Flor Arbulú A.

Este 23 de enero se cumple una década desde que Pedro Lemebel falleciera, pero su presencia sigue tan vigente como si estuviera escribiendo ahora sus crónicas. Así al menos lo percibe Jovana Skármeta, quien fuera su agente literaria y autora, junto a Marcelo Simonetti, de la más reciente biografía del escritor, "Tu voz existe. Vida de Pedro Lemebel" (Ed. Planeta).

"Él ahora está más vigente que nunca y que antes, porque da la impresión que Pedro Lemebel fue un adelantado. Varios temas que él traía a la mesa, que él hablaba, que él criticaba aparecieron para el estallido social", asegura la también directora del sello Universidad de Valparaíso.

Desde su perspectiva, "se puede entender ahora mejor, sobre todo en la juventud", y por eso se ha convertido en una especie de "ícono". De allí, por ejemplo, que haya un mural en el Liceo Bicentenario de Valparaíso con su imagen o que abunden personas con una polera con su cara.

Diversas miradas

Pero ¿quién fue este hombre que nació bajo el nombre de Pedro Mardones Lemebel, fue profesor de Artes Plásticas, participó como ayudista del FPMR y se hizo de un nombre en la movida literaria nacional y extranjera?

Son preguntas que intenta responder el libro, que fue presentado el sábado en el marco de la 43ª Feria del Libro de Viña del Mar. Aunque Skármeta advierte que "ni Marcelo Simonetti ni yo, ni este equipo somos dueño de la verdad de Lemebel, pero sí aportamos una mirada"; y es lo mismo que opina de los trabajos realizados por otros autores como Soledad Bianchi ("Lemebel", Ed. Montacerdos), de Catalina Mena ("Pedro Lemebel", Ed. Hueders), de Óscar Contardo ("Loca fuerte", Ediciones UDP) y Juan Pablo Sutherland ("Lemebel sin Lemebel", Alquimia Ediciones), que también acaba de ser publicada.

"Creo que cada uno, cada biógrafo, cada periodista o investigador va a entregar una mirada del personaje", afirma, añadiendo que "mientras más biografías existan de una persona tan potente como Pedro, yo creo que es mejor".

Quizás el gran plus con la que contaron Skármeta y Simonetti fue contar con la autorización de la sobrina del autor, que también apoyó la publicación mostrando cuadernos de cuando era adolescente, dibujos, fotos y otros. Esto también significó que pudieron acceder a parte de la familia, como una tía, hermana de su mamá que vive en la Región de Valparaíso.

- ¿La familia censuró algún tema?

- Nada. De temas y eso, nada. Cuando empezamos (2019) el hermano de Pedro estaba vivo, pero no alcanzamos a entrevistarlo. (...) Ellos no nos pusieron ninguna traba en cuanto a temas y no leyeron tampoco, no sabían qué íbamos escribiendo. (...) Ni estaba en el contrato de que hubiera que mostrarles el manuscrito.

- ¿Y qué han dicho ahora que ya salió publicado?

- Me han dicho que les gustó. La verdad es que no me han dicho nada más en profundidad.

Llegar a acuerdos

Editorial Planeta fue la que convocó a Jovana Skármeta para escribir esta biografía, y esta a su vez a Marcelo Simonetti, algo que le permitió encontrar una especie de equilibrio entre alguien que lo conoció mucho, habiendo sido su agente y amiga desde 1999 hasta que falleció, y alguien cuyo único acercamiento fue una entrevista fallida para la revista "Sábado". "Quizás si yo lo hubiera hecho sola, habiendo conocido tanto a Pedro como lo conocí, puede ser que no hubiera la suficiente distancia", reflexiona Jovana.

Al mismo tiempo, reconoce que si bien compartió mucho con el autor de "Loco afán", "yo conozco mucho ese periodo de Pedro, pero él es una vida de 62 años, no de 10 años". En ese sentido, "era difícil no engolosinarme pensando en que tal historia, tal anécdota, tal recuerdo, yo lo veía quizás con una importancia muy grande; y, quizás, puesto en una balanza, viendo como todos los años, era una parte más solamente", dice.

Cuando llegó la hora de poner en papel toda la investigación realizada -hecha en gran parte en pandemia, y con mucha entrevista por Zoom-, decidieron hacerlo en tercera persona. "No podía haber un nosotros, ni tampoco estoy en toda la vida, ni en tantas partes donde, porque no soy la viuda", acota, por lo que en su aparición en el libro "yo soy tratada como otra fuente más, que puede ser como divertido o raro".

Lo distinto

El título del libro, "Tu voz existe", no es casualidad. Hace referencia a una canción que le gustaba al autor de "Tengo miedo, torero" llamada "Tu voz" y que cantaba la peruana Lucha Reyes, además de una crónica homónima hecha por el escritor.

Asimismo, cada capítulo lleva una estrofa de una canción para demostrar el gusto que tenía Lemebel por la música. Es más, el libro incluye un capítulo especialmente dedicado a su amor por las canciones.

"A mí es uno de los que más me gusta, porque la música cruzaba todas las facetas de Pedro y toda su historia de vida. Y de una variedad muy grande, pasando desde los boleros, las rancheras, hasta el rock anglo, todo nuestro rock latino, italiano", comenta Jovana Skármeta.

"Tratamos -continúa- de poner algunas que les gustaban, no pudimos abarcarlo todo, pero está, por ejemplo, Manu Chao, Hervé Vilard, Buena Vista Social Club, Juan Gabriel, Quilapayún". "Era un personaje que sabía mucho de música. Incluso un amigo cuenta ahí en el libro que, a veces, era medio dictador y tú tenías que estar escuchando a Chabela Vargas por tres horas".

Además, "le gustaba bailar". "De hecho, en el capítulo de infancia dice que él quiere escribir a 'Música Libre', el programa que había en los años 70", cuenta Skármeta, asegurando que "hubiese sido muy raro" verlo ahí.

Otro aspecto que destaca la coautora y que "me gusta mucho" es que "la gente pueda ver cómo fue su infancia. Él estuvo en un entorno muy querido por su familia. Si bien sufrió bullying en el colegio, en los liceos, en la escuela, él tuvo una familia, un papá y una mamá que lo quiso mucho. Y eso lo puede ver la gente en la biografía y eso es bonito, porque hay de repente otra imagen".

- ¿Hay algo que les haya sorprendido de esta investigación?

- En lo personal, me impresionó mucho y también Marcelo el otro día respondía lo mismo, que nosotros pensábamos que su época de profesor de artes plásticas en los liceos y escuelas no había sido tan buena. Y al leer su cuaderno, al entrevistar a sus alumnos, nos encontramos con un Pedro profesor que no se lo imaginaban, que era muy entregado, que al parecer en la docencia lo pasó muy bien, salvo porque lo despiden y todo.

"Quizás si yo lo hubiera hecho sola, habiendo conocido tanto a Pedro como lo conocí, puede ser que no hubiera la suficiente distancia".

Jovana Skármeta, Coautora de "Tu voz existe"

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