DE TAPAS Y COPAS
POR MARCELO BELTRAND OPAZO, CRÍTICO GASTRONÓMICO
Pienso todo esto después de haber visitado el restaurante Nikko Seafood and Sushi, un restaurante nikkei especializado en mariscos y sushi ubicado en la avenida Borgoño, Concón. Degusté sus platos y conversé con Rodrigo Rojas. Me contó su historia, que es la historia del Nikko y de todo el trabajo que hay detrás, del equipo y de su experiencia, tanto aquí en Chile como en España. Las personas que se dedican a la gastronomía nunca dejan de sorprenderme.
Comenzamos con un negroni, siempre es bueno iniciar una comida con negroni. Desde hace un tiempo ya que lo primero que pido es negroni en un restaurante, y la verdad es que es un buen aperitivo, más que un pisco sour, ya que no es tan dulce, es más bien amargo, y uno se va a la segura, es decir, no quedará dulce. Bueno, comenzamos con un negroni y unas Gyozas (deliciosas masitas rellenas de pollo-camarón-verduras-cerdo). Las gyozas siempre vienen bien, son livianas, sabrosas y abren el apetito, especiales para compartir, y estas en particular estaban muy ricas, bien preparadas y el relleno sabroso. Mientras tanto, Rodrigo me cuenta que lleva 12 años con el restaurante, además, sus inicios en la gastronomía los hizo en España.
Después de las gyozas, seguimos con un plato que lo encuentran en la carta como EBI Furai (camarones ecuatorianos fritos en panco), que al igual que las gyozas, son perfectos como aperitivos (no olvidar que yo sigo con el negroni). Estos camarones fritos estaban crujientes y llenos de sabor. Me gustan los aperitivos antes del plato de fondo, porque permite conversar y disfrutar de la comida, tomarse el tiempo para vivir la experiencia culinaria. Afuera, el mar y la costa de Concón. La vista del Nikko es espectacular. Y para seguir con los otros platos, maridamos con un sauvignon blanc, fresco y equilibrado.
Mientras escribo esto, sigo pensando en el lenguaje y en las distintas formas de comunicación, y recordé un texto que aparece en el libro Las palabras y las cosas de Michel Foucault, que dice que Claude Duret señala que los hebreos, los cananeos, los samaritanos, los caldeos, los sirios, los egipcios, los fenicios, los cartagineses, los árabes, los sarracenos, los turcos, los moros, los persas y los tártaros escriben de derecha a izquierda, siguiendo así "el curso y movimiento diario del primer cielo, perfectísimo, en opinión del gran Aristóteles, acercándose a la unidad"; los griegos, los georgianos, los maronitas, los jacobitas, los coftitas, los serbios, los posnanos y, de cierto, los latinos y todos los europeos escriben de izquierda a derecha, siguiendo "el curso y movimiento del segundo cielo, conjunto de los siete planetas"; mientras que los hindúes, los cátenos, los chinos y los japoneses escriben de arriba a abajo, según "el orden de la naturaleza, que da a los hombres la cabeza alta y los pies bajos"; "al revés de los anteriores", los mexicanos escriben o bien de abajo a arriba o bien "en espirales, como las que el sol hace por su curso anual sobre el zodiaco". Bueno, estas distintas culturas también se han expresado y se expresan a través de la cocina, ya que esta, al igual que la palabra escrita es otra forma de comunicar, no solo ideas, sino que emociones y sentimientos. La cocina tiene algo que nos permite sociabilizar y compartir momentos, pequeños espacios de tiempo en el que la vida puede pasar frente a nosotros, como en una película.
Así fue la conversación con Rodrigo, porque mientras me contaba de sus inicios y de todo el trabajo puesto en el restorán, ante mis ojos pasaban las escenas de una serie, donde ese día era un capítulo más. Y todo, gracias a la gastronomía, ya que en ese momento era la excusa para conversar y conocer la vida.
Pero sigamos con la degustación, porque también vinimos a eso. Después de los camarones nos trajeron unos sushis, uno envuelto con salmón y otro con palta y tengo que reconocer que me gustan mucho los sushis y estos estaban ricos, bien envueltos y, lo más importante, los sabores estaban equilibrados.
Los sushis llegaron para quedarse. Hoy por hoy son un plato imprescindible en nuestra gastronomía, no sólo hay muchos restoranes de sushis, sino que estos han comprendido lo nikkei, es decir, la fusión de una técnica con los productos locales. Bien por la gastronomía nacional. Seguimos después con un plato que se encuentra en la carta como Malvado Doctor Tocino (salmón a la plancha, bañado en salsa pomodoro con trozos de tocino, tomate cherry, aceitunas y toques de queso parmesano, acompañado de espárragos trigueros a la parrilla, camarones y champiñones salteados). Esta propuesta gastronómica estaba realmente rica. Original, llena de sabor y texturas. Un plato contundente que tiene de todo, es decir, tiene lo que tiene que tener un plato. La combinación de la salsa pomodoro con el salmón, más los trozos de tocino dan como resultado todo un volcán de sabores. También es importante destacar que las particularidades de los distintos productos se pueden apreciar, el salmón y su grasitud o el tocino; y los tomatitos cherry, que aportan unos toques de acidez; luego, los vegetales asados, agregando más sabores y texturas. Felicitaciones por este plato.
Después de la larga y entretenida conversación sólo faltan los postres y me recomendaron dos: los Roll de Trufas y el Browne con helado (estaba tibio y lleno de sabor, con un helado que enfría el queque aportando frescor y equilibrio). Dos postres increíbles. Muy bien logrados. Pero quiero destacar el Roll de Trufas, porque cuando ustedes vayan a probar la gastronomía de Nikko tiene que pedir este postre. La idea misma me parece un gran acierto, es decir, un postre como sushi, luego, los sabores que logran, ya que la trufa de chocolate tenía el dulzor preciso, más la crema sobre estos, agregándole cremosidad y sabor. Realmente exquisitos. Estos postres los maridé con un amaretto más un café espresso.
Ya era tarde cuando terminé la degustación. Y hay cosas que me gustaron mucho del Nikko Seafood and Sushi, aparte de su gastronomía es la honestidad de la propuesta, ya que no pretender ser ningún otro restaurante sino el que es: buena comida, preparada con productos de calidad y excelente servicio. Qué más se puede pedir. Vengan a probar la propuesta gastronómica del Nikko Seafood and Sushi, quedan todos invitados.
Nikko Restaurant
Av. Borgoño 22902, Playa Amarilla, Concón.
Nikko, historia y sabor
La gastronomía es un lenguaje que expresa, que comunica tanto sabores como sentimientos y estados de ánimo. La conciencia que tenga de esto un restaurante puede hacer la diferencia, entendiendo que se elabora y prepara comida no para cualquier persona, sino que se cocinan platos pensados para un público que no sólo necesita alimentarse, sino que también desea vivir una experiencia gastronómica. Es interesante pensar la gastronomía como lenguaje, porque así podemos saber perfectamente qué es lo que me está diciendo tanto el chef como el restaurante, pues sus signos y símbolos de la decoración misma, también me están expresando, están comunicando. La palabra nos ayuda a significar y nombrar el mundo, luego, un plato puede dibujar a través de sabores, aromas, texturas y colores ese mundo.