"Consolidación de la ultraderecha europea obliga a la izquierda a una unión funcional"
El vuelco electoral de la segunda vuelta en Francia, que se tradujo en el triunfo de la izquierda por sobre la Agrupación Nacional de extrema derecha de Marine Le Pen -ganadora de la primera vuelta y a la que los sondeos daban ventaja en el balotaje-, sorprendió a medio mundo y ha motivado interpretaciones que siguen en el debate, como la del Presidente Macron, según la cual "nadie ganó".
El analista político, académico de la Universidad de Valparaíso y director de Analytyka Consultores, Guillermo Holzmann, plantea que si bien el Nuevo Frente Popular de izquierda obtuvo la primera mayoría, está muy lejos de contar con mayoría absoluta, y Francia queda dividida en tres tercios.
"La derecha sale fortalecida, ya no es un fantasma, sino una presencia real que está permanentemente ahí. Va a ser una oposición muy sólida, mientras en el bloque de izquierda tratan de ponerse de acuerdo, y luego con las fuerzas de Macron", de modo que "si no la incorporan a los procesos políticos y de decisiones, se va a producir una polarización cada vez mayor", sostiene Holzmann, también exdirector del Departamento de Ciencia Política y de Postgrado del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile.
De europa a venezuela
- ¿La segunda vuelta francesa entonces no pone en entredicho el avance de la extrema derecha en Europa?
- No es que lo ponga en entredicho, la segunda vuelta en Francia instala nuevamente que la ultraderecha es una realidad concreta y que tiene poder. Cuando un sector obtiene un 33% de representación en una asamblea, y además con líderes jóvenes y distintos, maneja mucho poder. Acá hay una consolidación de la ultraderecha que obliga a la izquierda a alcanzar una unión funcional para evitar que avance, a establecer coaliciones que semanas antes eran impensadas.
-Cambiando de continente, a fin de mes son las elecciones en Venezuela. ¿Qué cree que va a pasar?
- Lo primero que habría que saber es si se van a hacer elecciones o no, porque Nicolás Maduro lleva meses instalando la idea de que hay una conspiración nacional e internacional en su contra, y yo me atrevería a pensar que parte de esa estrategia podría ser anunciar que por ese motivo se instaura un estado de excepción o se declara estado de guerra interna y se suspenden las elecciones. Lo segundo es si el proceso electoral es considerado legítimo, en términos de que no haya fraude. Y lo tercero es que respete los resultados.
- En la reciente cumbre de derecha en Camboriú, José Antonio Kast llamó a formar una coalición latinoamericana para presionar por la salida de Maduro si el régimen no termina con los comicios del 28.
- Yo tiendo a pensar que eso es parte de la estrategia internacional que hay para sacar a Maduro, lo que no sólo importa a Estados Unidos o a algunos países de la Unión Europea, sino también para poder generar una unidad ideológica en América Latina, hoy día desintegrada. Fue lo que intentó hacer en su minuto Sebastián Piñera también, donde está asociado Juan Guaidó; parte de la estrategia internacional para poder hacer una presión política sobre Venezuela, de la retórica de los partidos políticos en general y de la idea de una América Latina que en términos ideológicos todavía vive en el siglo pasado.
Evo morales again
- ¿Qué implicancias tiene para Chile el acercamiento entre Bolivia e Irán?
- Irán quiere estar presente en todas partes del mundo donde por un lado tenga acceso a recursos importantes, pero por otro donde pueda hacer daño a intereses estadounidenses si eso es necesario. En su enfrentamiento con Estados Unidos siempre ha apostado a que la guerra va a ser periférica, híbrida. Entonces, si Estados Unidos o Israel lo atacasen, Irán generaría una cantidad de ataques de todo tipo y magnitud, con el apoyo de Hezbollah y otros grupos, contra los intereses de Estados Unidos. Así, Bolivia pasa a ser un centro de operaciones importante por su cercanía con varios países y por la porosidad de las fronteras con aquellos con los que limita. Es parte de una estrategia de Irán donde mezcla sus objetivos militares asociados a Estados Unidos y sus objetivos de desarrollo estratégico, asociados al acceso a recursos naturales.
- ¿Qué cree que va a pasar con Evo Morales, que piensa ir a las presidenciales "a las buenas o a las malas", aun cuando perdió el referéndum de 2016 sobre su reelección?
- Bolivia tiene problemas económicos, políticos y de gobernabilidad muy serios; el Movimiento al Socialismo está muy conflictuado, y es ahí donde aparece esta suerte de golpe de Estado acordado o alzamiento militar que finalmente termina potenciando al Presidente Luis Arce. Morales cuenta con el apoyo del grupo de Puebla -vendría a ser la contraparte del grupo de derecha al cual fue Kast-, que acaba de hacer una reunión en Honduras donde se suma para que sea candidato. El grupo de Puebla está en esa dinámica, pero estamos hablando de un conflicto ideológico que proviene del siglo XX.
- ¿Chile debería presionar más a Bolivia para que acepte la reconducción de personas de terceros países que ingresan irregularmente a Chile desde su territorio?
- Creo que en esa materia es necesario llegar a acuerdos con Ecuador, Colombia, Perú y ojalá también con Argentina, para una estrategia común. En la medida que lo volvamos un tema multilateral, tenemos mucha más capacidad de poder negociar lo que nos importa con ellos. Si no movemos nuestra diplomacia para lograr acuerdos específicos con los otros países donde está el pasadizo de migrantes, donde están los coyotes y el crimen organizado, va a ser muy difícil que Bolivia se preste para eso.
Los pilares de milei
- A seis meses de la asunción de Milei en Argentina, cómo ve su desempeño y el nivel de apoyo que concita?
- Más allá de que uno esté de acuerdo o en desacuerdo con él, lo que me parece genial de Milei es que colocó a los argentinos una luz al final del túnel, lo que no hizo el gobierno de Fernández. Hace de la esperanza un recurso político. La otra cosa importante es que no miente y que aun cuando dice barbaridades, las dice honestamente, y eso yo diría que para el ciudadano común argentino es muy valioso. A pesar de que no ha sido como él quería, ha logrado la aprobación del Congreso para las leyes que necesita, así como el apoyo del Fondo Monetario Internacional -es decir, puede hacer cosas- y las fuerzas armadas están contentas. Probablemente como persona no tiene el apoyo de todos, pero los pilares que ha instalado, tanto en términos argumentales como prácticos, son creíbles para la población. Pero si no hay resultados económicos a más tardar en los primeros meses del próximo año, la situación en Argentina se podría dar vuelta.
Desglobalización
-¿En lo esencial, cómo cree usted -que ha sido la conducción de las relaciones internacionales de Chile por parte del Presidente Boric?
- Creo que él mantiene el ideario implícito en su programa de Gobierno y que mencionó nuestro embajador en España en el famoso discurso sobre las compras de defensa. Antes, él se refirió a un aspecto esencial, que es el concepto de la desglobalización selectiva. Es decir, participo de ello, pero voy a ver dónde voy. Boric ha impulsado todo lo que es protección del medio ambiente, derechos humanos, apoyo a las democracias e inversión en esos ámbitos. Se abrió a las relaciones comerciales, yo diría que no con mucho entusiasmo, sino que más bien por las presiones estructurales de nuestra economía. Pienso que está haciendo un cambio importante en nuestras relaciones internaciones, que en este Gobierno son mucho más ideológicas de lo que uno pueda creer, y pienso que eso no todo el mundo lo ve o lo percibe.
- ¿Qué aciertos destacaría?
- En el tema antártico, recoge la inquietud de la soberanía, vuelve un poco a los discursos tradicionales de nuestra política en términos de defenderla, apoyar la construcción naval y otros aspectos, pero con una mirada mucho más estratégica. Y eso lo inserta en el cuidado del medio ambiente y la necesidad de que sea una zona pacífica. Es ahí donde sintoniza con la identidad nacional en términos de soberanía y de protección antártica.
- ¿La relación con Israel se inserta en ese concepto de desglobalización selectiva?
- Sí, definitivamente. Los argumentos pueden estar soportados en la coyuntura, pero él es propalestino, eso es evidente, y como casi todo el mundo, desea que haya un estado palestino. El punto es que no se puede confundir la necesidad de un estado palestino, del pueblo palestino, con Hamas, que es un grupo totalmente distinto y una minoría dentro de ese pueblo. Ahora, ¿cómo se expresa la posición sobre Israel? Yo creo que busca dejar satisfechas a las fuerzas oficialistas, pero también son cosas que él cree sinceramente. Acá hay temas que están pasando solamente por la toma de decisiones del Presidente, y donde no hay una adecuada evaluación del impacto que eso tiene y de la implicancia que significa para el país. 2
En este Gobierno las relaciones internacionales son mucho más ideológicas de lo que uno pueda creer, y eso no todo el mundo lo ve o lo percibe".
Rosa Zamora Cabrera
rosa.zamora@mercuriovalpo.cl
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"La derecha ya no es un fantasma, sino una presencia real que está permanentemente ahí".