"¿Por qué no volver a las minas antipersonales? (...) Hay que tomar medidas mucho más drásticas"
En medio de la creciente crisis migratoria que afecta al país, la diputada Camila Flores (RN), presidenta de la Comisión de Defensa de la Cámara, criticó duramente la gestión del Gobierno en materia de control fronterizo y anunció que realizará un viaje a la zona norte junto a la candidata presidencial Evelyn Matthei. El objetivo es conocer de cerca la situación y evaluar medidas concretas y más estrictas para enfrentar este desafío.
- Uno de los últimos debates que se generó en torno a la llegada inmigrantes fue la intención del gobierno por regularizar a casi 180 mil. ¿En qué está eso y cuál es la situación actual?
- Acá efectivamente hubo un intento de parte del Gobierno para regularizar a inmigrantes que habrían ingresado de manera ilegal a nuestro país. El subsecretario del Interior, Luis Cordero, habló de una cifra superior a los 180.000 inmigrantes que pretendían regularizar y nosotros, inmediatamente, pusimos las voces de alerta, denunciamos esta situación y por eso, al parecer, no se habría concretado. Lo único que el Gobierno ha dicho en torno a esto últimamente es que se hizo un acuerdo con Bolivia para poder reconducir a estas personas, a estos extranjeros, pero no sabemos a qué costo ni si esto le está generando beneficios a nuestro país. Tú no sacas nada al saber cuántos inmigrantes tienes en el país, quiénes son, en qué situación ingresaron, si han cometido delitos o no, mientras por otro lado siguen llegando todos los días. Lo que se ha hecho hoy día en el país es absolutamente insuficiente, aquí hay que tomar medidas que sean mucho más drásticas.
- Pero ¿cuáles son esas medidas?
- En algún minuto incluso tuvimos minas antipersonales en la zona y eso era aceptado, pero después Chile firmó algunos tratados internacionales y eso se tuvo que desechar. Pero, por ejemplo, ¿por qué no volver a las minas antipersonales? Lamentablemente, mientras en Chile no tengamos el control de nuestras fronteras, hay que tomar medidas mucho más drásticas. Y si eso implica tener que renunciar a un tratado internacional, bueno, tendrá que ser así. Si vamos a tener militares en la zona para tenerlos ahí parados, pero sin la autorización para disparar, no sirve de nada. Además, hay que generar un cierre mucho más profundo, como cuando se habló de una zanja. Yo no sé si tiene que ser una muralla o una zanja, pero tenemos que controlar las fronteras en el país.
Críticas en seguridad
- ¿Qué espera la oposición de este último año de gobierno en materia de seguridad?
- La verdad es que cualquier medida que se pueda tomar, a un año de finalizar el Gobierno, llega tarde; primero, porque para estas personas nunca fue una prioridad la seguridad. Si hoy día el Gobierno se preocupa de la seguridad es porque perdieron la batalla cultural. Hay que tener presente que para ellos era cualquier otra cosa más importante, menos la seguridad. Pero finalmente se encontraron con algo que es fundamental, con la realidad que se les terminó imponiendo y que los obliga a estar todos los días hablando del tema. Pero en el fondo no es más que eso, palabras, discursos vacíos, puestas en escena, pero en términos concretos, si el país no está peor es por nuestros carabineros.
- En la última elección municipal, todas las candidaturas presentaron sus propuestas en seguridad y el tema hasta se hizo monótono. ¿De qué depende la eficacia en este tema?
- Lo que pasa es que la ultraizquierda tomó el tema de la seguridad por una cuestión netamente electoral, porque antes eran los que andaban con la polera del perro matapacos. ¿Por qué? Porque hoy día los carabineros, nuestras Fuerzas Armadas, están bien valoradas por la ciudadanía, que está cansada de la delincuencia, pero no fue por un convencimiento puro de que este siempre ha sido un tema prioritario para los chilenos, sobre todo en estos últimos años.
- A nivel regional, ¿tiene alguna expectativa del delegado Yanino Riquelme?
- Es que con el Presidente que tenemos, que tiene otras prioridades y que no tiene la cabeza bien puesta en seguridad, difícilmente tú vas a tener autoridades regionales que hagan las cosas de manera distinta. Porque la seguridad es una cuestión que se trabaja a nivel nacional con bajadas regionales, y nosotros, gracias a Dios, tenemos una mayor dotación de carabineros en la región, que llegaron a propósito del Plan Verano Seguro. Pero yo creo que esto no va a mejorar, va a empeorar, y sobre todo porque algunos tuvieron la brillante idea de aprobar un Ministerio de Seguridad que instalará en las regiones a un seremi de Seguridad, sumándose a los delegados, que ya no van a servir de nada. Bueno, probablemente nunca han servido de mucho, pero ahora van a servir menos, porque vas a tener por un lado al seremi, a los delegados, al gobernador regional.
- ¿Los delegados ya no dan para más?
- Efectivamente, yo creo que los delegados presidenciales no tienen ninguna razón de existir en el país, porque tenemos gobernadores regionales. Desde el minuto en que se creó la figura democrática, a través del voto popular, del gobernador regional, no tenía ningún sentido seguir manteniendo a los delegados presidenciales. Y yo quiero recordar que una de las promesas de campaña de Gabriel Boric fue, precisamente, la de terminar en el primer año de gobierno con la figura de los delegados presidenciales y hasta el minuto no han mostrado ni una intención de hacerlo. Por el contrario, los mantienen y los siguen fortaleciendo, como lo que pasó en la región, que sacaron a la delegada para que sea candidata a diputada.
"Si hoy día el Gobierno se preocupa de la seguridad es porque perdieron la batalla cultural. (…) Para ellos era cualquier otra cosa más importante, menos la seguridad".