Luis Cabrera del Valle

La frustración por no haber logrado el retorno a Primera División el año pasado aún sigue en el corazón de Joaquín Pereyra. El volante de Santiago Wanderers confiesa que cada vez que ve una imagen de lo ocurrido en Iquique se da cuenta que el dolor está vivo todavía.

Sin embargo, el uruguayo también reflexiona sobre lo que significa esa bronca como motor anímico para esta temporada. "Creo que hasta que no consigamos el objetivo de subir, esa espina va a quedar", dice.

El jugador del Decano, que en 2024 vivirá su cuarta temporada vistiendo la camiseta verde, afirma que "entre nosotros tenemos la tranquilidad de que lo dimos todo, de que incluso todos sabemos que durante el campeonato hubo errores que nos perjudicaron y que el resultado capaz hubiera sido otro. Pero sabemos que este año lo intentaremos de nuevo, ya pasamos raya de que lo que ocurrió. Ahora se renuevan las esperanzas, las ganas de seguir intentándolo".

- La mayoría de los jugadores que estuvieron a punto de subir el año pasado se quedó. Usted es uno de los emblemas de ese grupo que lo intentará otra vez.

- Sin duda que no fue fácil ganarse el respeto, el cariño, creo que fue a base de constancia, de trabajo, de esfuerzo, de demostrar también en la cancha lo que uno hace. La retribución fue de una manera que finalmente la gente me hizo sentir muchas ganas de quedarme. Al interior del plantel uno iba viendo que se quedaba uno, después que se quedaba otro y eso mismo daba ganas de seguir juntos también, porque hay un grupo muy sano. Y acá estamos de nuevo.

- También tuvo posibilidades de jugar en Primera División o partir a otros países. Qué lo convenció para quedarse.

- Tenía otras opciones y el periodo de pases también estaba comenzando, tal vez si hubiera esperado un poco más hubiera salido otra opción mejor económicamente o en Primera División, había además una chance en otro país, pero con mi familia y mi pareja hablábamos mucho de que ya me había ganado un lugar en el club y estaba muy a gusto, muy querido. La gente también me lo hacía sentir, así que tomé la decisión de quedarme y poder ir por el objetivo deportivo, a mí me tocó descender con Wanderers y tengo ganas de hacerlo volver a donde merece. Después de tanto tiempo uno también agarra cariño por la institución. No fue fácil la decisión, porque es el futuro de uno, la carrera es corta, pero estoy tranquilo y feliz con mi determinación, ahora espero que comience el torneo.

- ¿Se sintió valorado en el proceso de renovación de contrato?

- Son negociaciones, hay tiras y afloja, con algunos jugadores se resuelve rápido y con otros no. Se dilató un poco, no llegábamos a acuerdo, pero estoy muy contento en el club, feliz con la decisión de quedarme en Valparaíso.

- ¿Cuánto pesó en su determinación que haya seguido Francisco Palladino?

- Pesó muchísimo, creo que fue uno de los factores más grandes no sólo para que me quedara yo, sino la mayoría. Peleamos el campeonato todo el año, en la fase regular se nos escapó por muy poco y en la final de la liguilla lo mismo. El club tomó una buena decisión al mantener el cuerpo técnico y una base de jugadores, que haya seguido Francisco fue muy importante para todos nosotros.

- Hace unos días el mismo Palladino dijo que la principal autocrítica que hace por su desempeño el año pasado es el mal inicio que tuvieron. ¿Coincide con ese diagnóstico?

- Sin duda, fue algo que nos terminó pasando la cuenta a fin de año, porque nos costó la primera rueda, no fuimos un desastre, pero tampoco un equipo que estuviera peleando arriba. Nos costó la adaptación, conocernos, al profe conocer la categoría y la institución. Ahora ya no hay excusas, la base es la misma y ahora tenemos que pelear el campeonato desde el principio, no podemos regalar los puntos que regalamos el año pasado en la primera rueda.

- ¿Piensa que este año habrá más presión por los resultados desde el arranque?

- Sin duda, aunque la presión en este equipo siempre está, la gente siempre nos va a exigir ganar y este club merece estar arriba, en la división de Honor. Sin embargo todos sabemos que no es fácil la categoría, todos se arman para lo mismo, pero vamos a pelear el campeonato, estoy seguro.

- ¿Cómo ve a los refuerzos que llegaron esta temporada?

- La verdad es que los veo muy bien, pareciera que llevan mucho tiempo con nosotros, son buena gente, vienen a aportar, son buenos jugadores, nosotros felices además por la categoría de ellos. Llegó Vilches, el "Gato" (Valenzuela), Brayan (Garrido), que es muy dinámico. La pretemporada les servirá muchísimo para seguir conociéndonos, así se logra, con entrenamiento y roce.

- ¿Cuáles son los equipos a los que observa como rivales directos por el ascenso?

- Todos se están armando muy bien, es difícil anticipar un panorama de quiénes estarán peleando el campeonato. El año pasado San Luis y La Serena arrancaron muy bien y después les costó, creo que a priori, por cómo se han armado, Curicó, Temuco o el mismo Rangers, son cuadros que pueden estar arriba. Eso es lo que me parece ahora, a simple vista, pero en el fútbol hay que ver cómo funcionan las piezas juntas.

- En el torneo anterior la falta de gol fue uno de los aspectos negativos de Wanderers. ¿Se mejorará este año ese déficit?

- Nos costó un poco, ojalá lo podamos mejorar, no sólo es tarea de los delanteros, sino de todos. En los equipos que pelean arriba hacen goles los volantes, los centrales hacen goles de cabeza, por supuesto que también los delanteros. Tengo mucha confianza en Carlos (Muñoz), en que Andrés Vilches también tenga un gran año, contamos con "Nacho" Duma, así que creo que gol no nos va a faltar, estamos bien.

- Esta temporada no habrá VAR nuevamente en el Ascenso. El 2023 usted lo sufrió con ese gol que le anularon ante Santiago Morning. ¿Qué opina al respecto?

- El VAR es algo que la división debiera tener, sería lo más justo, porque esos errores marcan mucho, a veces no se les da mucha importancia pero a fin de año terminan pasando la cuenta, como ese gol contra el Chago que nos daba tres puntos importantísimos, creo que con esos puntos habríamos salido campeones. Que no esté es una cagada, perdón por la palabra, pero es lo que hay, tenemos que tomarlo de la mejor manera.

-¿Seguirá siendo el segundo capitán, tras Carlos Muñoz?

- Yo creo que sí, por supuesto que si está Carlos él es el capitán, pero si no está seré yo o algún otro compañero. Estoy muy orgulloso de ser capitán cuando no está Carlos, pero si tiene que ser otro seré el primero en apoyar.

"La frustración fue grande el año pasado, el dolor todavía está, a veces uno ve imágenes y se da cuenta de que no ha sanado".

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