ANEF está en pie de guerra por dictamen de nueva contralora
LABORAL. Funcionarios públicos protestaron en la sede porteña de Contraloría por la polémica decisión de dejar en manos de la Justicia la "confianza legítima".
En su primer dictamen como titular, la contralora general de la República, Dorothy Pérez, tomó la controvertida determinación de dejar sólo en manos de la Justicia la resolución del concepto de "confianza legítima", que atañe a quienes se les renueva su contrato año a año. El excontralor, Jorge Bermúdez, había zanjado que tras dos años de ejercer sucesivamente el cargo, los funcionarios podían tener la confianza legítima de que les sería renovado su contrato anual, y en caso contrario, podían acudir a la Contraloría o a la Justicia, sin embargo, Pérez se desligó del tema y dictaminó que sólo podrán reclamar en tribunales, con el consiguiente gasto en abogados y el antecedente de que la Justicia ha resuelto que la confianza legítima se daría tras cinco años en el cargo.
Frente a ello, ayer los funcionarios públicos protestaron a lo largo del país, y Valparaíso no fue la excepción, donde se reunieron en el frontis de la Contraloría Regional para manifestar su descontento con el dictamen.
Repudio al dictamen
Allí, el director regional de la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), Pablo Sanhueza, vicepresidente de Organizaciones, detalló que "venimos a responder a un llamado que hace ANEF Nacional respecto a repudiar el dictamen con el cual debuta la nueva contralora Nacional. Además, responder el llamado de las bases que nos manifestaron, desde el conocimiento de este dictamen, su preocupación respecto a la desprotección con la que quedan al no contar con una herramienta administrativa que le permita resguardar su trabajo como contrata".
Uno de los problemas del dictamen es que obligará a los afectados a ir a la justicia, con los consiguientes gastos en abogados. "Ese es un segundo elemento que no es menor, porque mucho del trabajo a contrata es precarizado y no se tienen los recursos suficientes. Además que desde el Poder Judicial, un Poder que hoy día está en cuestionamiento, los resultados no siempre son favorables. De hecho, los resultados son siempre de 3 a 2 respecto de favorecer, y han tenido dictámenes relativos de 3 a 5 años, aunque esto ha sido la constante. Pero es un proceso largo y que tiene que asumir sólo el funcionario o funcionaria que ha sido desvinculada".
Considerando que en diciembre habrá cambios en varias alcaldías, y que al ser cinco años el criterio que prima en la justicia, eso dejaría fuera a los funcionarios que entraron en este Gobierno, Sanhueza cree que "esto puede transformarse en una herramienta política de pedir cuentas a los funcionarios que puedan ser afines a determinado gobierno. Por eso nosotros, como ANEF, queremos solicitar y exigir al Presidente de la República que regularice a través de un proyecto de ley la posibilidad de normalizar estatutariamente la contratación de los contratas. O sea, modificar, en definitiva, el estatuto de la contrata, de tal forma que lo que hoy día entendemos como confianza legítima pasa a ser una ley".
"preocupación latente"
Por su parte, la tesorera regional de ANEF, Susana Cristi, planteó que la incertidumbre que se viene a fin de año para quienes están a contrata "es una preocupación latente muy grande, porque este escenario al que nos mueven es pasar a tribunales, donde los trabajadores, con los recursos que tienen, con los sueldos que tienen, no tienen capacidad para pagar individualmente lo que significa este proceso. Ahora esperamos que en este periodo no vengan estas desvinculaciones, porque de verdad que ahí vamos a estar en un escenario mucho peor, donde se precariza la función pública".
Cristi estima que el dictamen "al final parece como una revancha de la contralora frente al contralor Bermúdez, que es el que instauró la confianza legítima. Y yo creo que aquí se trata de cómo está operando ella en términos de lo que significan las políticas públicas que ha establecido este Gobierno. Yo creo que aquí hay una incoherencia profunda que el Gobierno debe resolver y que debe tratar de regularizar ya de una forma permanente, legal, jurídica, para que no tengamos que estar pasando cada año por estos sobresaltos y que los trabajadores, más aún con las precariedades laborales que tienen, tengan que vivir esta situación".
Sobre si esto se puede traducir en un proyecto de ley, Cristi subrayó que "eso es lo que queremos, y yo creo que ahora, justamente después de los puntos de prensa que se hicieron a nivel nacional y en Santiago, viene una conversación, vienen estados de alerta y viene una presión también para el Gobierno para poder instalar un proyecto definitivo que pueda realmente mejorar estas condiciones. En eso vamos a estar la próxima semana, viendo la agenda prioritaria para poder resolver esta situación".
En tanto, la abogada de ANEF nacional, Alejandra Miranda, advirtió que "la Justicia de hoy cree en la confianza legítima de cinco años. No sabemos lo que va a creer la Justicia de mañana. De hecho, la reincorporación de personas con cinco años es algo que hemos ganado en la Corte Suprema 3-2. O sea, hay algunos jueces, que creen que no hay confianza legítima nunca, ni en dos años, ni en cinco años, ni en 20. ¿Por qué? Porque el estatuto administrativo no ha sido modificado".
"Puede transformarse en una herramienta política de pedir cuentas a los funcionarios afines a determinado gobierno".
Pablo Sanhueza, Director regional de la ANEF
"Al final parece como una revancha de la contralora frente al contralor Bermúdez, que es el que instauró la confianza legítima".
Susana Cristi, Tesorera regional de la ANEF
"Hay algunos jueces, que creen que no hay confianza legítima nunca, ni en dos años, ni en cinco años, ni en 20. Porque el estatuto administrativo no ha sido modificado".
Alejandra Miranda, Abogada de la ANEF nacional
2 años era el tiempo que Contraloría consideraba confianza legítima. La justicia considera que son cinco.