"Chile será 'República digital' por la razón y la fuerza de los datos"
Senador con cupo RN, pero más hombre de Estado y de escasa ambición mediática, Kenneth Pugh enfrenta su último año en el cargo, sin certezas sobre su futuro y preocupado sobre los desafíos de modernizar la estructura pública, los problemas de la ciberseguridad y la necesidad de hacer de Chile una futura "República digital".
- Con respecto a la Ley de Ciberseguridad, en la que usted cumplió un rol importante, ¿cuánto avanza Chile en esta materia?
- La ley se promulgó en abril de este año y eso significa que la nueva Agencia Nacional de Ciberseguridad, que es la nueva institucionalidad, tiene que partir en 2025. Con esto ya se sabe a quiénes alcanza la ley. Hay empresas, especialmente las que producen servicios esenciales, infraestructura crítica como se le conoce, que ya saben que van a estar sujetos a la ley. Y esto ha permitido que adopten medidas de autorregulación, incluso antes de que el nuevo organismo entre en vigencia. Ya se han empezado a cambiar procedimientos, ya se está hablando en los directorios, en los gobiernos corporativos, sobre ciberseguridad, y eso da cuenta del logro. Ya se están haciendo inversiones e incluso han aparecido talentos. La profesión más demandada este año fueron los ingenieros en ciberseguridad. Adoptamos una legislación antes que muchísimos países europeos y con eso nos ponemos a la vanguardia en el continente.
- La ley aún no entra en vigencia. ¿Cuáles son los principales riesgos?
- Por supuesto, los riesgos son altos. Los ataques en el mundo han aumentado porque el crimen organizado se ha dado cuenta que es muy rentable efectuar ciberataques, especialmente con ransomware, que es el secuestro digital. Llegan, hacen ingeniería social, ingresan a los sistemas, los bloquean y a cambio piden dinero. Si en este tema de los ciberataques no hay una ética o asuntos ideológicos, sino mucho dinero. Estos ataques afectan principalmente a la industria y a la industria crítica sobre todo. En Chile, afortunadamente, existe conciencia de que los sistemas tienen que ser robustos y resilientes. Si en el mundo los ataques por ransomware aumentan, en Chile se ha mantenido estable porque se ha generado, a partir de la ley, cierta conciencia.
- ¿Quiénes son las principales víctimas en nuestro país y de dónde provienen los ataques?
- Los actores involucrados en este momento son actores que tienen alta capacidad, que usan gente especializada, están apoyados por inteligencia artificial y, básicamente, están detrás del crimen organizado, o bien son actores estatales encubiertos. Son grupos que se conocen como "amenazas persistentes avanzadas", los APT, que están todos numerados, identificados y son los que están haciendo estas acciones. Buscan, obviamente, debilitar países, destruir reputaciones y siempre detrás del dinero. ¿Quiénes son las víctimas? Como te decía antes, la infraestructura crítica, porque es sensible, dedicada, y es donde pueden tener mayor rentabilidad. Habiendo dicho eso, también las personas están siendo hoy afectadas por criminales de otra magnitud, que son los cibercarteristas, como se le llama y que hasta pueden imitar las voces, por medio de inteligencia artificial.
A una REPÚBLICA DIGITAL
- En términos generales, ¿qué tan atrasado está el Estado chileno a la hora de sacar partido a las tecnologías, al uso eficiente de datos, para ejercer su rol con mayor eficiencia?
- En Chile la tecnología no se está usando como debiera ser usada. Chile es un país que está a la vanguardia en conectividad digital. Tenemos las redes más rápidas, pero las estamos usando para las redes sociales y ver películas en Netflix, no para hacer más robusto el país, para poder intercambiar información y poder con esa información adelantarnos a los hechos. Hay una cantidad de información que podría ayudar a la gestión, pero, por ejemplo, cada ministerio o servicio guarda sus propios datos y no los comparte. Falta interoperabilidad y nos ha costado. Aquí debe haber un cambio cultural. Ni siquiera hablamos de un problema técnico, sino político. Tenemos que redefinir la función pública y transformarla por medio de tecnología.
- ¿En qué se tienen que poner de acuerdo los políticos para hacer más eficiente el Estado en el uso de sus recursos por medio de la tecnología?
- Pasa que hoy día estamos en las cavernas digitales a nivel de Estado y te diría que incluso en algunas empresas, que no han sido capaces de entender esta transformación. Mira, mi propuesta es la siguiente: yo estoy convencido que Chile va a ser, y te lo puedo garantizar, una 'República digital', y eso se va a dar por la razón, pero también por fuerza de los datos. Hoy día las economías del mundo se mueven con los datos y esos datos deberían estar de forma transparente en los sistemas, conectados entre sí.
-¿Eso garantizaría la probidad?
-La transformación de la función pública se dará mediante la transformación digital, permitiendo que las personas tengan acceso a la información que es abierta, pública, de forma directa, sin tener que ni siquiera preguntar, o que alguien tenga que trabajar para buscar esa información. Lo que espera la ciudadanía son respuestas rápidas, que el dinero público se use bien, que las cosas no se atrasen, ni perder el tiempo innecesariamente en burocracia. Cuando tú tienes transparencia en los sistemas digitales y en la información pública, la probidad llegará sola.
Su futuro en política
- El próximo año hay recambio de senadores. ¿Usted quiere ir a la reelección?
- Bueno, todos los que hacemos política estamos deseosos de poder seguir participando, pero esas cosas no dependen de uno mismo, sino de muchos factores, y uno de ellos es que vamos a tener un nuevo sistema político. O sea, hay varios elementos. Yo voy a esperar prudentemente. Soy una persona prudente, nunca me he anticipado, nunca he adelantado una votación y tampoco, siendo consecuente con lo que he dicho, voy a decir ahora que sí o que no. Yo voy a seguir en políticas públicas, por supuesto, no tenga ninguna duda, y voy a estar disponible, pero va a depender de otros, probablemente, las cosas que ocurran con mi carrera política el próximo año.
"Voy a estar disponible, pero va a depender de otros, probablemente, las cosas que ocurran con mi carrera política el próximo año".