Nicolás Arancibia Bórquez

El pasado 20 de octubre, cuando el partido entre Santiago Wanderers y la Universidad de Concepción no se pudo llevar a cabo producto de la negligencia administrativa de la sociedad anónima verde, la que tenía una deuda impaga con la empresa a cargo de proveer los guardias de seguridad para la realización del cotejo, cerca de 3 mil hinchas se quedaron fuera del estadio Elías Figueroa ante la imposibilidad de ver al equipo que tenía la opción de ganarse en cancha sus boletos a la liguilla.

Y si bien varios de esos fanáticos se fueron de vuelta a sus casas con enorme molestia por lo sucedido, otros entraron a la fuerza al coloso playanchino, rompiendo rejas y candados, para posteriormente realizar una serie de desmanes tanto al interior como al exterior del recinto, lo que generó incluso enfrentamientos por parte de los aficionados verdes con personal policial que llegó hasta el lugar.

Desde el IND ya realizaron un catastro de los daños, que por temas contractuales debe asumir el Decano, el cual asciende a una cifra de $17 millones. Según se pudo averiguar, el accionar de los forofos causó deterioros en el cierre perimetral del estadio, en vidrios de las casetas de transmisión y en la pista atlética, además de que se llevaron a cabo hurtos en el gimnasio de alto rendimiento del mismo coloso, en el que se sustrajeron mancuernas y variados tipos de implementos.

Póliza de seguros

Santiago Wanderers fue notificado durante la semana pasada de la millonaria cifra que deberán asumir, aunque al interior de la sociedad anónima existe tranquilidad, esto debido a que en el contrato de arriendo del estadio existe una póliza de seguro ante este tipo de situaciones, la que los porteños de hecho ya gestionaron.

Matías Sánchez, director de la escuadra caturra, indicó que "nosotros activamos un seguro que tenemos a raíz de los destrozos, entonces un lineador fue el día martes de esta misma semana a tomar los datos de cada uno de los daños que ocurrieron el día que no se pudo jugar el partido frente a la Universidad de Concepción. Por tanto, ahora es el liquidador quien se va a hacer cago de los pagos correspondientes".

Al ser consultado sobre si este mecanismo evitará que el Decano deba desembolsar algún tipo de dinero desde su propio bolsillo, entendiendo la delicada situación económica que afronta el club, el nieto de Reinaldo Sánchez explicó que "activamos la póliza y obviamente vamos a tener que pagar el tema del deducible y otros detalles, pero los daños en concreto, como están asegurados, los tiene que ver el liquidador".

Respecto a los plazos en que se terminará de sanear esta deuda, Sánchez reconoció que este tipo de procesos suelen tardar varios meses, pero que desde el club han hecho todo lo posible para agilizar el pago. "A la semana siguiente de que ocurrieron los hechos, en mi calidad de abogado del club, me contacté con la corredora de seguros. Una vez que todo esté catastrado, el seguro le va a dar una respuesta al IND y ahí ellos verán si la aceptan o no", cerró.

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El estadio Elías Figueroa Brander es uno de los cinco recintos que albergarán el Mundial sub 20 de fútbol que se realizará en nuestro país entre el 27 de septiembre y el 19 de octubre del próximo año. En ese sentido, personeros de la FIFA han realizado variadas visitas inspectivas al coloso playanchino para avanzar en el cuaderno de cargos que debe cumplir el estadio para albergar la cita planetaria. Según indican desde el interior del IND, el recinto de subida Carvallo ha avanzado positivamente en cada uno de los aspectos a mejorar para ser sede del torneo juvenil, labores que de todos modos continuarán avanzando dentro los próximos meses, independiente de los arreglos al coloso producto de los daños causados por hinchas wanderinos.

El Club Deportivo Downhill Quinta Costa realizó su primer encuentro gratuito de deportes de gravedad que se llevó a cabo durante el recién pasado fin de semana. El evento, que incluyó la participación de riders de longboard, roller inline y street luge, tuvo como objetivo proporcionar un espacio seguro para que los exponentes locales, iniciantes y avanzados, pudiesen entrenar y mejorar sus habilidades en una calle cerrada y libre de vehículos, contando además con sesiones de entrenamiento para distintos niveles, en donde los participantes aprendieron de riders con experiencia en distintas disciplinas.

La instancia se desarrolló en la calle Cerro Piuquenes, en el barrio industrial de Placilla, donde previo a la jornada se realizó una sesión de limpieza y retiro de escombros para así habilitar un espacio apto para el desarrollo de la actividad, garantizando un entorno controlado donde los participantes entrenaron y practicaron sin preocupaciones la modalidad del downhill.

"Queremos fomentar la práctica de estos deportes a la comunidad y brindar a los riders locales la oportunidad de entrenar de manera segura ", afirmó Jonathan Sepúlveda, presidente del Club Deportivo Downhill Quinta Costa.

De cara al futuro, esta organización busca participar en distintos campeonatos en Chile, y además están planificando distintas actividades con la comunidad, como talleres para principiantes, entrenamientos focalizados y charlas de seguridad vial.