Ataque ruso en Kiev deja un fallecido y daños en embajadas, como la de Argentina
GUERRA. Gobierno de Javier Milei calificó bombardeo como "grave violación" al derecho internacional, mientras que Portugal dijo que lo ocurrido es "altamente condenable". En tanto, Rusia justificó agresión con misiles como "respuesta" a otra de Ucrania.
Rusia volvió a golpear ayer el centro de Kiev, la capital de Ucrania, con cinco misiles balísticos norcoreanos y de fabricación propia que causaron daños materiales "relativamente leves" en las embajadas de varios países, como Argentina y Portugal, pero que según las autoridades ucranianas mató a una persona e hirió a otras 12.
El bombardeo provocó daños en cinco distritos de la capital de Ucrania. En una de estas zonas, contigua al estadio Olímpico de Kiev, un edificio de oficinas, locales comerciales y un hotel sufrieron graves daños, según las autoridades ucranianas por la caída de fragmentos de misiles interceptados.
Los cristales de las embajadas de Argentina, Portugal, Albania, Macedonia del Norte, Montenegro y Palestina, que se encuentran en un edificio situado a pocos metros del lugar de las explosiones, sufrieron daños menores, según informaron los Ministerios de Exteriores de Ucrania y de algunos países afectados y pudo constatar Efe.
"Aumenten el apoyo a Ucrania y presionen a Rusia para lograr una paz justa, antes de que esto se convierta en una realidad para otras ciudad europeas", escribió sobre los desperfectos en las legaciones diplomáticas en la red social X el ministro de Exteriores ucraniano, Andrí Sibiga, que compartió con el mensaje una fotografía de la catedral católica de San Nicolás, también afectada por el ataque.
Por su lado, el Gobierno argentino de Javier Milei expresó su "enérgica" condena al ataque y lo calificó como una "grave violación" al derecho internacional.
"La República Argentina condena enérgicamente el ataque de la Federación Rusa ocurrido hoy, 20 de diciembre, contra la capital ucraniana, Kiev, que ocasionó daños materiales a la embajada de nuestro país y a otras representaciones diplomáticas en dicha capital", expresó la Cancillería argentina en un comunicado.
El Ministerio de Exteriores trasandino también expresó su "solidaridad" a las víctimas del ataque a Kiev y a sus familias.
Para el Gobierno de Milei, "este ataque constituye una grave violación del derecho internacional, que garantiza la inviolabilidad de las misiones diplomáticas".
"Condenamos enérgicamente cualquier acto que ponga en peligro la seguridad del personal diplomático y de la población civil, e instamos al cese inmediato de las hostilidades y al respeto de las normas internacionales", añadió el texto.
Por su parte, el ministro de Exteriores luso, Paulo Rangel, también se pronunció sobre lo ocurrido: "Esto es altamente condenable", dijo el ministro, y añadió que "es absolutamente inaceptable que pueda haber ataques que tengan impacto o afecten a instalaciones diplomáticas" y anunció que presentará una "protesta formal" ante la embajada rusa en Lisboa.
Kremlin
Por su parte, el Kremlin presentó el ataque como una represalia por el último ataque ucraniano con diez misiles ATACMS y Storm Shadow, que alcanzó el miércoles un combinado químico de la región rusa de Rostov.
"En respuesta a las acciones del régimen de Kiev, apoyado por sus patrocinadores occidentales, esta mañana fue lanzado un ataque combinado con armas de alta precisión y largo alcance", dijo el Ministerio de Defensa ruso.
Mientras que la Fuerza Aérea ucraniana dijo haber derribado los 5 misiles, el parte castrense ruso aseguró haber alcanzado una comandancia del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) y una empresa ucraniana que produce misiles.
Moscú agregó además que posiciones de los sistemas de misiles antiaéreos Patriot recibidos por Ucrania de países occidentales también fueron alcanzados en los últimos ataques aéreos.