"El turismo de compras por supuesto que nos ayuda, pero sabemos que es algo coyuntural"
Complejo viene siendo el escenario para el sector comercio en los últimos años. Aún convaleciente tras la pandemia, debe enfrentar altos índices de victimización, lo que se suma a la competencia de la actividad ilegal, tanto física como digital, y ajustarse a una serie de cambios en el ámbito laboral.
"Creo que también hay que recuperar un poco el tejido comercial de algunas ciudades como es el caso de Valparaíso", comenta el ingeniero comercial Andrés Bogolasky, recientemente elegido presidente de la Asociación Gremial Marcas de Retail, que agrupa 80 socios, casi 190 marcas y más de 2.000 locales con una fuerte presencia también en la región.
- ¿El comercio minorista está totalmente recuperado después de lo que fue la pandemia?
- A ver, yo creo que nadie planificó una pandemia que implicó un año completo prácticamente de cierre. Hubo varias medidas como los créditos Fogape y otras herramientas que surgieron y que permitieron paliar o aminorar, en alguna medida, el impacto directo durante ese periodo puntual. Ahora, sí quedan heridas profundas en cuanto a deudas que se contrajeron. Entonces, yo no te diría que está 100 % cerrado el capítulo, porque hay varios emprendedores que lamentablemente han debido cerrar su operación en los últimos años y otros que en alguna medida siguen golpeados por lo que fueron las consecuencias pospandemia.
- ¿El comercio ilegal, tanto físico como digital, es la principal preocupación del sector?
- Son dos temas muy relevantes y están dentro de los ejes prioritarios de nuestra Asociación. Efectivamente, el comercio informal emplea cerca del 25% de la fuerza laboral del comercio. Además de todas las complejidades que tiene por la falta de protección laboral y el riesgo para los consumidores porque implica adquirir productos que no tienen garantías, no hay una competencia pareja. El comercio formal tiene que pagar arriendo, patentes y todos los costos laborales asociados. Entonces, es una forma bastante injusta de competir para quienes intentamos y hacemos todos los esfuerzos humanamente posibles por cumplir a cabalidad cada una de las legislaciones laborales, municipales, etcétera.
la inseguridad
- Asimismo, hay una relación del comercio informal con la inseguridad, según dan cuenta varios estudios.
- Otra complejidad asociada es que el comercio informal facilita la aparición de inseguridad. Hay un estudio que muestra que aumenta en un 70% la victimización en los casos que hay un comercio informal, ilegal o pirata en las cercanías de un local establecido. Y dado que el 40% de los comercios formales que están en régimen, tienen un comercio informal afuera de sus instalaciones, la situación es muy compleja.
- En la última encuesta de victimización, la zona de Valparaíso y Viña del Mar presentó la tasa más alta.
- Sabemos que es una zona que ha sufrido bastante con el comercio informal y ha tenido un impacto muy directo en el establecido, en distintas calles principales de Valparaíso y en otras locaciones donde la verdad ha sido muy complejo. Ahora, esto que pasa a nivel de comercio informal físico también sucede a nivel del comercio digital. Es una industria que crece a doble dígito anualmente, y que involucra todo el tema de falsificaciones e importaciones irregulares. Se evaden normas, no se paga el impuesto, donde nuevamente no viene la garantía asociada, por ejemplo.
- Como gremio, ¿echan de menos políticas más efectivas para enfrentar este tema?
- Por supuesto, o sea, tanto a nivel físico como digital, de todas maneras (…). Participamos en una mesa que se conformó hace tres semanas atrás específica de retail para trabajar este y otros temas, y dentro de algunas propuestas que han salido en conjunto, lideradas por la Cámara Nacional de Comercio, surgieron 50 medidas para abordar el tema de la informalidad y de la seguridad. Por ejemplo, hay miles de productos electrónicos que entran al país sin ningún tipo de fiscalización y no cumplen con los estándares de certificación SEC, algo que a cualquier importador normal que tiene un comercio establecido se le exige para poder vender. Allí se sugiere aumentar la tasa de inspección a nivel aduanero, que hoy es muy baja en relación a los países OCDE. Y esa es una medida concreta para tratar de controlar este tema que hoy está bastante fuera de control en la práctica.
- El llamado turismo de compras ha tenido un alto impacto en la Región de Valparaíso, ¿es una especie de salvavidas para el comercio?
- Sin duda es importante que los argentinos y el resto de los turistas de otros países comiencen a volver, pues aún no alcanzamos las cifras del año 2017 que fue el peak de ingreso de los visitantes trasandinos. Lo bueno es que sigue mostrando señales favorables. Ahora, el turismo de compras por supuesto que ayuda, pero sabemos que es algo coyuntural. Como lo vemos, hay condiciones cambiarias que hoy están favoreciendo, sin embargo, es bastante temerario el afirmar que estas se van a sostener los próximos cinco años. Hay un escenario global muy revuelto con lo que está pasando con la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China básicamente, pero que tiene un impacto en todo el mundo.
- ¿Es difícil proyectar que esto puede perdurar en el tiempo?
- Al ser el entorno global tan incierto poder proyectar cuál va a ser la realidad cambiaria entre Chile y su vecino es un poco utópico. Sin embargo, afortunadamente en estos meses ha vuelto una masa importante de turistas liderados por los argentinos. El hecho que se haya permitido abrir las tiendas en Semana Santa también ayudó.
- Entonces no se puede depender sólo del turismo de compras.
- Claro, nadie sabe lo que va pasar con el tipo de cambio en Argentina. No sabemos si estas situaciones permanecerán en el largo plazo, hay varias especulaciones al respecto, varias teorías, pero por ahora sí nos está favoreciendo y dependiendo de la categoría, un producto acá les puede salir 30 %, 40 % y hasta un 80% más barato en algunas categorías respecto a lo que pueden conseguir en su país. Pero uno no puede depender de factores exógenos que obviamente a nivel local no podemos controlar.
- En cuanto a las ventas, ¿cómo se ven las perspectivas para este año?
- Estamos en un entorno desafiante, donde el país está creciendo un 2%. Hay distintas estimaciones, se sigue manteniendo a nivel del Ejecutivo una estimación de un 2,5%, que creemos es insuficiente y es la misma tasa que hemos venido creciendo el año anterior y no hemos podido despegar de ese rango. Además del comercio informal, está el tema de los mall chinos. En la medida que ellos cumplieran con todas las legislaciones, con todos los productos con garantía, entregando boletas en el 100% de las transacciones, obviamente, sería perfecto (…). Al menos hay varios indicios que señalan que se incumple uno o más de estos factores que menciono. Entonces, en este entorno de crecimiento bajo, de competencia que no juega en una cancha pareja (…), implica que hay condiciones bastante desafiantes con costos laborales aumentando, con el sueldo mínimo elevándose, con la aplicación de las 40 horas. Entonces, por todos lados, el comercio formal recibe embates en un entorno de crecimiento bajo, lo cual sin duda nos genera un escenario que es bastante desafiante.
"En este entorno de crecimiento bajo, de competencia que no juega en una cancha pareja, el escenario es bien desafiante para el comercio".
"Hay condiciones cambiarias que hoy están favoreciendo, sin embargo, es bastante temerario el afirmar que estas se van a sostener los próximos cinco años".