"Con una estructura a la que le falta poder, la gestión estará coja"
Desde que asumió el Gobierno Regional, a Rodrigo Mundaca lo acompaña un jefe de gabinete con quien comparte militancia en Modatima. De profesión sociólogo, Rodrigo Faúndez es quien define todos los contenidos estratégicos del gobernador y hoy está en conversaciones con la izquierda oficialista y extraoficialista (sharpista) para garantizarle a Mundaca su reelección.
De paso, y aunque si bien no lo confirma, Faúndez sería carta al Congreso Nacional por el Distrito 6, precisamente la zona interior de la región que vio nacer al Rodrigo Mundaca que hoy se conoce.
-¿Rodrigo Mundaca gobernador es igual al dirigente social? ¿Encontrarse en el poder lo obligó a cambiar?
- Sin duda, ser parte de un Gobierno Regional te obliga a tomar decisiones, involucrarte en desafíos constantes que, al final, cotidianamente, te obligan a aprender. El cargo en sí te obliga a mediar y encontrarte constantemente con frustraciones, no solamente por el cargo, sino por la institucionalidad del Estado y su burocracia, que enlentece los procesos. Y uno quisiera que los cambios fuesen mucho más rápidos.
- Pero la institucionalidad los obligó a adaptarse...
- Más que nada nos obligó a frenar un cambio y decir "vamos a seguir impulsando con el mismo ímpetu las transformaciones", pero adaptadas a esta institucionalidad. Eso en el cotidiano te obliga a cambiar y te abre la posibilidad de nuevas ideas, porque desde el movimiento social se piensa en el cambio como algo casi lineal e inmediato y no es así.
- Mundaca es crítico del Gobierno central, mostrando cierta decepción por unas expectativas iniciales que no se concretaron. ¿No cree que el Frente Amplio también tuvo que adaptarse a la lentitud de la institucionalidad?
- Probablemente sí, porque hay fuerzas políticas en el Parlamento, de la derecha y de la ultraderecha que ha crecido mucho, que se niegan a la posibilidad de cambios y el Gobierno está, de cierta manera, amarrado a la hora de hacer los cambios que propuso. Eso no quita que exista una posición crítica por parte del gobernador hacia ciertas actitudes de La Moneda y ciertas autoridades que no respetan el mandato del propio Presidente, cuando prometió que terminaría su periodo con menos poder.
Críticas al gobierno
- ¿Contra quiénes del Ejecutivo apuntan?
- Hay autoridades del Ejecutivo que derechamente no han querido profundizar la descentralización o que la desconocen. Por ejemplo, el anuncio del tren Santiago-Valparaíso. Cuando el gobernador se enoja y plantea una crítica política a la visión centralista del Ejecutivo, que no lo consideró en una decisión tan importante para la Región de Valparaíso. Lo invitaron al punto de prensa, pero nadie se reunió con él para conversar sobre el proyecto. Ahí hay un ejemplo concreto de que en Santiago no están mirando el proceso de descentralización y que no se respeta a la primera autoridad electa de la región.
Dificultades de gestión
- ¿Cuál ha sido el conflicto más complejo que han enfrentado en estos dos años?
- Un conflicto muy potente y con múltiples aristas que nos tocó directamente fue la intoxicación masiva de Quintero-Puchuncaví en 2022. El gobernador debió poner su capital político a disposición de enfrentar el conflicto, coordinándonos con el nivel central, ministerios, alcaldes, con la población. También fue en ese contexto que el Gobierno anuncia el cierre de Codelco, los trabajadores se paralizan y comienza a darse la contradicción entre trabajo y medioambiente.
- ¿Qué los complicó de ese episodio?
- Que en contextos así desaparece la posibilidad de diálogo y mediar una situación como esa, tratar de resolverla, proponer una alternativa de solución y ponerse a la cabeza de esa solución, nos puso en mucha tensión a todos. Además, que el conflicto se vuelve aún más complejo cuando no depende de ti la solución y muchos actores, en una situación compleja, se tienen que poner a conversar. Ahí se miden tus relaciones, tu capital político y cómo lo utilizas, tu liderazgo y también tu temple.
- ¿Se frustra el gobernador de no tener el poder que quisiera?
- La descentralización es débil. Si hablamos de descentralización financiera, por ejemplo, no hay nada. Esperamos que la Ley de Rentas Regionales tenga una buena salida. Ahora se tiene que aplicar la ley de royalty, pero nos enteramos recién que la plata que entrará, finalmente, será parte del presupuesto que ya teníamos. No se sumará un delta adicional, sino que la van a incorporar como base y no habrá un 30% más de presupuesto, que era lo que esperábamos. Con una estructura a la que le falta poder, plata y capacidad administrativa, siempre la gestión estará un poco coja.
Trabajar la reelección
- ¿Cuáles son hoy las prioridades del Gobierno Regional y también en la reelección?
- El gobernador lo repite donde puede. Las prioridades son agua y medioambiente. Ya sabemos la cantidad de conflictos hídricos que se derivan de la apropiación ilegal del agua y de la sobreexplotación. Después, hemos hablado de la idea de una región de derechos, con el énfasis en tres grandes ámbitos: vivienda y habitabilidad; salud, donde en los últimos meses hemos bajado harta inversión; y seguridad, que es una demanda transversal de la población.
- ¿Están conversando con los diferentes actores, sociales y políticos, pensando en la reelección?
- La base que sustenta el Gobierno Regional de Valparaíso, sin duda, son las organizaciones y el movimiento social, pero también tenemos un buen diálogo, una relación permanente de escucha y retroalimentación, con los sectores políticos más formalizados por decirlo así. Creo que el Frente Amplio y el Socialismo Democrático es el sector natural al que las fuerzas progresistas de la región tienen que direccionar su quehacer. Nosotros nos sentimos parte de esa trayectoria y compartimos mucha agenda común.
- ¿Pese a los desencuentros que han tenido?
- Claro que hay desencuentros por el proceso de descentralización y los agravios que algunas autoridades cometen contra la primera autoridad y contra la descentralización misma, pero eso se circunscribe a ese ámbito. El ámbito de las relaciones políticas es más llano y fecundo.
- ¿Sería un error que el oficialismo presente una candidatura paralela?
- Creo que sería un despilfarro y desaprovechar un gran liderazgo, que tiene una inmensa trayectoria social y política. La votación que tuvo, su legitimidad democrática, su liderazgo regional y nacional no se puede desaprovechar por mezquindades. No se comprendería una candidatura testimonial sólo para instalar un candidato.
"Santiago no está mirando el proceso de descentralización y no se respeta a la primera autoridad electa de la región".