"Últimas encuestas atribuyen al gremio una importancia negativa"
"Son tiempos complejos, porque es valioso que salgan a la luz y se persigan todos los actos y personas que, sorteando las normas del derecho, hicieron uso de una posición privilegiada para promover tráfico de influencias, obtener beneficios económicos o aumentar un poder malentendido. Se trata de situaciones de corrupción que resultan lamentables, con mayor razón viniendo de personas formadas para alcanzar y promover la justicia, pero eso no significa que no se deba defender la profesión que resulta fundamental para el buen funcionamiento del sistema de justicia, clave en cualquier país".
Así lo afirma, Rodrigo Medina presidente de la nueva Asociación Nacional de Abogados Penalistas de Chile (ANAPEChile), al referirse a las consecuencias y efectos que ha provocado el llamado Caso Audios, también conocido como Caso Hermosilla, y que abrió la discusión pública sobre las fallas de los mecanismos institucionales a la hora de prevenir actos de corrupción en la administración de justicia.
En entrevista con este Diario, Rodrigo Medina comenta que la Asociación "está en plena etapa de incorporación de nuevos miembros, ya son más de 500 profesionales los que han adherido a nivel nacional, y de estructurar una agenda que les permita marcar su postura con claridad en el debate público y también a nivel de los expertos en derecho penal".
- ¿Por qué razón surge esta Asociación?
- Ésta es una agrupación que se inicia por gestiones de diversos abogados y agrupa a defensores penales, ya sea públicos, no públicos, y que tiene por objeto ayudarnos en nuestras inquietudes de abogados que se desempeñan en procedimientos penales. Pero, además, hacer sentir nuestra voz respecto de cuestiones que nos atañen, ya sea en nuestra relación con el Ministerio Público, con los tribunales de justicia y nuestra relación con el político, en la medida que haya iniciativas de ese poder político que tienen que ver con nuestra labor. No se ha tomado el peso de lo que ha significado la pésima explicación en torno al rol y funciones de un abogado penalista. En un país que demanda con urgencia más seguridad, el contar con un sistema penal fuerte es imprescindible para la debida aplicación de justicia. Si no confiamos en la institucionalidad de la ley, es poco lo que pueden hacer todas las demás instancias en materia de seguridad y orden público que son la base para la vida en comunidad.
- ¿Se sienten al margen o poco representados por el Colegio de Abogados?
- Lo que sucede no es que no nos sintamos representados por el Colegio de Abogados u otras instancias gremiales, lo que pasa es que últimamente el presidente del Colegio ha opinado respecto de la actividad de algunos abogados de manera poco informada y, eso, estimamos que no es correcto. No es apropiada la opinión que él ha dado. En cuanto a las actividades del Colegio y la necesidad de que haya un parámetro mínimo de ética controlado por una asociación gremial como el Colegio de Abogados nos parece correcto, es decir, nos parece correcto establecer parámetros claros de discusión en torno a la deontología y la ética de los abogados y, especialmente, de los abogados que se desempeñan en lo penal.
- ¿Cuáles son los objetivos de esta agrupación?
- Los objetivos de esta agrupación es reunir a los abogados penalistas de Chile fundamentalmente en tratar de colaborarnos, ayudarnos en torno a nuestras demandas y preocupaciones desde las más pedestres, desde las más significantes, hasta las preocupaciones públicas más importantes y también hacer sentir la voz de quienes nos desempeñamos en el ámbito penal a lo largo del país, respecto de los múltiples problemas que existen y que nos atañen.
Caso hermosilla
- ¿Cuál es su visión sobre lo que se conoce hasta ahora del Caso Audios y el abogado Hermosilla?
- Efectivamente, estamos muy preocupados por lo que se desprende del Caso Hermosilla, llamado Caso Audios, porque se han advertido ciertos ejercicios profesionales reñidos con estos parámetros éticos que a nosotros nos parece indispensables; donde prima más bien la influencia y no el argumento jurídico al interior del foro y al interior de los procesos. Nos preocupa, asimismo, la influencia que algunos abogados tienen o se han atribuido respecto de los nombramientos judiciales. Nos parece muy perjudicial en torno a la vulneración de los principios de igualdad y a la problemática de la corrupción que ello conlleva. Nos parece importante poder señalar nuestros argumentos en ese punto.
- ¿Han visto mermada la confianza de la gente hacia los abogados?
- Eso es claro. Las últimas encuestas le atribuyen al gremio una importancia muy negativa, una posición muy negativa en torno al papel que le debe ocupar a los abogados, respecto del desarrollo de la justicia. Entendemos que los abogados somos representantes de los intereses de nuestros clientes, pero también somos colaboradores de la administración de justicia y, por ende, ocupamos un lugar muy importante como intermediadores entre las personas, nuestros clientes, nuestros usuarios y los tribunales de justicia y los organismos públicos que desarrollan también funciones de justicia como el Ministerio Público. Cumplimos una labor muy importante, pero estos casos nos hacen ver realmente muy mal y provocan, si es que ya no lo había antes, un desmerecimiento de la función de abogado y, especialmente, del abogado que se desempeña en materias penales. Como abogados penalistas estamos muy preocupados porque los procedimientos éticos iniciados en el Colegio de Abogados no hayan dado resultado todavía respecto de los abogados involucrados y, eso, nos parece muy preocupante, porque a todas luces, aquí hay infracciones muy graves al comportamiento ético de los abogados involucrados.
"Estamos muy preocupados de lo que se desprende del Caso Hermosilla, porque se han advertido ciertos ejercicios profesionales reñidos con parámetros éticos".
Rodrigo Medina
Presidente ANAPEChile