Desde que se abrió el libro de pases, la pregunta cae cada vez que Jaime García está frente a los micrófonos: qué pasa con los refuerzos. El técnico de Wanderers no se desespera ni entrega falsas esperanzas. Sólo repite lo que dijo desde el primer día, quiere alguien que llegue para sumar y que no venga inactivo durante mucho tiempo.

Sin embargo, esta semana hay un matiz. El entrenador caturro se abre a la posibilidad que no llegue alguna incorporación.

Pero el exdefensa no dramatiza con esta situación, sino que intenta convertirla en un aspecto que juegue a su favor.

"Estamos viendo qué pasa, que por ahí se abra el camino correcto para traer algún jugador. Pero si no hay esperanzas y si no se va a traer, voy a ir sin excusas con lo que tengo. Estoy esperando que aparezca la luz y llegue alguien que sea un aporte para el equipo, que tenga minutos, bienvenido sea, pero si no es así, voy con lo que tengo, no le tengo miedo a eso", dispara.

El oriundo de Cartagena sabe lo que significa estar en la banca del Decano y dice que se hace cargo de todo lo ocurrido con el plantel desde que asumió.

Según García, "si por ahí llega uno, llegan dos o no llega nadie, debo asumir la responsabilidad que yo tomé. Y vamos para adelante, el que llegue bienvenido, se va a tener que chequear bien y si no llega nadie, voy para adelante".

La posibilidad de fichar a un jugador extranjero, considerando que aún cuenta con un cupo, tampoco le entusiasma al técnico caturro. De acuerdo a su óptica, un jugador foráneo que venga con muchos minutos en cancha en su liga resultaría muy caro, mientras que poner a punto a uno sin ritmo competitivo demandaría demasiado tiempo. Tampoco quiere un juvenil de otro club nacional que pueda tapar a los canteranos wanderinos.

Por eso insiste en que "debo buscar un jugador que me venga a sacudir el camarín, que venga a aportar, que me dé el balance que quiero. Es muy complicado traer a alguien que no venga con ritmo de juego, cuesta ponerlos a punto, pero para perder tres o cuatro partidos en eso, prefiero perder tres o cuatro partidos poniendo a chicos de la casa. Si no es alguien que venga a aportar, no voy a buscar a nadie".

García reconoce que conversó con un jugador al que dirigió en Ñublense, pero finalmente no quiso venir a préstamo a Wanderers. Pese a que no dice su nombre, se intuye que es Nicolás Guerra, actual delantero de Universidad de Chile que no es considerado por Gustavo Álvarez.

A partir de esta experiencia, el DT porteño explica que "motivar a un jugador que está en la A en un equipo pesado, es complicado, lo único que los puede mover más allá de la plata es quién está al frente de ese proyecto. Ellos piensan, con quién voy, dónde voy, no es porque no quieran bajar de categoría. Hablé con un jugador y me dijo que le encantaría que yo lo dirigiera, hartos estarían abiertos a venir a Santiago Wanderers, pero les cuesta dar ese paso. Cuando me comentaron lo mismo yo dije que llegaba a una institución a la que quería llegar. Yo les digo a los futbolistas que no piensen que van a bajar de categoría, vienen a Wanderers, este club es vitrina donde esté, Wanderers suena donde esté".

Revancha en la cisterna

El partido de vuelta frente a Palestino, programado para el viernes a las 15 horas, es el desafío más cercano del Decano. Y Jaime García sabe que será una dura prueba para su oncena.

"La llave está abierta para los dos equipos, voy a ir a hacer lo mismo de siempre. Palestino propone muchas cosas, son un equipo hecho para copas internacionales y nosotros vamos con un respeto absoluto, pero hasta que se inicia el partido. Trato que mi equipo genere la misma personalidad jugando afuera o de local, es lo que busco, salir a jugar como un equipo grande", reflexiona el DT.

Respecto a los goles que le han convertido, especialmente por el sector derecho de su defensa, el técnico caturro afirma que "los equipos fuertes como Palestino a veces aprovechan los malos movimientos en la zona media" para marcar.

"Tenemos que mejorar las coberturas, no llegar y tirarse ante rivales que están acostumbrados a estar en copas internacionales. Siento que hemos ido mejorando un montón, estos partidos nos han hecho bien para mejorar. Nos han hecho goles que no son para mi equipo, me incomodan, pero no siempre son responsabilidad de la defensa, sino que desde arriba, cuando se empiezan a dejar espacios perjudica por el orden de la zaga. Cuando juguemos en casa y nos marquen un gol, no nos van a salir a presionar, van a querer manejar el partido", reflexiona el exzaguero.

"Traer un extranjero cuesta, tiene que estar jugando, no puedo traer a uno que está parado tres, cuatro, cinco meses".

Jaime García, DT de Wanderers

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