidades tras dos socavones en terreno dunar en la calle Montemar de Cochoa, en Viña del Mar, que tienen en riesgo a los edificios Kandinsky, Miramar Reñaca A y B y Santorini. A días del segundo socavón (ocurrido el lunes), donde aún no existen medidas de contención definitivas, resurge el informe de la recepción final de obras del edificio Kandinsky, la primera edificación en estar en riesgo tras el derrumbe de una ladera de duna de más de 600 metros de extensión, suscitado el 23 de agosto pasado.

En el documento, que se requirió vía Transparencia al municipio, queda establecido que en la recepción de obras del Kandinsky no se verificó si el proyecto tenía pertinencia ambiental, según lo exige la Ley 19.300, que aprueba la Ley de Bases Generales de Medio Ambiente.

El certificado de la recepción del citado edificio está firmado por el director de obras de la Municipalidad de Viña del Mar, Julio Ventura.

Condicionantes

La citada norma, en el párrafo 2° del Sistema de Evaluación Ambiental, artículo 25 bis, agregado el 26 de enero de 2010, establece que "las Direcciones de Obras Municipales no podrán otorgar la recepción definitiva si los proyectos o actividades a los que se refiere el artículo 10 no acreditan haber obtenido una resolución de calificación ambiental favorable".

Esto recae en proyectos inmobiliarios y de desarrollo urbano, más saneamientos y otros. Según queda establecido en el documento solicitado a la Municipalidad de Viña del Mar, el certificado de recepción definitiva de obras del edificio Kandinsky, que se efectuó con fecha 10 de septiembre de 2013, está catalogado como urbano y el informe del arquitecto señala que "las obras se han ejecutado conforme al permiso aprobado, incluida sus modificaciones".

Como antecedentes adjuntos se dio cuenta de un informe del arquitecto que certificó que las obras fueron realizadas en base al permiso aprobado; un informe de la empresa, el constructor en que se detalla "las medidas de gestión y control de calidad adoptadas en la obra"; un informe del revisor independiente; fotocopia de la patente municipal; libro de obras; certificado vigente de inscripción; certificado de reposición de pavimentos y obras de ornato y otros.

El escrito detalla que no se entregaron en el listado como documentos adjuntos la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) del proyecto, el comprobante total de derechos municipales en caso de haber convenio de pago, la memoria de cálculo y planos estructurales de las modificaciones (cuando proceda), el certificado de revisor de proyecto de cálculo estructural y el certificado de dotación de agua potable y alcantarillado emitido por la empresa de Servicio sanitarios o por la autoridad sanitaria, entre otros.

Sí se dio cuenta del certificado de agua potable, el certificado de dotación de alcantarillado, el certificado de declaración de la instalación eléctrica interior, la declaración de la instalación interior de gas y el certificado de instalaciones de ascensores y montacargas.

La inspección de recepción de la Dirección de Obras (DOM) de Viña del Mar realizada al edificio Kandinsky fue el 23 de agosto de 2013, casi una década antes del primer socavón que tiene en riesgo a la construcción.

El edificio habitacional de 19 pisos tiene una superficie de 8.990,72 metros cuadrados, 34 bodegas, una bodega común, 87 estacionamientos y 34 departamentos.

Impacto ambiental

Sobre la situación, el abogado del movimiento "Duna Viva", Gabriel Muñoz, aclaró que "en el caso del edificio Kandinsky tenemos el documento que acredita que Julio Ventura, el actual director de Obras Municipales, recibió este edificio en el año 2013 y en ningún momento ni en ningún registro queda establecido que pidió lo que correspondía por ley, que era el Estudio de Impacto Ambiental como lo específica la norma".

Por esta razón, afirmó, "el movimiento Duna Viva ha solicitado vía Transparencia todos los antecedentes de los otros edificios comprometidos en ese espacio. Contamos con los antecedentes de Vimac, Hoy Eluchans, el edificio Kant y Makroceano. La Suprema y la Corte de Apelaciones señalaron en su momento que todo el Plan Regulador de Viña del Mar carece de una evaluación ambiental estratégica que están en la Ley 19.300".

Demandas judiciales

Dado el riesgo que existe en avenida Costa de Montemar, con edificios desalojados, vecinos se organizaron y están activando acciones legales. A la causa que prepara Muñoz y de vecinos del Kandinsky, ahora se suma la acción legal de los copropietarios del edificio Santorini. La abogada urbanista que representa a los residentes de dicha torre, Jeanette Bruna, dijo que se apunta a "buscar medidas que obliguen a la autoridad a actuar de manera eficiente, con la debida coordinación entre los distintos servicios, de manera de cautelar el derecho a la vivienda que hoy no ejercen porque se dio una orden de desalojo por la autoridad sin que existan informes técnicos que permitan identificar riesgos. No hay soluciones ni plazos. El desalojo sin plazo y la falta de medidas técnicas para solucionar los daños producidos por el colapso del colector y las obras de mitigación del MOP, provoca una vulneración y amenaza el derecho de propiedad".

La directora de la Unidad Vecinal 105 de Reñaca, Patricia Devia, señaló que han acompañado a los vecinos y "todos los días estamos monitoreando". Detalló que por seguridad ante robos y ocupación irregular, "Seguridad Pública y Carabineros han dispuesto puntos fijos de vigilancia para evitar estas situaciones". En el área hay un control preventivo de seguridad.

"El actual director de Obras recibió este edificio (Kandinsky) (...) y en ningún momento queda establecido que pidió lo que correspondía por ley".

Gabriel Muñoz, Abogado "Duna Viva"

"Hay una responsabilidad también del sector privado con respecto a lo que construye. No todo es tirarle responsabilidad al Estado".

Jessica López, Ministra de Obras Públicas

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Ayer, en un punto de prensa, la ministra de Obras Públicas, Jessica López, fue clara e hizo un llamado de atención por las responsabilidades que se buscan tras los dos socavones -a 100 metros cada uno- que amenaza la estabilidad de edificios en la avenida Costa de Montemar y que apuntan al Ministerio de Obras Públicas (MOP) por una presunta mala ejecución del colector y las medidas de mitigación. La secretaria de Estado manifestó que "hay una responsabilidad también del sector privado con respecto a lo que construye. No es todo es tirarle responsabilidad al Estado, es un poco patudo".

Detalló que "uno no pide permiso para hacer cuestiones que no tienen mucho sentido. Si no hay responsabilidad en las empresas respecto a lo que hacen, no pueden presentar cualquier proyecto" y agregó que "supongo que las personas que compraron ahí son personas informadas, son departamentos bien caros y habrán tenido todos los antecedentes a la vista de dónde estaba montada esa obra".