LA PELOTA NO SE MANCHA Lo que no te mata te hace más fuerte
POR WINSTON POR WINSTON
No pasó ni una semana y la felicidad de los Juegos Panamaricanos, Santiago 2023, pareció desvanecerse con la publicación de la atleta Poulette Cardoch contra el grupo de velocistas y sus entrenadores por haberla marginado de una de las competencias de forma arbitraria. Su compañera Berdine Castillo fue más allá y acusó de haber sido discriminada e increpada llegando a insultos que vinculó con el racismo, clasismo y elitismo. Muchos "ismos" y poco de atletismo.
Martina Weil, bautizada por un diario como "Ricitos de oro", terminó, igual que el personaje del cuento, sorprendida y descompuesta, aunque en este caso no por osos, sino por sus propias compañeras. Razones no le faltan. Su madre, la medallista olímpica Ximena Restrepo aparece como "la bruja" en este cuento.
También hubo serios problemas en el fútbol femenino. Luego de la partida de la estrella del fútbol mundial, Christiane Endler, que anunció su retiro de la selección, los ojos estuvieron puestos en su reemplazo, la arquera del Valencia Club, Antonia Canales. Se filtraron informaciones que hablaban de presiones para que la jugadora, requerida desde el viejo continente, se quedara en Chile. Canales estuvo a punto de sucumbir a la "fiebre del oro".
Sin todos los antecedentes y sin moverme de mi escritorio, como el personaje del comercial de Financiera Condell (caída de carnet), me sumo a todas esas voces que han condenado los abusos que se habrían cometido contra estas deportistas y me parece relevante investigar para saber qué ocurrió.
Independiente de esto, hay que tener clara una cosa. El deporte de alto rendimiento no es una yincana de semana del colegio, donde se escoge a los que se han esforzado más y donde se da una medalla de participación a todos. La mayor parte del tiempo, un deportista se la pasa entrenando y siempre se pierde más veces de las que gana. La vida del deportista es ingrata y los que triunfan son quienes se han sobrepuesto a este tipo de situaciones: injusticias, maltratos, presiones, etc.
Todo esto es una larga vuelta para contarles que vi "Arnold", la vida de Schwarzenegger. Me quedo con la primera parte y la historia que lo llevó a transformarse en el hombre más musculoso del mundo. Nacido en Austria dos años después de finalizada la guerra y con un padre que había sido derrotado en el frente de batalla, le tocó lidiar con este veterano alcohólico que más de alguna vez se desquitaba a golpes con sus dos hijos de los traumas de la guerra. Gracias al cine y la película Hércules, el futuro gobernador de California entendió que una forma de salir de la pequeña Thal era a través del fisicoculturismo y vaya que lo logró. En medio de este proceso, falleció su hermano en un accidente y luego su padre. Respecto a cómo lo afectaron ambos hechos en su carrera, Arnold como si estuviese interpretando a Terminator, dice:
"Siempre que tienes un objetivo, si siempre tienes una misión, tienes menos tiempo para preguntarte cómo estás. ¿Estoy deprimido hoy? ¿Siento lástima por mí? ¿Me convertí en una víctima? Dios mío. Me siento tan mal conmigo mismo...Si tienes tiempo para eso, es porque no trabajas lo suficiente. Si siempre estás ocupado, no tienes tiempo para pensar en eso. Solo piensas en seguir adelante".
Quizás el caso de esta estrella del cine sea inimitable. A pesar de eso, me parece que señala un camino y puede servir de inspiración para Cardoch, Castillo y Canales y otros deportistas que les tocó vivir el lado menos amable de los Panamericanos.
Si todavía no los convenzo de ver Arnold, agrego una última historia. Cuando logró su sueño de llegar a competir Estados Unidos, seguro de ganar la competencia, salió segundo. Solo en la pieza de un hotel, a miles de kilómetros de distancia, sin poder comunicarse bien, asumiendo que había decepcionado a todos, lloró toda la noche. Al día siguiente se levantó y comprendió a qué se refería Friedrich Nietzsche cuando decía que lo que no te mata te fortalece. Ojalá sea ese el camino que sigan nuestros deportistas. Yo, en cambio, seguiré viendo series, el próximo en la lista es "Beckham".