Claudio Ramírez

Preocupación existe en los gremios del sector productivo regional frente a la ola de violencia que afecta al país y la región. Ante ello, golpearon la mesa subrayando que es necesario tomar medidas a la altura de las circunstancias y en el marco de un plan de acción efectivo.

Y es que remarcan que sin seguridad no es posible que la actividad económica se desarrolle, lo que es doblemente inquietante para una zona cuyas cifras en este ámbito no dan para celebrar.

El presidente de la Cámara Regional de Comercio de Valparaíso (CRCP), Javier Torrejón, remarca que el territorio ha sido testigo de una violencia extrema y sin precedentes, que ha derivado en una crisis que no sólo afecta a los negocios y pone en riesgo la llegada de inversiones, sino que también impacta negativamente el diario vivir de las personas.

Recordó que en la última Encuesta de Victimización del Comercio, realizada por la CNC, un 70% de los comerciantes de Valparaíso y Viña del Mar reconocen haber sido víctimas de algún delito y cerca de un 15% cree que existen bandas criminales organizadas.

"Sin seguridad no podemos crecer ni alcanzar el desarrollo que tanto anhelamos. La reactivación económica de nuestra región es imposible bajo estas condiciones. ¿Qué más tiene que ocurrir para que las autoridades se hagan cargo ya de este fenómeno?", advirtió el líder gremial, enfatizando que "si no se toman cartas en el asunto de forma urgente, será el crimen organizado quien dicte las reglas de convivencia de nuestra sociedad".

En ese plano, manifestó que "necesitamos planes de inteligencia robustos, así como acciones concretas y coordinadas para que los espacios públicos vuelvan a ser seguros y las personas puedan caminar por las calles sin miedo".

Estrategia clara

El timonel de la Asociación de Empresas región de Valparaíso (Asiva), Alfonso Salinas, recalcó que la delincuencia afecta en forma directa la calidad de vida de las personas, pero también en forma indirecta a la actividad económica.

"Incide en la inversión, porque aumentan los costos y afecta la capacidad de trabajar tranquilo; también al consumo y al turismo, porque las personas salen menos, y por ende, termina influyendo en el empleo y en la calidad de vida en general", observó el líder gremial.

"Se trata de un problema nacional que también se replica en la región", destacó, subrayando que la interrogante es si desde la región se puede avanzar en alguna solución para mejorar el escenario actual.

Al respecto, recalcó que "no basta que nos quedemos atrapados en la contingencia o en polémicas políticas. Como en todo ámbito, se requiere una estrategia clara y coherente, de la cual se deriven planes de acción serios, de largo plazo, acompañados de una gestión eficiente".

Salinas mencionó que entre las medidas que los expertos coinciden figura la necesidad de una mayor coordinación entre las policías y mejorar el área de inteligencia, que permita anticiparse y así detectar y desbaratar las redes de negocio ilegal que sustentan al crimen organizado.

"En ese plano, un tema donde quizás la región podría avanzar es buscar mejoras a la situación carcelería, permitiendo una segregación efectiva de los reos según su peligrosidad", puntualizó.

Afrontar la crisis

Para el presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Valparaíso, Arsenio Vallverdú, nadie puede permanecer indiferente ante la situación que viven la región y el país, que "enfrentan una crisis de seguridad pública sin precedentes, afectando todas las actividades productivas y generando un clima de inseguridad que daña nuestra convivencia y calidad de vida. La creciente ola delictiva, aprovechando deficiencias en la persecución penal y la falta de diligencia estatal, amenaza directamente el tejido productivo y la confianza ciudadana", remarcó.

En ese ámbito fue crítico, remarcando falta de voluntad política para enfrentar la crisis actual.

"Lamentamos la inacción de los organismos de seguridad pública y la falta de voluntad política para afrontar la crisis y buscar soluciones consensuadas. Por eso hacemos un llamado a los actores políticos a generar los acuerdos y tomar las medidas necesarias para restablecer el orden público", dijo Vallverdú, añadiendo que "la seguridad es una condición básica para atraer inversiones y volver a crecer".

Por último, precisó que "como sector empresarial comprometido con la responsabilidad social, denunciamos enérgicamente la violencia y la impunidad perpetradas por grupos delictivos. Repudiamos cualquier acción que atente contra el Estado de derecho y el normal desarrollo de las actividades privadas".

Anuncios tardíos

El presidente de la Multigremial Valparaíso, Felipe Serrano, indicó que la situación en que se encuentra el país "sometido a las bandas delictivas, droga, extorsión y muertes, es un escenario que jamás lo habíamos vivido y mucho menos imaginado".

En esa línea, subrayó que los anuncios de cárceles y medidas para prevenir y ocuparse de este flagelo son tardíos, lo que demuestra "la desconexión con la realidad".

"Llegan tarde y es cuasi sinónimo de desinterés o negacionismo a una realidad que se hizo evidente hace ya unos años. Una posición como la que han mantenido ha sido un aliciente para que estos hechos se acrecentaran; como resultado de la inacción lo validaron, y la falta de decisiones concretas, oportunas y severas para frenar de una vez esta situación nos tiene en esta lamentable situación".

En cuanto a esas medidas, puntualiza que "una nueva cárcel puede ser parte de lo que se necesita, pero esta marea necesita mucho más que eso. En la región y en todo el país no sólo se pierden vidas, se pierden empleos, empresas, y en el caso de la actividad de los puertos y el comercio exterior lo vienen resintiendo fuertemente estos últimos tres años".

Agregó que la inseguridad y la inestabilidad son factores que evalúa cualquier empresa o inversor a la hora de considerar el desarrollo de un emprendimiento o inversión a nivel país y regional.

El presidente de la Asociación Comercio Unido y director de la Multigremial, Héctor Arancibia, apuntó a la situación que se vive en la comuna de Valparaíso ante la de violencia. "Nosotros, el comercio y los vecinos, hemos tenido que incurrir en gastos extra para nuestra propia tranquilidad, la cual no es mucha, ya que hoy en día al delincuente poco le importa ser grabado. Hemos tenido que iluminar los frontis de nuestros locales, porque las luminarias en las calles son insuficientes, y esto favorece la ejecución del delito. La situación es crítica y a nuestras autoridades pareciera darles lo mismo".

"La reactivación económica de nuestra región es imposible bajo estas condiciones, (...) necesitamos planes de inteligencia robustos".

Javier Torrejón, Presidente CRCP

"Se requiere una estrategia clara y coherente, de la cual se deriven planes de acción serios, de largo plazo, acompañados de una gestión eficiente".

Alfonso Salinas, Presidente de Asiva

"La creciente ola delictiva, aprovechando deficiencias en la persecución penal y la falta de diligencia estatal, amenaza el tejido productivo".

Arsenio Vallverdú, Presidente CChC Valparaíso