La hora de las infidelidades
La formalización de la candidatura de la edil Camila Nieto es más importante ahora que nunca, si el FA termina siendo un partido único. ¿Qué harán Tomás de Rementería y Nelson Venegas sobre la nueva "actitud oficialista" de Sharp, esta vez con el partido de Boric inscrito en la papeleta? ¿Se cuadrarán con Nieto?
El anuncio hecho por la presidenta regional de Convergencia Social, la diputada María Francisca Bello, sobre la inminente candidatura de la concejala Camila Nieto a la alcaldía de Valparaíso, desafiando desde el propio Concejo Municipal al impenitente Jorge Sharp, guarda importancia no solo por tratarse del partido del Presidente Gabriel Boric, tan pródigo en gestos hacia el jefe comunal en el último tiempo (Acuerdo por Valparaíso, cable de Humboldt), sino porque -cual bola de nieve- podría terminar convirtiéndose en la gran candidatura del oficialismo y del Frente Amplio, si éste termina derivando en un partido único. Fechas clave: 9 de junio (primarias) y 27 de octubre (elecciones municipales). ¿Qué pasará el primer domingo mencionado?
Sharp, acostumbrado a una competencia tibia desde el otro flanco, que va desde la DC a la derecha, enfrentaría así a la exalumna del Liceo Juana Ross y abogada, quien ha explotado de buena forma su posición como presidenta de la Comisión de Finanzas del Concejo, cuestionando los supuestos superávits municipales, y enarbolando las banderas animalista y de cuidados, lo que ha forzado a Sharp a improvisar en ambos temas. También insistiría el dirigente social del Movimiento Valparaíso de Pie, Luis Schwaiger y por qué no pensar en que la edil Zuliana Araya terminará cumpliendo su palabra y acabe en la papeleta final.
Por la derecha asoman el abanderado de Franco Parisi, Juan Marcelo Valenzuela, por el Partido de la Gente; el abogado Leonardo Contreras y el exgobernador marítimo Rodrigo Vattuone, por RN; tal vez el abogado wanderino Rafael González, si Republicanos opta por no omitirse en el Puerto.
¿Qué hará Sharp? Puesto en la encrucijada de que su única opción de llegar al Senado en el corto plazo sería en las parlamentarias de 2025, podría ir por la reelección para luego doblar la apuesta a la Cámara Alta, intentando dejar en calle Condell a alguno de sus cercanos (Tania Madriaga, hoy sin lugar, o Carla Meyer), consciente de que su verdadero reto no es esta elección municipal, sino la siguiente, en la cual no podría participar por teóricamente haber cumplido tres periodos.
La clave pareciera estar en el Socialismo Democrático. ¿Qué hará el PS después de que no prendiera la candidatura de Maya Fernández? ¿Qué dirán Tomás de Rementería y Nelson Venegas sobre la nueva "actitud oficialista" de Sharp, esta vez con el partido de Boric inscrito en la papeleta? ¿Se cuadrarán con Camila Nieto?