Un edificio para el Gore Valparaíso
Consejeros regionales propusieron que el Ministerio de Bienes Nacionales ceda al Gore el edificio Esmeralda, en Valparaíso. Antes de tomar una decisión en este tema, los consejeros harían bien en analizarla más a fondo, con varias alternativas sobre la mesa.
A más de un año de la explosión y posterior incendio que derivó en la inhabitabilidad de varios pisos en el edificio Esmeralda, sede del Gobierno Regional (Gore), la DPR y una veintena de servicios públicos, persisten las controversias en torno a qué lugar de sesiones permanentes tendrá el Consejo Regional (Core) de Valparaíso y qué pasará con el viejo inmueble de la calle Melgarejo, cuyas reparaciones no tienen itinerario conocido y son fuertemente cuestionadas por los consejeros. Esta semana, la Dirección de Presupuestos (Dipres) autorizó el arriendo de dos inmuebles separados para el funcionamiento provisorio del Gore y el Consejo Regional, lo que provocó el reclamo de los integrantes del cuerpo colegiado, quienes acusan que el trabajo en sedes distintas puede afectar la vinculación de las dos instituciones más importantes de la orgánica regional. Para los cores, los tres años que estarán sin poder regresar al edificio Esmeralda es un periodo favorable a la idea de gestionar con Bienes Nacionales la adquisición definitiva del edificio. Este gesto no solamente solucionaría el lugar de sesiones, sino que profundizaría el proceso de descentralización y subsanaría esa profunda contradicción que pone al Gobierno Central como dueño de la sede que alberga a los principales órganos de su símil en Valparaíso.
Si bien la idea genera cierto consenso entre los cores, ninguno ha planteado las dificultades que tiene hacerse cargo de un edificio con casi 50 años, que presenta múltiples problemas eléctricos y su reparación ha sido calculada en cientos de millones de pesos.
Resulta encomiable la propuesta de que tanto el Gobierno Regional como el Core tengan un edificio propio que sea capaz de simbolizar el compromiso de todas las autoridades con la descentralización del poder político, pero antes de tomar una decisión en este tema, los consejeros harían bien en analizarla más a fondo, con varias alternativas sobre la mesa.