Emplazan a ministro Montes por obra que habría estado dos años detenida por revisión arqueológica
POLÍTICA. Empresario inmobiliario pidió ayuda al titular de Vivienda para acortar tiempos de permisología. "Es una vergüenza lo que está pasando", protestó.
En una visita a un proyecto en la que estuvo acompañado por la vicepresidenta de la Cámara Chilena de la Construcción, Jaqueline Gálvez, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, recibió la crítica de Cristián Boetsch, presidente de una compañía inmobiliaria.
Según reprodujo radio Bío-Bío, el empresario le dijo al ministro: "Quiero hacer una protesta contra la permisología en este proyecto, porque con permiso municipal otorgado por la municipalidad estuvimos dos años detenidos porque Monumentos Nacionales pidió a Arqueología que revisara".
Boetsch añadió que se gastaron 300 millones de pesos en los arqueólogos "para encontrar 20 sacos de basura arqueológica que después nos obligan a nosotros a colocar en algún museo".
"Es una vergüenza lo que está pasando, yo creo que el ministro nos puede ayudar mucho en achicar los tiempos de permisología", complementó el empresario, reconociendo que incluso ellos han debido mentir para poder ejecutar algunas obras.
Montes reconoció que el Ministerio de las Culturas ha estado trabajando en la manera de modernizar el sistema de bienes nacionales, "es una discusión que hemos tenido".
El ministro admitió, además, que "el problema del Consejo de Monumentos Nacionales, de modernizar las normas, de tener más personas para evaluar realmente el impacto que eso tiene, es muy importante".
Pero Montes también responsabilizó a los privados, recordando que "las compañías eléctricas a veces se demoran ocho meses en conectar una obra e instalar los empalmes que finalmente tienen un costo para las familias".
Marcel responde a cmpc
Otro ministro que abordó el tema de la permisología ayer fue el titular de Hacienda, Mario Marcel, quien se mostró molesto con el análisis que realizó el presidente de la CMPC, Luis Felipe Gazitúa, en relación a lo difícil que es invertir en Chile.
Gacitúa realizó esta crítica refiriéndose al rubro forestal en un seminario del Instituto Regional de adminsitración de Empresas (Irade) el miércoles.
"Nosotros no tenemos inversiones en Chile, porque es imposible hacer proyectos en Chile", aseguró Gazitúa.
"Una fábrica de celulosa es una inversión del orden de US$4.000 millones. Ustedes comprenden que nadie en su sano juicio va a iniciar una inversión de unos US$4.000 millones cuando el proyecto se puede demorar 14 años. Eso hace que el proyecto no sea rentable", agregó.
Ayer, en respuesta, Marcel no sólo negó que no exista inversión nacional y extranjera, sino que además reprochó que la crítica viniera de la CMPC: "Creo que en el caso de una empresa que protagonizó uno de los episodios más graves de colusión en Chile, uno esperaría un poco más de prudencia y un poco más de compromiso con el país".