Preocupante rechazo a la Casen
Insólitamente, la principal encuesta que sirve como insumo para las políticas sociales del país es poco respondida en Viña y Concón. Tampoco tiene la Casen vinculación alguna con la caracterización o registro social de hogares, beneficios sociales o la Ficha Básica de Emergencia (Fibe).
La Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen), realizada en Chile por el Ministerio de Desarrollo Social desde 1990, ha enfrentado problemas inusuales por estos días en la Región de Valparaíso, donde debieran visitarse casi 8 mil hogares entre el pasado 1 de noviembre de este año y el 31 de enero de 2025. Los traspiés se concentran específicamente en el alto grado de rechazo con el cual se han encontrado los encuestadores acreditados que representan al Departamento de Microdatos de la Universidad de Chile en Viña del Mar, donde el rechazo llega a un preocupante 16%, una de las más altas a nivel país, muchos de ellos bloqueados por los conserjes o administradores de edificios o condominios. Otros sencillamente desconfían ante la palpable inseguridad que golpea al país. Concón, casi como conurbación comunal, también ha caído en esta falta de disposición por parte de la población.
La Casen intenta realizar una radiografía socioeconómica que permita definir las variables del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), los fondos municipales, también tomar decisiones sobre políticas para combatir la desigualdad y la pobreza, además de las partidas de Educación y Salud.
La encuesta, en rigor, tarda media hora y consiste en una toma muestral que incluso puede ser respondida en horario a convenir, de lunes a lunes, como explica la seremi de Desarrollo Social, Claudia Espinoza, quien agrega que no es necesario que los encuestadores ingresen al domicilio si el vecino no lo quiere y que la misma es de carácter voluntaria y confidencial. Tampoco tiene la Casen vinculación alguna con la caracterización o registro social de hogares, beneficios sociales o la Ficha Básica de Emergencia (Fibe), por lo que el encuestado no arriesga cambio alguno en su situación particular.
En suma, la seremi Espinoza -quizás una de las secretarias regionales más capaces y profesionales del gabinete- pide ayuda a la población para cumplir con una tarea que no tiene color político, sino que es primordial y cuyas conclusiones incluso serán llevadas la práctica durante el próximo Gobierno. Es responsabilidad de todos.