"Lo que sucedió en Viña fue un déjà vu de lo que tuvimos nosotros en 2014"
Relata lo que fue para los voluntarios ese fin de semana con el megaincendio que comezó precisamente en Valparaíso.
El jueves 1 de febrero, el Cuerpo de Bomberos de Valparaíso se movilizó hacia Laguna Verde por un llamado forestal. "Tuvimos ahí un incendio de largo aliento, donde los muchachos estuvieron trabajando toda la noche hasta las 8 de la mañana que se pudo controlar", cuenta el comandante Vicente Maggiolo.
Fue el inicio de un fin de semana trágico. Cerca del mediodía del viernes 2, se mandaron carros para apoyar la labor de Conaf que combatía cuatro focos: uno en Melosilla, dos en la Reserva de Peñuelas y uno en el Fundo Las Tablas. Debido a ello se decide el acuartelamiento de bomberos y se declara la alerta roja.
"Se visualizaba inmediatamente que iba a ser de largo aliento", comenta Maggiolo, y añade que "como se visualizó violento", recibió inmediatamente los apoyos de Viña del Mar, Quilpué, Villa Alemana, Quintero y Puchuncaví; mientras que el de Melosilla era combatido por Bomberos de Casablanca con ayuda de Algarrobo y Curacaví.
El salto a Viña
"La verdad que los recursos que teníamos para lo que estábamos viviendo ahí en la ruta eran suficientes", sostiene. "Después se empieza a dar vuelta la tortilla" confiesa.
Entre las 14.00 y 15.00 horas de ese día realizan un punto de prensa, y a "esa altura ya los cuatro focos se habían juntado, y de las 15 hectáreas más o menos iniciales que teníamos, pasamos a tener un foco de alrededor de 30 hectáreas", dice, por lo que se decide sobrevolar la zona.
"A esa hora también ya se había activado Lo Moscoso, en Villa Alemana, y lo había hecho violentamente", al grado que "Viña del Mar y Quilpué mandan recursos", y él decide devolver a los voluntarios que estaban en Valparaíso: "Les digo está súper complicado en Villa Alemana, hay afectación de viviendas, por tanto, ustedes desmovilícense de acá".
"A la par -continúa- llega el sobrevuelo e, inmediatamente, la gente de Conaf se baja y se retiran del lugar con su puesto de comando", cuenta. ¿La razón? Irse a Villa Olímpica, porque la proyección era hacia Quilpué.
El segundo comandante, Patricio Lara, que había participado en ese sobrevuelo, le confirma la inquietante información y le agrega que también tiene una proyección hacia la Ciudad Jardín. "En ese momento Viña del Mar despacha unidades al sector del puente Quiteño, en la ruta Las Palmas", relata, por lo que decide desmovilizar tanto a los viñamarinos como quilpueínos.
Al momento en que supieron que el fuego había pasado el citado puente, "decidimos mandar cuatro unidades en apoyo a Viña del Mar". "Solamente teníamos esa información", cuenta, pues a esa altura de la jornada "ya no teníamos luz y la mayoría de los teléfonos se habían caído. La comunicación que teníamos era muy precaria".
Por lo mismo, "los muchachos iban a cubrir guardia en la Dirección General de Viña del Mar. El Cuerpo de Bomberos de Viña ya tenía todas las unidades afuera, y nosotros quedábamos en el centro de la ciudad para cubrir sus necesidades. Pero cuando los muchachos llegan ahí, se dan cuenta que tienen que ir a trabajar inmediatamente (…), porque ya el fuego era visible en gran parte de la parte alta de Viña del Mar".
Debido a lo mismo, y ya teniendo controlado el fuego en Valparaíso, "decidimos desmovilizar los carros y mandar más recursos a Viña. Llegamos a tener, el viernes, 16 carros en Viña del Mar trabajando en lo que fue Canal Beagle y Miraflores".
Sin embargo, rememora, "tuvimos una brecha desde el punto de vista comunicativo" por lo que no sabían que había casas quemadas, ni siquiera de los dos voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Valparaíso afectados.
"A cargo de esa fuerza de tarea que se fue a trabajar a Viña del Mar estaba el cuarto comandante, Eugenio Rivero, por lo tanto, con él teníamos comunicación, pero a ratos no la teníamos. Había sectores donde no llegaban los equipos de radio, por lo tanto había tiempos muertos. La verdad es que no teníamos cómo saber lo que estaba sucediendo. Eso era angustiante", afirma el comandante.
En un momento, se logra comunicar con Rivero, "y me dice 'esto es peor que Valpo', y ahí se nos corta la comunicación. No podíamos comunicarnos, realmente uno queda atado de manos". Eso hasta que logran saber que están todos bien.
"Para un gran número de Bomberos de Valparaíso lo que sucedió en Viña fue un déjà vu de lo que tuvimos nosotros el 2014 en Valparaíso, que se van a cumplir 10 años ahora (…). En 2014 tuvimos esa problemática de los carros querían subir a los cerros y la gente venía bajando, y Valparaíso, que Viña tampoco escapa de ello, tiene calles estrechas, vehículos estacionados muchas veces a ambos costados, por lo tanto, el tránsito se hace imposible".
"Muchos de los carros, el 2014, no pudieron llegar a destino, porque quedaron taponeados a pie de cerro. Pudimos haber evitado muchas cosas el 2014, sí pudimos haber evitado muchas cosas; y creo que en esta oportunidad se pudo haber evitado, a lo mejor, mayores desgracias, pero acá también quedaron muchos carros en Viña del Mar taponados sin poder llegar a destino".
Sin embargo, esto fue en una escala "mucho mayor". "Obviamente que, en extensión, en destrucción y, lamentablemente, en decesos ha sido el más grande", asegura el jefe bomberil.
Otro fuego
Por si fuera poco, cuando estaban en Viña del Mar "nos sale el incendio del sector Avda. Laguna de la Luz (Placilla). Y ese incendio también se arma violentamente. Estuvimos ahí trabajando hasta cerca de las tres de la mañana, aproximadamente".
Al otro día , a las 8 de la mañana tenía ocho unidades apostadas en Viña del Mar, las que habían llegado de regreso cerca de las 4.30, 05.00 horas para descansar un rato. Al mismo tiempo, se iniciaron las labores para que el fuego no consumiera el condominio Puerta del Sol en Placilla.
"A eso de las de la una de la tarde del sábado, el incendio lo logramos controlar, con Conaf nos despedimos (…), todo muy ameno, llegaron ahí incluso con algunas pizzas para poder almorzar, y con el segundo comandante le digo empecemos a desmovilizar los carros que tenemos aquí y vamos a darle un descanso para que hagamos relevo con los muchachos que están en Viña (…). Sale el tercer comandante (Francisco Arévalo), que estaba al interior del recinto donde se estaba quemando, y nos dice sí, ya estamos listos solamente vamos a dejar a la decimocuarta para que mate unos puntos calientes que quedan ahí".
"Estábamos justamente conversando eso cuando se activa un foco de alrededor de unos 20 metros cuadrados, por lo menos, de diámetro (…) de fuego violento y en el borde entre la pandereta del condominio, donde no tenía por qué llegar ahí, donde no se reactivó ningún foco mal apagado, donde ninguna pavesa cayó, sino que efectivamente ahí lo prendieron y lo prendieron violentamente".
"Estuvimos todo el día sábado y domingo en la madrugada trabajando. El domingo ya con la con la vaguada, hubo una garúa muy, muy fortalecedora el domingo en la mañana y después ya nosotros terminamos nuestro trabajo bomberil en Valparaíso, en la comuna de Valparaíso, a las 2 de la tarde de ese domingo; y seguimos trabajando en Viña del Mar hasta cerca a las 6 de la tarde, y ahí ya terminamos también los trabajos en la comuna de Viña del Mar", finaliza el comandante Maggiolo. 2
Flor Arbulú Aguilera
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