LA TRIBUNA DEL LECTOR Seguridad alimentaria y política social
POR CLAUDIA ESPINOZA, SEREMI DE DESARROLLO SOCIAL Y FAMILIA
La seguridad alimentaria y el resguardo de las semillas orgánicas son temas cruciales que requieren la atención y acción decidida desde políticas públicas y sociales efectivas que no sólo garanticen el acceso a alimentos nutritivos, sino que también preserven la biodiversidad agrícola y promuevan prácticas sostenibles. Ese es el caso del programa Seguridad Alimentaria del Ministerio de Desarrollo Social y Familia (Midesof), componente del sistema Seguridad y Oportunidades.
Es importante señalar que la seguridad alimentaria se puede considerar más allá de la mera disponibilidad de alimentos; implica también la estabilidad de su suministro, el acceso adecuado y la utilización biológica de los nutrientes. Esto implica favorecer que las personas aprovechen al máximo los potenciales de los alimentos, especialmente los orgánicos.
Las experiencias que nuestro ministerio está desarrollando en esta línea apuntan a generar cadenas de colaboración, aprovechamiento y disminución de pérdidas de productos nutritivos, al distribuir alimentos cercanos a vencer o que no se venderán en el comercio habitual, pero que mantienen calidad nutricional y hacerlos llegar a personas de mayor vulnerabilidad. Es el caso de los programas Ecomercados Solidarios (Fosis) y Microbancos de alimentos (Elige Vivir Sano). Y, por otro lado, apuntamos a la generación de condiciones para que familias puedan producir alimentos en sus hogares y al mismo tiempo le permita tener ingresos extras, con el programa de Seguridad Alimentaria que también ejecuta Fosis en colaboración con la Seremi del Midesof. Todos estos programas se complementan con entrega de información nutricional y de alimentación saludable accesible para todos y todas.
Como parte de las iniciativas regionales para fortalecer el trabajo en esta línea, desarrollamos en la región una Jornada Técnica del programa Seguridad Alimentaria, que reunió a 16 comunas de la región de Valparaíso. Esta jornada concluyó con un intercambio de semillas orgánicas, dado que el cuidado de estas es otro pilar fundamental para garantizar la seguridad alimentaria a largo plazo, dado que preservan biodiversidad y son adaptables a diferentes condiciones climáticas y de suelo, lo cual es esencial en un mundo que enfrenta el cambio climático. Son iniciativas que hay que extender para que toda la población cuente con información y acceso a estos conocimientos y productos. Por ello, la educación juega un papel vital en la promoción de la seguridad alimentaria, el resguardo de las semillas orgánicas y la importancia de una dieta saludable y sostenible. Tal como lo mencionamos en la reciente jornada, de este tipo de prácticas depende nuestra salud y asegurar un futuro donde todos tengan acceso a alimentos nutritivos y sostenibles. De este modo, cuidamos nuestra la salud y el bienestar de las generaciones presentes y futuras.