Hace rato ya que todos en el Gobierno y en la izquierda se quejan de que la alcaldesa Macarena Carolina Ripamonti se cambia de vereda para no saludarlos en la calle y que, no contenta con no asistir al lanzamiento de candidaturas del Frente Amplio hace algunas semanas, no le gusta que nadie se aparezca por su comuna. De hecho, desde la Delegación Presidencial Regional (finalmente responsables de las autorizaciones y exigencias al Sporting Club para las ramadas del 18, que terminaron con un joven acuchillado y otro asesinado, hechos por los cuales deben poner la cara), alegan a) que la alcaldesa no mandó invitaciones a las autoridades; b) que, a los pocos que sí invitó, les pidió que no fueran porque necesitaba capitalizar el voto de la derecha; y c) que su propuesta de policía municipal es hablarle a la derecha, a sabiendas que eso es inconstitucional y que existe un dictamen de Contraloría que impediría llevarla a cabo.

Desde la Municipalidad, en tanto, alegan que la delegada no tiene un brillo, que mostró cero manejo con lo de los incidentes del Sporting, que Carabineros no instaló un retén al interior del recinto y que sencillamente les echó la culpa a los privados por algo que, más allá de la torpeza que mostraron los organizadores, es responsabilidad de ella.

En el Ministerio del Interior, por su parte, ya están hasta la coronilla con los problemas de seguridad en la Región de Valparaíso, la cual desde el megaincendio sólo pareciera dar noticias negativas y de pésimo manejo en la zona, lo que finalmente termina por rebotarle en las barbas al Presidente Boric, por cuanto el diputado Andrés Longton lo tiene como membrillo colegial de tanto hincharlo -con cada vez más argumentos- desde la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara Baja.

Echar a la delegada no es opción. Menos cuando le falta poco menos de un mes para renunciar al cargo para postular el próximo año como diputada por el Distrito 6. ¿Qué hacer, entonces?, se preguntan en el despacho de la ministra Carolina Tohá, con el ingrediente de que el subsecretario Manuel Monsalve ya ni siquiera alega por tener que venir a la Región de Valparaíso cada 15 días a anunciar medidas que cada vez son peor ejecutadas, porque también va de salida con una postulación al Senado. De hecho, en una señal que pocos podrían obviar, ayer presentó la implementación del Sistema de Identificación Biométrica (ABIS) junto a Sofía en la oficina del... gobernador Rodrigo Mundaca, histórico detractor de la militante comunista. No fue todo, además el doctor Monsalve tuvo que hacerse cargo de las críticas de Ripamonti sobre los planes de seguridad para el 18 y su peregrina propuesta de policías municipales para todas las comunas del país, la que debió silenciar con un definitivo portazo a instancias del Palacio de La Moneda, que ve en la alcaldesa viñamarina un evidente afán por desmarcarse, aun cuando el Gobierno y el oficialismo la bancaron y blindaron cuando todos la apuntaban con el dedo por los planes de evacuación para el megaincendio.

Pero el argumento de que Valparaíso era la única Delegación que mantenía el partido de la hoz y el martillo, y que soportaba a Sofía González durante la primera parte del Gobierno, perdió validez desde que el también comunista Galo Luna asumió en la Región de Coquimbo en octubre del año pasado, tras la renuncia del médico frenteamplista Rubén Quezada.

A la vez, resienten desde La Moneda la intransigencia de la poderosa asesora de la DPR, Cinthy Miskulini, quien no ha mostrado voluntad alguna en hacerse cargo de la evidente crisis de seguridad que existe en la zona.

Con todo, los navajazos por el reemplazo de Sofía sacan chispas en el oficialismo. La favorita de la propia delegada, también propuesta por el PS, es la seremi de Justicia, Paula Gutiérrez Huenchuleo, quien subrogó durante las primeras horas a González para la tragedia del 2-F, precisamente cuando algo se pudo haber hecho para evitar algunas de las 136 muertes.

El PC, por su parte, insiste con el seremi MOP, Yanino Riquelme; el mismo delegado de seguridad de la DPR, Daniel Zamorano; o, ya rizando el rizo, con la exseremi de Salud, Graciela Astudillo, hoy invisibilizada en el SSVSA, y obviamente del lote contrario a González dentro del PC.

El FA, finalmente, propone al alguna vez influyente abogado Jaime Bassa, exvicepresidente de la Convención Constitucional que dio impúdicamente al traste con el proyecto de una nueva Constitución. Bassa, hoy afincado en la Universidad de Valparaíso, donde ejerce como profesor de Derecho y está a cargo del Doctorado en Estudios Interdisciplinarios sobre Pensamiento, Cultura y Sociedad, volvió a escena en las últimas semanas por su romance con la también exconvencional comunista, Bárbara Sepúlveda, y por el segundo aniversario del fracaso constitucional del 4/9.

Al final de la lotería de los nombres volvió a aparecer, cómo no, el diligente jefe de gabinete de Mundaca, el siempre dispuesto Rodrigo Faúndez, lo que invalidaría una posible postulación como candidato a diputado por el Distrito 6 en 2025. Pese a lo que pueda creerse, fue el propio Mundaca quien se opuso a esta última opción, con el afán de "cuidar" a su mano derecha de que se queme en un cargo ya lo suficientemente demonizado.

En la otra acera, en tanto, los ánimos no andan muy bien que digamos. En el comando de María José Hoffmann, quien no consigue despegarse del republicano Francesco Venezian según la encuesta Panel Ciudadano-UDD, ardió Troya por la última jugada de Manuel Millones, quien mandó al frente (cual kamikaze con hachimaki de Sol Naciente a modo de cintillo) a su amigo Luis Parot para que se hiciera un par de chalas con Hoffmann, el senador Javier Macaya y la nueva generación de dirigentes de la UDI. La respuesta, digitada desde el propio comando, fue el protagonismo asumido por el exconcejal Jaime Varas, quien a su vez barrió con la supuesta transversalidad de Millones.

En Viña del Mar todavía andan buscando a la fuente citada por La Tercera que hablaba de una clara baja en las expectativas de la derecha en la carrera municipal, en abierta referencia al estilo confrontacional de Iván Poduje, el cual es percibido por muchos como un error político de proporciones.

Valparaíso, finalmente, es la prueba viviente de que todos subestimaron el legado del alcalde Jorge Esteban Sharp y su desatado clientelismo en los cerros, el cual fue traspasado a Carla Meyer, quien hoy le muerde los talones a Camila Nieto, según la encuesta Signos, superando ambas a Rafael González, quien sin embargo es apuntado por la propia encuestadora como la carta con mayor potencial.

Pero, a la hora de los quiubos, lo cierto es que extrañaremos casi con devoción mariana a Macarena Carolina y a Sofía la única. Tal vez debamos buscarnos un nuevo amor, como bien reza ese temón de Tranzas, que es un grupo medio muerto, pero que, siendo sinceros, viernes por la noche, 1 de la mañana, recién pagados, Bellavista con Pirámide, igual salva.

Que no vas a encontrar nunca con quién mirar las estrellas/

Alguien que pueda bajarte con un beso una de ellas/

Alguien que te haga sentir tocar el cielo con las manos/

Alguien que te haga volar como yo/

No vas a encontrarlo.

Tururú tururú.