Varios de los textos de la antología "Perfiles", del columnista Alfredo Jocelyn-Holt, publicada por las editoriales Tácitas y Universidad Católica del Maule (UCM), son inéditos, ya que el académico de las facultades de Derecho, Filosofía, Humanidades e Ingeniería de la Universidad de Chile los escribió para ponencias en casas de estudios, entre 1991 y 2019. Palabras que el tiempo borró y luces que el historiador y doctor de la Universidad de Oxford, Inglaterra, escribe "pensando que van a ser leídas en 40 años más, es un criterio que tiene que ver con la idea de que puedo tener mejores lectores que en la actualidad".

Además de cátedras, el volumen incluye artículos de diarios y prólogos de libros, algunos que permanecían sin editar, sobre las personalidades y su relación con el poder de, por ejemplo, Margaret Thatcher, Donald Trump, La Quintrala, Andrés Bello, Vicente Huidobro, Nicanor Parra y Germán Marín, entre otros, a quienes se suman numerosos escritos de Jocelyn-Holt sobre el perfil de Chile y, también, acerca del ejercicio de narrarse a sí mismo.

"Es muy complejo esto de escribir, no es que uno tenga papel y lápiz, la cosa más terrible del mundo es la página en blanco, saltar de eso a un esbozo de algo puede ser muy, muy complicado", señala el también autor de "Historia general de Chile" y "La escuela tomada. Historia/memoria 2009-2011". Esto porque, aparte de enfrentar el vacío de la página en blanco, investigar, seleccionar datos, ponerlos en contextos y dotarlos de cierta gracia, el género de los perfiles "requiere la imaginación y conocimiento del lector para llenar y completar todo, estoy muy consciente de eso cuando trabajo", ya que "soy un historiador que siempre está relacionando el pasado con la actualidad, aquí lo que me interesaba son las figuras individuales, míticas o abstractas".

-Uno de los textos es sobre la exposición de Parra con los presidentes ahorcados, "Obras públicas", durante el Gobierno de Michelle Bachelet, y cuestiona que "¿en La Moneda no leen a los poetas? ¿Sólo les gusta fotografiarse con ellos?", costumbre que al parecer mantiene el Presidente Gabriel Boric.

-No tienen mucho más que hacer. Olvidan que, se sabe, el poder puede ser muy intrascendente, entonces se arriman a gente que puede perdurar más tiempo. Yo no sé cuánto leen los políticos, pienso que muy poco y no debe haber excepciones, o no me ha tocado cerciorarme.

-El Presidente fue alumno suyo y dice que lee.

-Ya se ha escrito sobre las lecturas de Bachelet, le he seguido la pista a Boric con su lecturas y cosas así, y no me impresiona para nada lo que dice, lo cual demuestra que no tiene sofisticación, pero es una manera de trascender cuando se es quizás irrelevante. El poder funciona por sí solo, no necesariamente mediante quienes lo pueden manejar coyunturalmente.

-¿Cómo fue revisar 20 años de trabajo?

-Ahí me desdoblo, dejo de ser autor y paso a ser lector, pero también lo hice en conjunto con (el editor) Santiago Aránguiz, con quien somos amigos, fue mi alumno, y nos conocemos muy bien pese a la diferencia generacional. Hay un diálogo ahí, es muy compartido (el proceso de) la selección, porque el fenómeno histórico suele ser anacrónico, dice relación con fenómenos que ocurrieron mucho tiempo atrás, pero perduran hasta nuestros días y, por lo tanto, puede que uno sienta que no tienen nada que ver con hoy, pero tienen una resistencia enorme a pesar del tiempo, y un contexto completamente diferente. Un buen perfil tiene la gracia de que uno lo puede leer y pensar que son personas que están vivas, también instituciones, (esto último) a través de un perfil nacional: no soy nacionalista, pero me preocuparía muchísimo que arrasaran con la idea de Chile por malas razones. Hay muchos grandes poetas, historiadores y políticos que en el pasado creyeron en el país, yo los respeto aunque, insisto, no soy nacionalista.

-Esa afirmación para un historiador puede ser una declaración de principios.

-Los nacionalismos son ideologías y todas las ideologías pueden ser muy dañinas: producen guerras.

Este viaje por su archivo entre 1991 y 2019, continúa Jocelyn-Holt, posee "lo fascinante de tomar 30 años que fueron muy largos porque han sucedido muchas cosas, pero soy un historiador al que más bien le interesa las continuidades, a pesar de los intentos de cambiarlo todo, refundarlo todo, partir desde cero: soy muy crítico de eso porque la historia es muy porfiada, tiene una extraordinaria resistencia para persistir, es impresionante, entonces, qué le vamos a hacer".

-El libro incluye una ponencia sobre Andrés Bello para un seminario de una cátedra en la U. de Chile, donde imagino que hubo un par de miradas feas cuando lo leyó.

-¿Quién es Bello, al que monumentalizan y se sirven de él? Ese Bello es el que yo critico, quería decir que no es que no tenga gran admiración por Bello, sino que cuento que tiene una particularidad de que es muy servil con el poder, y eso, aunque sea Bello (autor del Código Civil), no lo encuentro admirable. Pero las personas no son perfectas, todos somos un poquito pifiados, (entonces ese discurso) no cayó bien, aunque no es la única vez que he escrito sobre Bello en ese tenor. El artículo que aparece en "Perfiles", además, es inédito. O sea, la conferencia se hizo (en 2009), pero no estaba impreso. Hay muchos textos en el libro que son inéditos, no es simplemente repetir una publicación anterior.

-En el recorrido por el Chile contemporáneo también incluye un perfil muy tierno sobre Germán Marín.

-Éramos muy amigos, tenía una gran admiración por Germán, era muy extraordinario y, como un gran fabulador, al mismo tiempo uno tenía que andar con cuidado porque podía estar contándote una chiva, entonces había que decodificar a Germán, y él sabía que tenía este poder. Además, fue mi editor.

-Y secretario de Gabriel García Márquez.

-Fue muy importante para la literatura latinoamericana. Creo que debe haber muchos textos (entre los del Premio Nobel) que son más de Marín (sonríe), pero eso es un talento también, ser un buen escritor fantasma. 2

"Perfiles"

Alfredo Jocelyn-Holt

Ediciones UCM-Tácitas

436 páginas

$19.000

Valeria Barahona

reportajes@mercuriovalpo.cl