El Betis logró clasificarse este miércoles para la tercera ronda de la Copa del Rey al derrotar por 1-3 al Sant Andreu, de Segunda RFEF (cuarta categoría española), que puso contra las cuerdas al equipo dirigido por Manuel Pellegrini.
La victoria del Betis logró poner fin a una racha de tres partidos seguidos perdiendo en la liga española y le da algo de oxígeno al "Ingeniero", que sigue fuertemente cuestionado por los aficionados y la prensa deportiva hispana dados los últimos resultados.
En el partido de ayer, el Betis arrancó fuerte. El argentino Ezequiel Chimy Ávila hizo el 0-1 a los 27 del primer tiempo.
Y aún con el gol en contra, el Sant Andreu siguió presionando y estableciendo orden en defensa.
Pero no llegó con peligro hasta que Serrano, el jugador más peligroso del conjunto barcelonés, recibió entre líneas para hacer una pared con Jurado y definir sobre la salida del portero visitante en el minuto 36.
El 1-1 desataba la locura en el estadio Narcí Sala y era el premio a la propuesta valiente por no cerrarse atrás e intentando desafiar la presión del equipo sevillano, que encima vio cómo el Sant Andreu salía mucho mejor que él tras la reanudación.
¿Penales?
Fue tanto así, que los locales reclamaron penal por unas manos del recién ingresado Sabaly y, en la jugada siguiente, el Betis otro por un derribo a Lo Celso en el área contraria. El árbitro, Busquets Ferrer, probablemente hubiera señalado ambos. Eso, si hubiese habido VAR.
Pellegrini empezaba a ver cómo de verdad empezaba a naufragar en la eliminatoria y hacía un triple cambio, dando entrada a Altimira, Abde y Vítor Roque.
La entrada del delantero brasileño cedido por el Barcelona resultó a la postre decisiva. Primero, obligó a lucirse a Nil con un disparo seco y raso nada más ingresar en el campo. Así, forzó un penal que falló, pero que convirtió Bartra en la insistencia.
Ahí se acabó la resistencia del Sant Andreu. Y a los 96, Abde convirtió tras recibir un pase de Mateo al segundo palo del Sant Andreu, que a estas alturas ya se notaba cansado y sin reacción.
El "Ingeniero" respira, pero el repunte de sus hombres no convence.